¿Atraso cambiario o mito? El debate que traba la liberación del cepo

Argumentos cruzados sobre precios, competitividad y riesgos económicos desafían las estrategias oficiales para el segundo año de gestión

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La mayoría de los precios
La mayoría de los precios difiere, supera o es inferior a los de otros países, fruto de productividades dispares, ineficiencias regulatorias y comerciales, normativas aduaneras contradictorias y situaciones coyunturales (Foto: Reuters)

Los mitos son narraciones maravillosas, tradiciones y leyendas creadas para explicar el universo, el origen del mundo, los fenómenos naturales y cualquier suceso para el cual no haya una explicación conocida.

Las experiencias argentinas han propiciado el credo del “atraso cambiario”, dando lugar a especialistas incentivados por sectores interesados -productores, fabricantes y especuladores- que demandan coberturas ante los riesgos de pérdida de competitividad como consecuencia de la historia inflacionaria.

Demasiados analistas han asumido que cualquier tipo de cambio inexorablemente sería devaluado, resultando ventajoso anticiparse y reclamar la corrección de la cotización, un culto que generó prestigios y remuneraciones codiciados.

En Argentina ha prevalecido el desprecio por la moneda nacional como instrumento para ajustar cuentas conflictivas

Las instituciones y culturas de cada sociedad estructuran conflictos y propuestas variadas. En Argentina ha prevalecido el desprecio por la moneda nacional como instrumento para ajustar cuentas conflictivas, lo que dio origen al mito del “atraso cambiario”.

Incompatibilidades de precios

Repasemos. La mayoría de los precios difiere, supera o es inferior a los de otros países, fruto de productividades dispares, ineficiencias regulatorias y comerciales, normativas aduaneras contradictorias y situaciones coyunturales. Numerosos analistas locales, envalentonados por su influencia en la devaluación de la moneda, se dedican a resaltar incompatibilidades de precios como evidencia de desajustes cambiarios.

¿En qué consiste el “atraso cambiario” que gatilla una devaluación obligada? Diferencias de precios debidas a ineficiencias regulatorias y comerciales no justificarían una devaluación, condición que requeriría la perspectiva de un persistente balance comercial deficitario -importaciones superiores a exportaciones-.

Diferencias de precios debidas a
Diferencias de precios debidas a ineficiencias regulatorias y comerciales no justificarían una devaluación, condición que requeriría la perspectiva de un persistente balance comercial deficitario (Foto: EFE)

Aunque algunos analistas disientan, el déficit comercial es un tema macroeconómico ajeno a las contradicciones de ciertos precios seleccionados.

La contabilidad nacional formula la composición del PBI: el total producido es igual a la suma de los gastos individuales (G) más las exportaciones (X) menos las importaciones (M). El déficit comercial implicaría que los gastos superan al PBI, lo que exigiría financiamiento, pero podría resolverse sin devaluar la moneda.

  • Variación de la deuda neta: Según el economista que más acertó los pronósticos del REM, tanto la cuenta corriente como la balanza comercial muestran una mejora de USD 28.000 millones en 2024 respecto al año previo. Las compras en el MULC superaron los USD 21.000 millones y las reservas brutas aumentaron más de USD 7.000 millones, a pesar de que el Tesoro canceló deudas por USD 14.000 millones. Adicionalmente, el BCRA transfirió al Tesoro USD 5.000 millones (depositados en el exterior) para pagar vencimientos de enero. Las reservas netas mejoraron solo USD 2.000 millones debido a estos factores. Estos datos son contundentes al refutar el retraso cambiario en 2024.
  • Déficit fiscal y monetario. La coalición del dólar barato y la inflación descendente permitió al país crecer más, con mayor productividad e ingresos en dólares. Al equilibrar las cuentas monetarias, la inflación se contrajo. Milei focalizó su gestión en política y economía.

Al cierre de su primer año de gobierno, las encuestas de opinión reflejan una percepción victoriosa: la reducción de la inflación y la calma cambiaria han contrastado con el desprestigio de la dirigencia anterior. En los últimos días, sorprendió que el BCRA vendiera USD 800 millones, respondiendo a importaciones demoradas tras la eliminación del Impuesto PAIS.

El mercado espera la asunción de Donald Trump en la Casa Blanca el 20 de enero y la definición del acuerdo que Argentina sellará con el FMI. Mientras tanto, la tasa de riesgo continúa bajando, aunque el país sigue siendo vulnerable a shocks externos debido al “mito del atraso cambiario” y la influencia de las bolsas estadounidenses.

Dólar barato y actividad económica

El dólar barato se posiciona como pieza clave del rompecabezas electoral, ya que el aumento del poder adquisitivo anticipa un repunte de la actividad en 2025. Medir los ingresos en dólares transmite de manera subliminal que Milei cumplió su promesa de dolarización, aunque también implica un aumento proporcional del costo de vida en divisas.

El dólar barato se posiciona
El dólar barato se posiciona como pieza clave del rompecabezas electoral, ya que el aumento del poder adquisitivo anticipa un repunte de la actividad en 2025 (Foto: Shutterstock)

La calma inflacionaria y el tipo de cambio estable han permitido precios más accesibles, una fórmula exitosa. Además, se destacan mayores eficiencias, con el fin de trabas absurdas como los pagos a dirigentes de organizaciones sociales, sustituidos por protocolos antipiquetes efectivos.

En el fin de año no ocurrieron disturbios habituales por alimentos y prestaciones, consolidando la conformidad con los logros libertarios y obligando a respuestas de los gobiernos y partidos opositores.

Los tropiezos económicos reflejan la fragilidad de la estabilidad monetaria, atribuida al “mito del atraso cambiario” y los temores de emisión monetaria para cubrir gastos.

El autor es director de BG Consulting

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