Detrás de todo, ¿sólo hay una mujer?

Nadie puede dudar que Susana Giménez es una de las figuras principales del espectáculo argentino. Por algún motivo, desde que comenzó su carrera hasta la actualidad, es noticia y los medios siempre hablan de “Susana” (así, sin más, nadie necesita el apellido), cuando su programa está al aire y cuando no.

El ciclo Hola Susana marcó un antes y un después en la historia de la televisión argentina. Comenzó como un programa de entretenimientos para toda la familia donde los televidentes podían ganarse millones de premios con solo atender el teléfono: una verdadera revolución para su época.

Con el paso de los años, tanto el programa como su conductora fueron buscando la manera de adaptarse a la actualidad, sin perder la impronta. Y así pasó de ser un espacio diario a ser un especial al año, un semestral, un quincenal, o hasta un ciclo por una cantidad de meses determinados. Pero siempre “Susana”.

Este fin de semana sucedió un hecho inédito para la televisión: la gran diva de los teléfonos, mediante el uso de Inteligencia Artificial, logró recrear una entrevista con ella misma, pero en su versión de hace 50 años. Con poco más de 15 minutos de duración, la entrevista, que contó con un detrás de escena de cuatro meses de trabajo, logró imponer un espacio cargado de emoción y nostalgia.

El mapa de medios fue cambiando en los últimos años y, ahora, las propuestas de la televisión abierta ya no solo compiten con la TV por cable, sino con los programas de streaming. Así, espacios como Olga, Luzu TV o Vorterix se presentan como grandes shows mediáticos por donde todas las figuras quieren pasar y donde suceden, en general, los hechos noticiables de los que la gente se hace eco en medios de prensa, en reuniones familiares y en redes sociales.

Hoy vemos una convivencia de los medios tradicionales con los nuevos medios: el stream y las redes dialogan, se potencian y se retroalimentan. Ningún formato queda ajeno al otro y cada uno fue fortaleciendo su propia audiencia. Es por eso que, al momento de pensar una estrategia de medios, el único filtro debe ser “dónde está mi audiencia y qué busca”.

Sin dudas, esta idea innovadora que trajo Susana buscó ganar en rating, provocar y ser tema de conversación en todo el resto de la industria del entretenimiento: sea en la plataforma que sea. Y lo logró: superó los 15 puntos de rating y se convirtió en tendencia en las principales redes sociales.

Como comunicadoras, estamos en constante capacitación y evolución aggiornando nuestras estrategias a lo que las nuevas tecnologías nos ofrecen. Además, acompañamos a comunicar a cada vez más empresas de tecnología que aportan productos y servicios a un nuevo mercado ávido de innovación. La incorporación de IA (Inteligencia Artificial) a la misión de comunicar ya es una realidad.

La entrevista de Susana con Susana efectivamente fue de lo más visto del domingo en la TV Argentina. Detrás de todo no hubo solo una mujer, hubo dos dialogando a través de los años y gracias a la tecnología.

Estos escenarios nos recuerdan que, en la comunicación, así como en la vida, la clave está en adaptarse y evolucionar. Como profesionales somos testigos de cómo lo tradicional y lo tecnológico pueden convivir para potenciarse. Porque detrás de todo, además de tecnología e innovaciones, hay historias y decisiones creativas que nos impulsan a seguir transformando, innovando y pensando la manera de conectarnos con cada audiencia.