Cada 29 de septiembre, desde el año 2000, se conmemora el Día Mundial del Corazón. Tiene como principal objetivo concientizar a la sociedad sobre la importancia de la prevención y el cuidado de la salud cardiovascular.
Alrededor de 18 millones de personas mueren al año como consecuencia de las enfermedades relacionadas al corazón; éstas representan la primera causa de morbimortalidad en el mundo, más que el cáncer, las enfermedades respiratorias y la diabetes.
La Organización Mundial de la salud (OMS) y la Federación Mundial del Corazón (World Heart Federation -WHF) trabajan para promover la salud cardiovascular, de manera tal de reducir un 25% la mortalidad prematura por enfermedades cardiovasculares para el año 2025. Nuestro país, a través de distintas sociedades científicas, forma parte de este proyecto.
Bajo este panorama, la Sociedad de Cardiología de Buenos Aires (SOCABA) y la Federación Argentina de Cardiología (FAC) impulsan de forma conjunta el generar conciencia y fomentar las medidas preventivas para controlar las enfermedades cardíacas.
El corazón es el único órgano que podemos oír y sentir. Es la primera y última señal de vida. Es una de las pocas cosas con el potencial de unirnos a todos como personas. Queremos que los mensajes del Día Mundial del Corazón lleguen a tantas personas como sea posible para ayudar a lograr la salud cardiovascular para todos los corazones.
Es importante que como sociedad podamos comprometernos con esta causa.
Este año el lema es: “+ Km + Vida”.
La American Heart Association propone medidas que cualquiera puede tomar para mejorar tu salud:
1) Cocinar y comer sano. Evitar las grasas saturadas y la comida chatarra y consumir carnes blancas, pescados, verduras, frutas, cereales y legumbres.
2) Hacer actividad física regularmente. Caminar entre 30 – 40 minutos al menos 5 veces a la semana.
3) Limitar en consumo de sustancias perjudiciales como el tabaco. Reducir el consumo de sal y azúcares refinadas.
4) Controlar el colesterol, disminuir el colesterol malo (LDL) e incrementar el colesterol bueno (HDL).
5) Mantener un peso adecuado.
6) Medir regularmente la presión arterial y consultar si las mismas supera los 135 – 85 mm Hg.
Muchos factores de riesgo cardiovasculares pueden modificarse con la implementación de medidas preventivas y tratamiento, pero también existen nuevos factores emergentes a tener en cuenta, como la polución ambiental, la contaminación sonora y el cambio climático, sobre los cuales debemos accionar activamente.
Este 29 de septiembre, por iniciativa de la Sociedad de Cardiología de Buenos Aires, vamos a desarrollar distintas actividades; los shopping y negocios comerciales de distintos rubros armarán sus vidrieras con prendas, objetos, luminarias, etc. de color rojo que representa el color del Corazón.
Se verán iluminados los edificios históricos y públicos de la ciudad del mismo color y los alumnos de distintos colegios realizarán durante la semana, con apoyo de sus educadores y familias, actividades alusivas a este día.
Asimismo, el 27 de septiembre se realiza una jornada gratuita en el Hospital de Niños Ricardo Gutiérrez, con la participación de la ONG Red Pediátrica Argentina, orientada a las familias. La misma incluirá charlas ilustrativas y un curso de Reanimación Cardiopulmonar (RCP) dirigida a la comunidad.
Sin duda, la pandemia que representan las enfermedades cardiacas, que se encuentran en permanente aumento, solo se puede combatir con educación, información y prevención. La capacitación debería ampliarse a todos los sectores de la sociedad, tanto niños como adultos, desde edades tempranas, como una herramienta valiosa para salvar vidas. Sería muy importante que desde los colegios se instruya y se eduque en este sentido.
Asimismo, la prevención debe empezar desde etapas tempranas de la vida, inclusive desde el mismo momento de la concepción, y mantenerse durante toda la existencia para tener una sociedad saludable con corazones sanos.
Educar y concientizar crea una sociedad saludable con corazones sanos.