Identidad y origen de la provincia de San Luis

En junio tuve la oportunidad de realizar un viaje a esta provincia junto a los estudiantes de la Tecnicatura en Guía de Turismo, del Instituto Superior Perito Moreno. Ellos comentaban que las huellas más antiguas de ocupación pertenecen a los grupos de cazadores-recolectores serranos, luego conocidos como “comechingones”. Los indios Huarpes también ocuparon el territorio, pero en las fronteras con Mendoza y San Juan. Los mismos se desarticularon como comunidad porque entraron en contacto con los conquistadores que fundaron las ciudades de Cuyo y fueron llevados a Chile para realizar trabajos forzosos.

Durante este período, el actual territorio de la provincia de San Luis formó parte de la expansión de la frontera chilena debido al interés señorial en contar con mano de obra. Los Huarpes fueron los más afectados en este proceso.

La fundación de San Luis fue el 25 de agosto de 1594, realizada por Luis Jufré de Loaiza. El nombre original de la ciudad fue “San Luis de Loyola Nueva Medina de Rioseco”. ¿Por qué este extraño nombre?

“San Luis” en homenaje a San Luis Rey de Francia, patrono del fundador; “de Loyola” en honor al capitán general de Chile: Don Martín García Oñez de Loyola, quien había ordenado a Jufré fundar una ciudad con el nombre de “Nueva Medina de Rioseco”, por el lugar de nacimiento de sus padres.

La historia simplifica las cosas y todos conocemos esta provincia con el nombre corto de “San Luis”

Quisiera detenerme un momento en este personaje interesante, no solo para la historia de Francia, sino para la vida de la Iglesia. ¿Cómo un Rey llega a ser Santo?

Era un hijo del rey Luis VIII de Francia, y nació en 1214. De una madre ejemplar, Blanca de Castilla, que se preocupó por hacer de él un cristiano fervoroso y un gobernante intachable. A los 12 años quedó huérfano de padre, y su madre Blanca asumió el mando del país mientras el hijo llegaba a mayoría de edad. Al cumplir sus 21 años fue coronado como rey, con el nombre de Luis IX. Realizó obras de caridad admirables. En su tiempo fue fundada en París la famosísima Universidad de La Sorbona, y el santo rey la apoyó lo más que pudo. El mismo hizo construir un hospital para ciegos, que llegó a albergar 300 enfermos. Cada día invitaba a almorzar a su mesa a 12 mendigos o gente muy pobre, mandaba repartir en las puertas de su palacio, comida y ropa a centenares de pobres que llegaban a pedir ayuda. Tenía una lista de gente muy necesitada pero que les daba vergüenza pedir (pobres vergonzantes) y les mandaba ayudas secretamente, sin que los demás se dieran cuenta. Buscaba por todos los medios que se evitaran las peleas y las luchas entre cristianos. Siempre estaba dispuesto a hacer de mediador entre los contendientes para arreglar todo a las buenas. Fue el antepasado de Luis XVI, decapitado durante la Revolución Francesa.

El punto central de la fundación de la ciudad de San Luis, se reconoce como la actual Plaza Independencia. Aunque hubo dos traslados temporarios a otros sitios.

Administrativamente, San Luis, Mendoza y San Juan pertenecían al Corregimiento de Cuyo desde 1594 y eran parte de la Capitanía General de Chile, hasta que fueron incorporadas al Virreinato del Río de La Plata en 1776. Luego, en 1784, se disolvió el Corregimiento y San Luis fue incorporada a la Intendencia de Córdoba del Tucumán.

La ocupación de las tierras se dio durante un lento proceso de siglos de duración y, en un primer momento, a través del otorgamiento de encomiendas y mercedes reales. La ocupación de la llanura se dio mucho más adelante, en el siglo XIX. Entre los siglos XVII y XVIII, surgieron estancias, caseríos y capillas. Durante todo el período hispánico, la autoridad principal fue el Cabildo, integrado por dos alcaldes y tres regidores, cuya actividad principal de subsistencia eran los impuestos por el movimiento de ganado a otras jurisdicciones.

La Primera Junta, establecida en Buenos Aires, buscó el reconocimiento de los cabildos locales, implicándolos directamente en la legitimación del nuevo poder central y en la elección de diputados para la Junta Grande.

El 12 de junio de 1810, el Cabildo de San Luis había recibido las comunicaciones del Cabildo de Buenos Aires y de la Primera Junta, y poco después había respondido, reconociendo a las nuevas autoridades y organizando la elección de un diputado. El 30 de junio de 1810, en un cabildo abierto, Marcelino Poblet fue elegido como el primer diputado puntano para la Junta Grande, incorporándose a esta en Buenos Aires el 23 de diciembre de 1810 y permaneciendo allí hasta el 16 de diciembre de 1811.

Como parte de la Gobernación Intendencia de Cuyo, San Luis tuvo que realizar importantes contribuciones de materiales y hombres para las campañas de Chile y Perú durante la guerra de la Independencia. La participación de San Luis en la emancipación de América es una parte fundamental de su memoria histórica.

Dos fueron, en este tiempo, los personajes fundamentales de la historia de San Luis: Juan Bautista Baigorria que nació en algún lugar de El Chorrillo, alrededor de 1754. Poco se sabe de la niñez y la juventud del granadero Juan Bautista Baigorria, quien acompañó al Padre de la Patria en las campañas militares por la Independencia y la emancipación de América del Sur, de sangre Ranquel, era un extraordinario jinete que amansaba potros al estilo de los indios. Hombre de porte elegante y pocas palabras, rastreador experimentado, conocía con precisión las huellas de los animales y podía olfatear en el aire la proximidad de una tormenta. Juan Bautista fue uno de los 118 paisanos que partieron de San Luis para integrar el Regimiento de Granaderos a Caballo. San Martín había pedido voluntarios que debían tener desprendimiento para con el prójimo y mucho valor. En el Combate de San Lorenzo, Juan Bautista Baigorria demostró que reunía sobradamente esas cualidades cuando con su lanza, salvó la vida del General San Martín.Continuó integrando el Ejército de Los Andes hasta 1818.Murió en Córdoba, cuando tenía aproximadamente 96 años.

El otro fue el Coronel Juan Pascual Pringles que nació en la ciudad de San Luis el 17 de mayo de 1795. Se incorporó en 1815 a las milicias que comandaba Vicente Dupuy.En agosto de 1820, partió con la Expedición Libertadora a Perú y, un mes después, despertó la admiración de todos arrojándose al mar en Chancay, para evitar caer prisionero y entregar nuestra bandera a los realistas. San Martín no ahorró elogios a su figura. En 1822 ascendió a Capitán. El 6 de agosto de 1824 combatió en Junín y el 8 de diciembre, bajo las órdenes de Sucre, triunfó en Ayacucho, el último gran combate de la campaña libertadora continental.En 1826, fue ascendido por Bolívar a teniente coronel. Al regresar al país, combatió en la Guerra con Brasil y tuvo una heroica y memorable participación en la batalla de Ituzaingó.Luego se sumó al ejército unitario de Lavalle. Su compromiso con la causa unitaria lo llevó a la muerte. Las tropas de Facundo Quiroga lo alcanzaron en el Chañaral de las Ánimas el 19 de marzo de 1831, y lo asesinaron cuando tenía tan sólo 36 años.

La autonomía de 1820 fue un momento clave en la historia de San Luis, en este proceso, el Cabildo local volvió a ser un actor político central, asumiendo el poder bajo el título de Cabildo Gobernador y estableciendo el primer gobierno de San Luis como provincia autónoma.

Quizás no sea de las provincias más relevantes de Argentina, pero es llamativa la calidez de su gente, la belleza todavía muy natural de sus paisajes y serranías y su deseo de destacarse por la innovación y el conocimiento. Tiene también Parques Nacionales de gran belleza y muchas reservas naturales.