La implementación del sistema acusatorio en Cuyo

Con la presencia del Procurador General, de la Defensora General, de los ministros de Defensa, Justicia y de Seguridad, se pone en marcha un nuevo paradigma en la manera en que el Estado Federal provee a los habitantes el servicio de administración de justicia

Guardar
Luis Petri, Mariano Cúneo Libarona, Patricia Bullrich y Mariano Borinsky
Luis Petri, Mariano Cúneo Libarona, Patricia Bullrich y Mariano Borinsky

*Con la colaboración del abogado Marcos Fernández Ocampo, secretario Sala IV de la Cámara Federal de Casación Penal N°1

¿Cómo llegamos hasta acá? Hace décadas (en Llerena Fallos: 328:1491 y en Quiroga Fallos: 327:5863; entre tantos otros) la Corte Suprema de Justicia de la Nación señaló que la Constitución Nacional consagra un modelo acusatorio, bilateral y contradictorio para el enjuiciamiento penal. El mandamiento constitucional señalado por la Corte exige separar las funciones de investigar y acusar -propias del fiscal- de las de juzgar -propias del juez-.

Las legislaciones procesales provinciales avanzaron claramente en esa dirección en materia de administración de justicia común. Sin embargo, a nivel federal el cambio de paradigma ha sido más lento; aunque ahora con rumbo firme hacia su efectiva transformación.

En 2019 se puso en marcha el acusatorio en Salta y Jujuy, y allí ha repercutido en una profunda transformación, hacia una justicia más rápida y accesible. Luego de más de cuatro años de su puesta en marcha, el Código Procesal Penal Federal ha probado que funciona y que cumple con la declamación de solucionar la mora en la duración de los procesos penales. El 87,2% de los expedientes ha culminado en menos de 1 año.

En mayo inauguramos el sistema acusatorio en el distrito de la justicia federal de Rosario, en donde vemos un éxito rotundo en sus primeros casos, que reciben una respuesta jurisdiccional rápida y efectiva.

Durante los dos primeros meses de vigencia del Código Procesal Penal Federal en el distrito federal de Rosario se agendaron un total de 68 audiencias en el marco de 49 carpetas registradas en el SGJ Lex 100. La tasa de realización ha sido del 95.5%, lo que revela el desempeño eficaz de la Oficina Judicial Rosario y el compromiso de la magistratura del distrito con el modelo y el servicio.

Hoy, es el turno de Cuyo. Con la presencia del presidente de la Corte Suprema de Justicia de la Nación, del Procurador General, de la Defensora General, del Ministro de Justicia y de la Ministra de Seguridad, venimos a poner en marcha un nuevo paradigma en la manera en que el Estado Federal provee a los habitantes el servicio de administración de justicia.

Un cambio de paradigma

El día de hoy es el puntapié inicial de una nueva manera de administrar justicia. La instauración del modelo acusatorio implica un cambio de modelo. Inauguramos un sistema de justicia federal más ágil, transparente e igualitario. Un mejor servicio para los ciudadanos.

Vamos por:

  • Procesos más rápidos, menos burocracia y más transparencia: comenzamos una era que debe alejarse de la burocracia. El CPPF abandona la estructura altamente formalizada escrita del actual proceso por un sistema desformalizado basado en los principios de inmediación, oralidad, celeridad, publicidad, concentración y simplicidad.

En ese espíritu se enmarca la Acordada 5/24 de la Cámara Federal de Casación Penal por la cual se decidió reforzar el Colegio de Garantías con magistrados del Colegio de Juicio. Debemos dejar de lado las estructuras rígidas y burocráticas cuando estas chocan contra la realidad.

  • Una justicia que dé soluciones: el CPPF es mejor para todos. Imputados, víctimas y sociedad tendrán procesos penales más rápidos que solucionarán los conflictos con una respuesta concreta. Puede ser un acuerdo o un juicio, pero la respuesta judicial será efectiva y en tiempo oportuno.

Todos los casos deben ser resueltos a la mayor brevedad posible, cumpliendo desde ya las garantías del debido proceso, pues fiel al adagio popular: la justicia lenta… No es justicia.

El poder de los jueces, como uno de los tres poderes del Estado, se debe traducir en servicio público a la sociedad en términos de administración de justicia. Es imperioso que el sistema de administración de justicia sea eficaz y eficiente en su gestión. Ello significa que los jueces deben resolver, con la debida prudencia y premura, el universo de casos (detrás de los cuales hay conflictos sociales, entre particulares o de orden público), que tienen para fallar con equidad y justicia.

El rol de la Cámara Federal de Casación Penal

Desde el minuto en que el ministerio de Justicia decidió volver a poner en marcha la implementación del sistema acusatorio, la Cámara Federal de Casación Penal, desde su rol institucional como cabeza del fuero federal penal, asumió un inclaudicable compromiso con el éxito de la implementación.

Desde la Cámara impulsamos y llevamos a cabo diversas actividades y decisiones que nos permitieron llegar al día de hoy preparados:

  1. Cursos de capacitación para empleados y funcionarios: la Comisión de Capacitación de la Cámara Federal de Casación Penal organizó y dictó un curso de capacitación dirigido a empleados y funcionarios de la jurisdicción de Mendoza
  2. Encuentros con jueces de la jurisdicción y con el Ministerio de Justicia: desde que se anunció la implementación en Cuyo, mantuvimos numerosas reuniones de trabajo con los miembros de la Cámara Federal de Apelaciones, de los Tribunales de Juicio y con el Ministerio de Justicia, a fin de coordinar la efectiva puesta en marcha del sistema acusatorio.
  3. Creación de los Colegios de jueces: a fin de lograr la desburocratización y la flexibilidad que gobiernan el CPPF, el pleno de la Cámara Federal de Casación Penal dictó las Acordadas 4/2024 y 5/2024 por medio de las cuales creó, para el funcionamiento del distrito federal Mendoza, tres colegios de jueces, de acuerdo a lo que prescribe el artículo 36 de la Ley 27.146 de Organización y Competencia para la aplicación del modelo acusatorio. Los colegios son agrupaciones o “pool” de jueces que se rigen por los principios de flexibilidad y rotación de sus integrantes, lo que brinda una especial eficiencia y celeridad al sistema.
  4. Previsión de la situación de contingencia en la que se encuentran los juzgados de garantías: la Cámara Federal de Casación Penal no sólo estableció los colegios, sino que por medio de la Acordada 5/24, reparando el escaso número de jueces en la primera etapa del proceso -de garantías- (5); en contraposición con los de competencia en el juicio oral (12); decidió reforzar el Colegio de Garantías con magistrados del Colegio de Juicio. Resulta crucial en este punto destacar que en el CPPF existe un predominio de soluciones dentro de la etapa temprana. Es decir, que son muchos menos los casos que se elevan a juicio, ya que el CPPF ofrece alternativas punitivas y no punitivas en el que las partes pueden ponerse de acuerdo y resolver el conflicto, de manera rápida, en la primera etapa del proceso.
  5. Adaptación del Sistema de Gestión Judicial Lex 100: la Oficina Judicial de la Cámara Federal de Casación Penal trabajó con la Dirección General de Tecnología en la habilitación de las funcionalidades Lex 100 necesarias para la tramitación de los expedientes, bajo el CPPF, así como la habilitación del entorno informático de Mendoza. Para ello, la directora tuvo reuniones y contacto permanente con el personal de esa dirección. A su vez, personal de la Oficina Judicial ha acompañado al personal de la Dirección General de Tecnología en los cursos de capacitación para el uso del Lex 100, adaptado a nuevo código.

Mendoza, una vez más, debe ser un ejemplo

Hoy, el CPPF desembarca en una región que es modelo de muchas cosas para todos los argentinos.

Estamos en medio de un desierto natural que es, a su vez, un oasis productivo. La producción y el desarrollo de Cuyo son producto del esfuerzo, trabajo e inventiva de generaciones de mendocinos, sanjuaninos y puntanos. Fragmentos de desierto fueron transformados en espacios agrícolas y urbanos.

Estamos reunidos en Mendoza. Marca argentina en el mundo que es sinónimo de calidad y de excelencia. Una provincia que es un ejemplo de políticas públicas y de institucionalidad, en donde hay certidumbre económica y política.

En ese contexto aterriza el Código Procesal Penal Federal y esperamos que Mendoza sea, como en tantas otras materias, un ejemplo a seguir para el resto de la Argentina.

La Cámara Federal de Casación Penal viene hoy aquí para renovar el compromiso inclaudicable que ha asumido en el éxito del sistema acusatorio. Este es sólo el comienzo de algo imparable, hoy es el turno de Mendoza, San Juan y San Luis; en noviembre nos encontraremos en General Roca para implementar el Código en Río Negro y en Neuquén. En diciembre la cita será en Comodoro Rivadavia, en donde se dará luz de inicio para Chubut, Santa Cruz y Tierra del Fuego.

El año culminará con más de mitad del territorio nacional bajo las reglas del CPPF, bajo el modelo de enjuiciamiento penal que pretende la Constitución Nacional.

Como Presidente de la CFCP reafirmo nuestra predisposición y responsabilidad para seguir llevando a cabo cursos de capacitación; para continuar siendo sede de encuentros y discusiones que sirvan para mejorar continuamente; para impulsar las reformas y los cambios que sean necesarios para que el sistema funcione y se adapte a la realidad de cada Distrito; para generar acordadas u otros mecanismos institucionales que faciliten la efectiva implementación del modelo acusatorio. Cuenten con la Cámara Federal de Casación Penal para la implementación del CPPF en toda la jurisdicción federal de la República.

Estamos acá, junto a las autoridades de la Corte Suprema de Justicia de la Nación, del Ministerio Público y del Ministerio de Justicia, expresando que estamos comprometidos con el éxito de esta reforma, que cuentan con nosotros para lo que sea necesario, para poder llevar adelante esta profunda mejora en la manera en la que el Estado Federal provee a sus habitantes el servicio de administrar justicia.

Guardar