Desde hace un tiempo el sector tecnológico y financiero se propuso avanzar cada día más hacia la eliminación del efectivo. No solo por la conveniencia que trae tanto para comercios como para consumidores, sino por el impacto que transfiere a las economías.
Según un análisis de ADEBA –la Asociación de Bancos Argentinos–, entre los costos asociados al uso del dinero en efectivo se puede identificar que favorece la informalidad de la economía, que genera altos costos de emisión y destrucción de dinero para el BCRA, que aumenta el costo operativo a la actividad financiera y que atenta contra la bancarización de la economía, entre otros.
En la última década, el mercado dio pasos fundamentales en esa misión, impulsando, sobre todo, un nuevo abanico de opciones de pago que simplifican las transacciones y se consolidan como una alternativa superior al dinero físico.
Sin embargo, aún queda terreno por conquistar: según datos de analistas de AMI (Americas Market Intelligence), solo el 30% de los negocios pequeños acepta tarjetas y esto ni siquiera incluye el amplio segmento informal de América Latina.
En ese contexto, surge una tecnología que, desde nuestra visión, cambiará por completo esta realidad y permitirá ampliar la capilaridad de los medios de pago. Se trata de Tap to phone, una nueva funcionalidad de cobro que permite a los pequeños comercios, pymes, profesionales independientes y emprendedores transaccionar usando el celular como terminal de pago. Ahora, gracias a esta tecnología, estos pueden cobrar de manera rápida y segura con tarjetas de crédito, débito y billeteras virtuales, desde su teléfono.
Desde conductores que brinden servicios de transporte de pasajeros hasta revendedores de cosméticos, un vendedor de un puesto en una feria o un profesional independiente, esta tecnología permite democratizar los cobros por un servicio o producto desde la comodidad de un smartphone. Y lo hace de forma sencilla, ya que el único requisito para que el celular se convierta en terminal es que tenga un sistema operativo Android 10 o superior y que pueda leer NFC –Near Field Communication–.
Pensemos en pueblos alejados de los grandes centros urbanos, donde soluciones como tap to phone ya están llegando para facilitar y agilizar el trabajo de cientos de vendedores, comerciantes y profesionales que ahora pueden transformar su celular en un punto de pago
El impacto ya se puede ver. Según datos de Visa, la tecnología Tap to phone ya está implementada en más de 60 mercados alrededor del mundo y en Latinoamérica y el Caribe permitió habilitar 280.000 terminales de pago en los celulares. Además, cerca del 60% de los dispositivos de la región serían compatibles con este sistema según datos de la industria, por lo que la oportunidad es grande.
Tap to phone simplifica tanto la experiencia del usuario como del comerciante, y no pone en riesgo la seguridad de la transacción ya que mantiene los mismos estándares que las terminales de cobro tradicionales. Esta nueva herramienta es una gran alternativa para que los bancos y las fintech puedan ofrecer a emprendedores o profesionales de distintas áreas una solución con la que puedan cobrar a sus clientes sin tener que invertir en una terminal de punto de venta.
En la Argentina, el camino de la inclusión financiera sigue avanzando y esto se evidencia a través del crecimiento de la tenencia conjunta de cuentas bancarias y de pago, que a junio de 2023 superó el 55% de la población adulta, según el último Informe de Inclusión Financiera del BCRA. Sin embargo, según el organismo, cuando hablamos de infraestructura financiera el principal desafío sigue siendo alcanzar las localidades más alejadas y con poblaciones más pequeñas, en las que las opciones digitales cobran aún mayor importancia para permitir el acceso y uso de los servicios financieros digitales.
Pensemos en pueblos alejados de los grandes centros urbanos de nuestro inmenso territorio nacional, donde soluciones como Tap to phone ya están llegando para facilitar y agilizar el trabajo de cientos de vendedores, comerciantes y profesionales que ahora pueden transformar su celular en un punto de pago sin necesidad de sumar ningún dispositivo extra.
Si analizamos las tendencias del mundo financiero, para este año esperamos que tanto bancos como fintech puedan incorporar este tipo de tecnologías que brindan una alternativa liviana y fácil de aplicar.
El autor es CCO de Veritran