Dengue: una estrategia ausente

Sin acciones coordinadas a nivel nacional, cada vez habrá más mosquito y más infectados

Argentina atraviesa el peor brote de dengue de su historia

Desinsectación, fumigación, vacuna contra el dengue, son interrogantes con profundo impacto en América Latina. La actual epidemia global de dengue no tiene precedentes; aumentó 10 veces desde el 2000, y los expertos creen seguirá creciendo debido al cambio climático y el aumento del Aedes aegypti. La hembra de este mosquito pica a un paciente infectado (frecuentemente asintomático) con alguno de los 4 serotipos de dengue, y reproducirá el virus en sus glándulas salivales; luego lo transmite a todos quienes pique por el resto de sus 30 días de vida.

Estrategia espacial

El mosquito pica para alimentar con sangre a sus 80 a 100 huevos. Nos detecta por el dióxido de carbono que exhalamos al respirar, temperatura corporal, u otros olores cutáneos. Prefiere vivir en ciudades dada la concentración de un grupo de mamíferos vulnerables (seres humanos); de ahí su adaptación. En esta etapa es útil cubrir con ropa nuestro cuerpo y usar repelentes corporales y ambientales. Para eliminar a la hembra es útil (aunque menos que la estrategia focal) usar insecticidas de derribo en hogares o fumigación con termoniebla de lugares públicos (clubes, cementerios, escuelas, oficinas, baños públicos, e incluso veredas y plazas) allí donde se detecta al mosquito volando y que coincida con casos de dengue. Los expertos hablan de bloqueo o estrategia espacial. Brasil lo usa.

Estrategia focal

Además, la hembra detecta sitios inundables o cacharros para adherir sus huevos a las paredes; con la lluvia se llenarán de agua y transformarán los huevos en larvas que sí flotarán un tiempo en el agua acumulada. Quitar el agua y lavar los recipientes (descacharrizar) es indispensable pero insuficiente. Elimina las larvas pero no los huevos. Además, hay sitios de cría no susceptibles de esta técnica. Entonces, gente entrenada usará larvicidas que matan las larvas en los sitios de cría. Una buena estrategia toma índices de infestación del mosquito para dar seguimiento al éxito o fracaso de la estrategia denominada “focal”.

Estrategia perifocal

Finalmente hay una etapa intermedia. El mosquito adulto y especialmente la hembra 48 horas antes de desovar se resguarda por las tardes en sitios sombreados como vegetación densa, cobertizos, baños públicos, obras en construcción, latas vacías sin agua, baños públicos, escuelas, clubes. Aquí la estrategia se denomina de acción perifocal. Gente experta detecta estos sitios y aplica insecticidas con acción residual que por 28 días eliminan a los mosquitos que buscan refugio.

Estas estrategias las aplican los países con epidemias de dengue en curso como Brasil, y varios municipios de la Argentina tienen una estrategia integral de control del vector.

Vacunación

En la Argentina se autorizó la vacuna del laboratorio Takeda a partir de los 4 años. Reduce 80% las probabilidades de dengue grave y 70% de dengue moderado según los tipos de virus, y siempre es más efectiva que los niveles del promedio de la vacuna antigripal; y es segura. La Agencia Europea de Medicamentos la autorizó a partir de los 4 años. Si bien se estudió en personas de 4 a 16 años por razones técnicas, en adultos vacunados se producen niveles similares de anticuerpos activos contra el virus; no se extrapolan los resultados sino que se infieren a partir de métricas bioquímicas. Esta técnica se usa sin problemas para definir poblaciones pasibles de ser inmunizadas con otras vacunas (ejemplo, COVID19).

La inclusión en el calendario de vacunación se reserva para zonas endémicas en el racional que, dado virus circulante todo el año, la exposición es universal, luego se organiza una logística para vacunar anualmente a las nuevas cohortes de mayores de 3. Similar al sarampión o la varicela. No es lo que discutimos hoy, excepto en el noroeste argentino.

El uso o no de la vacuna en la epidemia debe pensarse como con el COVID19. Dada la epidemia, discutimos la vacuna como estrategia válida para reducir formas graves y moderadas de la enfermedad durante la crisis. Brasil decidió por la positiva y vacuna, con toda la evidencia a su favor. La Argentina debe optar. Si la vacuna no es gratuita, pocos podrán vacunarse. Sin estrategia nacional, cada vez habrá más mosquito y más dengue.