Agua para el futuro: el rol crucial de las empresas en la sostenibilidad hídrica del Perú

La gerente de Distrito, División Light para Perú, Colombia y Ecuador en Ecolab, en el marco del Día Mundial del Agua, opinó sobre el papel fundamental que juegan las empresas e industrias en la conservación de este recurso vital

Foto: Andina

Según el ranking de estrés hídrico de las Naciones Unidas, Perú se encuentra en el puesto 66, lo que indica una situación preocupante en cuanto a la disponibilidad de agua. Considerando las proyecciones para el 2040, se estima que la demanda de agua superará significativamente la capacidad de suministro en muchas regiones del país.

En ese contexto, por el Día Mundial del Agua, es crucial destacar el papel fundamental que juegan las empresas e industrias en la conservación de este recurso vital. Estas instituciones tienen una responsabilidad en la gestión sostenible del agua, ya que su actividad económica a menudo conlleva un uso intensivo de este recurso. Por lo tanto, es imperativo que reflexionen sobre el consumo del agua y tomen las decisiones correctas en pro de preservar el recurso.

Para mitigar el gasto hídrico en sus operaciones, las empresas deben adoptar medidas proactivas. Una estrategia eficaz implica establecer indicadores de gestión para el consumo de agua y energía en relación con la producción. Esto les permitirá monitorear y optimizar el uso de recursos de manera constante.

Otra forma de abordar esta problemática es cambiando el enfoque desde una administración lineal a una circular, donde se pase de extraer-producir-desechar a un modelo en el que el recurso hídrico pueda ser reciclado y reutilizado. Esto implica la incorporación de tecnologías innovadoras y prácticas de gestión que minimicen la dependencia de fuentes de agua dulce, como los pozos o la red pública.

Los beneficios del ahorro de agua para las empresas son múltiples y sustanciales. En primer lugar, al disminuir su consumo de agua, contribuyen a preservar la calidad y disponibilidad de este recurso para las futuras generaciones. Además, el uso responsable del agua puede prolongar la vida útil de los pozos y otros recursos hídricos, asegurando un suministro estable a largo plazo. En términos económicos, el ahorro en costos de agua y energía se traduce directamente en mejoras en la rentabilidad y competitividad de las empresas.

Sin embargo, el camino hacia la sostenibilidad hídrica presenta desafíos significativos. Las empresas enfrentan el reto de encontrar la tecnología adecuada para sus necesidades. Dada la diversidad de sectores industriales y condiciones operativas, no existe una solución única. La selección y aplicación de tecnologías eficientes requiere un análisis cuidadoso de factores económicos, químicos y tecnológicos.

En base a la identificación correcta de los principales desafíos de las empresas, desde Ecolab se diseña una propuesta que impacta directamente sobre los indicadores de gestión del recurso, que abarca desde tecnologías de tratamiento de aguas y soluciones químicas, hasta equipos de monitoreo y plataformas digitales. De esta forma se permite alcanzar una optimización en el consumo de agua y también de energía.

El mayor desafío radica en la concientización y sensibilización sobre la importancia de conservar el agua. A pesar de los avances tecnológicos, la adopción de prácticas sostenibles depende en última instancia de un cambio cultural y de conducta. Las empresas deben liderar este esfuerzo al educar a empleados, clientes y comunidades sobre la escasez y el valor del agua.

De esta manera, el consumo hídrico de las empresas en Perú plantea desafíos significativos, pero también oportunidades para la innovación y el liderazgo empresarial. Al establecer metas ambiciosas y adoptar medidas concretas, las empresas pueden no solo mitigar su impacto ambiental, sino también impulsar su crecimiento económico y contribuir al bienestar de la sociedad en su conjunto.

Lourden Blanco.