El próximo 5 de noviembre se celebran las elecciones generales en los Estados Unidos de América. La fórmula presidencial, 34 de las 100 bancas en el Senado y los 435 escaños que componen las Cámara de Representantes y 11 gobernadores concentrarán la atención de buena parte del mundo.
Pero el principal evento, la carrera hacia la presidencia, arranca mucho antes, cuando en cada estado -entre enero y julio- mediante primarias o caucuses, se eligen los delegados a cada una de las Convenciones Nacionales que elegirán al candidato a Presidente.
La atención está enfocada en la competencia interna republicana, ya que en el caso del partido demócrata, aunque haya compulsa, se descarta la candidatura del actual presidente Joe Biden. En el partido republicano arrancaron, entre otros, cuatro candidatos principales: el ex presidente Donald Trump, el gobernador de Florida Ron De Santis, la ex embajadora de la ONU Nikki Haley y el empresario de biotecnología Vivek Ramaswamy.
La larga marcha comenzó el 15 de enero en Iowa, que realizó sus caucuses (más de 1000 asambleas locales donde los militantes votan para elegir los alrededor de 40 delegados que aportará ese estado a la Convención Republicana).
Trump arrasó con el 48% de los votos, seguido por el gobernador De Santis, con el 20%, y Nikki Haley, con el 16%.
Días antes de las asambleas Ramaswamy suspendió su campaña y el domingo posterior -el 21- De Santis dio por concluida su aspiración presidencial y manifestó su apoyo público a la candidatura de Trump, que aparece como el favorito.
La competencia sigue hoy, 23 de enero, en New Hampshire, donde en lugar de caucuses se celebrarán primarias entre un Trump fortalecido y dominante en las encuestas, que insiste con sus polémicas afirmaciones respecto de su supuesto triunfo en las elecciones de 2020 y su visión sobre el mundo y los valores tradicionales de la sociedad americana y Nikki Haley, quien adopta una postura más moderada en cuestiones como el aborto y la política exterior, pero aparece muy por debajo de las preferencia respecto del ex presidente.
New Hampshire puede darle algo de aire a Halley para seguir adelante en las competencias que seguirán en Nevada, el 6, y en Carolina del Sur el 24.
Si a esa altura continuase la competencia, el mes definitorio será marzo con una fecha superlativa conocida como el Súper Martes -del día 5 -, en el que 16 estados y territorios eligen 874 delegados, incluyendo los poderosos California (162) y Texas (161). El 12 se eligen 160 delegados en 4 estados y el 19, 350 delegados en 5 estados más. Marzo terminará con más de 1700 delegados elegidos y, probablemente la candidatura definida, aunque las primarias y caucuses continúen hasta el 4 de junio.
La Convención Nacional Republicana se reunirá en Milwaukee, Wisconsin entre el 15 y el 18 de julio.
En contraste con los republicanos, los demócratas han optado por priorizar estados con una composición racial más diversa iniciando la campaña en Carolina del Sur y Nevada, sin perjuicio de una primaria no oficial en el día de hoy en New Hampshire en la que los candidatos principales serán: el favorito Biden, la autora de best Sellers de autoayuda Marianne Williamson y el representante del estado de Minnesota y empresario Dean Phillips.
Sin embargo, si no hay sorpresas – que puede haberlas – la Convención Nacional Demócrata que tendrá lugar en Chicago entre el 19 y el 22 de agosto designará a Joe Biden para encabezar su fórmula.
A partir de allí, comenzará la campaña y los tres tradicionales debates el 16 de setiembre en Texas, el 1 de octubre en Virginia y el 9 de octubre en Utah.
Respecto de los competidores, la elección pareciera encaminada a repetir la de 2020. Pero el desarrollo de la campaña será muy distinto. La negativa del ex presidente a reconocer la victoria de Biden, las contiendas judiciales posteriores, los graves sucesos del 6 de enero de 2021, y las acusaciones pendientes sobre Trump respecto a su posible implicación en los mismos y sus responsabilidades van a teñir el proceso, prometiendo una creciente polarización, mayor judicialización de las competencias en los estados, un clima extremadamente tenso y un ambiente desafiante para la fortaleza de las instituciones del norte de nuestro continente.
De hecho, se encuentra pendiente la resolución de la Corte Suprema sobre la posible inhabilitación de Donald Trump en algunos estados.
En ese contexto, las elecciones legislativas en las que se renuevan 20 bancas del Senado correspondientes a los demócratas, 11 a los republicanos y 3 a los independientes y, las de la Cámara de Representantes, con la renovación de los 219 demócratas y los 213 republicanos, pueden ser definitorias en los procesos de confirmación de los resultados electorales que adquirieron inusitada importancia en la accidentada contienda de 2020.
We´ll stay tuned.