No somos realmente conscientes hasta que nos sucede y muchas veces tuvimos antes varias oportunidades de prevenirlo y no lo supimos ver. Infinidad de casos pueden verse diariamente en los medios de comunicación, entraderas, viudas, negras, asaltos a mano armada, por solo mencionar algunos.
¿Cuántas veces escuchamos una mala noticia de esta índole, incluso entre amigos? Cientos, sin duda, cientos de veces. En algunos casos son hurtos menores y en otros, la pérdida es mucho mayor. También es lamentablemente habitual que esos robos sucedan dentro del círculo más íntimo del damnificado y por eso mismo cuesta preverlos.
Otro patrón que deja en evidencia este caso es que muchas veces quienes lo sufren no hacen la denuncia o lo mantienen en reserva, ya sea por seguridad o por pudor.
Prever medidas de seguridad es la forma de evitar ser estafados
Otro gran tema de inseguridad “virtual” son las apps de citas. Es sabido que cambiaron la forma en que las personas se conectan y buscan relacionarse a cualquier edad, pero esta tendencia mundial también está generando un aumento de robos y estafas que muchas veces no se denuncia por pudor.
Este tipo de noticias, que leemos o escuchamos cada vez más habitualmente, nos ponen en alerta y nos permiten conversar entre amigos y familia la importancia de tomar precauciones, intentar verificar la identidad y datos que conocemos de ese match (en redes sociales y en buscadores, por ejemplo) e incluso tener muchas veces una persona de confianza atenta a la hora de encontrarse físicamente con él o la desconocida.
Sin embargo, no es suficiente con tomar estos recaudos. Las estafas románticas no se evitan tan fácilmente. En estos casos, el o la delincuente crea perfiles falsos en aplicaciones, web o redes sociales e interactúa con el fin de lograr un beneficio económico y eso lo hace más difícil de identificar porque además entabla una relación de confianza que hasta puede perdurar en el tiempo.
Una vez que estamos frente a una persona entrenada para engañarnos, es mucho más difícil no volvernos víctimas involuntarias de sus intenciones
Pero pasa muy seguido y la forma de evitarlo es tomando decisiones de prevención, con la cabeza fría y pensando cómo anular peligros potenciales.
Seguros para los bienes, fondos de retiros, seguros de vida, cajas de seguridad en instituciones especializadas (bancarias o no bancarias, pero con trayectoria y experiencia en seguridad) son diferentes expresiones de decisiones inteligentes que nos dan salud y paz mental.
Es una manera muy eficiente de evitar robos y muchos de los modos más conocidos de estafa porque el resguardo en una bóveda, ofrece dos instancias de alerta: una física, que implica medidas de seguridad con la correspondiente verificación de identidad y el uso de datos biométricos; y otra instancia que implica un momento de reflexión y permite repensar las decisiones que estamos tomando en un momento en el que seguramente el o la delincuente –o la situación creada por esta persona– nos apremie.
Prever medidas de seguridad es la forma de evitar ser estafados. Una vez que estamos frente a una persona entrenada para engañarnos, es mucho más difícil no volvernos víctimas involuntarias de sus intenciones. Por eso, lo importante de tomar decisiones que permitan anticiparnos a lo que preferiríamos que no sucediera. Adelantarnos a las posibilidades, tener previsión para evitar disgustos evitables. Tomemos decisiones conscientes e inteligentes con tiempo, seamos previsores.
El autor es CEO de Ingot y presidente de Caesacs (Cámara Argentina de Empresas de Servicio de Alquiler de Cajas de Seguridad)