El rol de la banca pública en el desarrollo

En un contexto de incertidumbre, resulta esencial poner en valor los modelos de gestión equilibrados, mostrando que la integración de lo público y lo privado es el camino hacia un sistema financiero sólido y comprometido con el crecimiento económico del país

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El banco provincial de La Pampa
El banco provincial de La Pampa

En medio de los debates que atraviesan a la Argentina sobre eventuales privatizaciones, surge la necesidad de reflexionar sobre el rol de la banca pública en el país. ¿Cuál debe ser su función? En el caso de La Pampa, podemos afirmar que la gestión de un régimen enfocado en el estímulo de la integración público-privada ha probado resultados positivos para el desarrollo social y económico de la provincia y nos ofrece un panorama auspicioso para seguir impulsando un modelo que apoye el aparato productivo y la generación de actividad y circulación de bienes y servicios, claves para el bienestar de la población.

Desde su fundación en 1959, el Banco de La Pampa ha sido un pilar fundamental como agente financiero del gobierno provincial. Su enfoque especializado en proveer servicios financieros a personas y pymes del entramado productivo pampeano ha sido la base de una gestión sostenida en el tiempo, que encuentra su éxito en una administración eficiente y de alto valor agregado: los resultados del último balance marcan el vigésimo año consecutivo de resultados positivos para la entidad.

La gestión se ha consolidado mediante una articulación estratégica con las decisiones de política económica del Ejecutivo local, que promueve el desarrollo productivo con políticas específicas para cada sector. Las políticas de Estado provinciales consideran esta sinergia con la esfera privada como clave para el sostenimiento de un crecimiento equilibrado.

La banca no sólo debe ser un actor financiero, sino que puede y debe actuar como un verdadero impulsor del desarrollo económico y social

En ese sentido, la entidad ha puesto el foco en el estímulo de la actividad con valor agregado, otorgando más de 7.000 préstamos a pymes pampeanas, subsidiando hasta un 30% de las tasas de interés para impulsar el crecimiento sostenible de las empresas locales.

Pero la banca no sólo debe ser un actor financiero, sino que puede y debe actuar como un verdadero impulsor del desarrollo económico y social. En La Pampa, un claro ejemplo de esto ha sido la colaboración del Banco en la estrategia que llevó a la provincia a superar su récord histórico de exportaciones en el primer trimestre de 2023, con un aumento del 33% interanual que alcanzó los USD 65 millones. Este logro se respalda con más de 750 préstamos otorgados, respaldados por el Fondo de Garantías Pampeanas, facilitando el acceso al crédito productivo.

Brindar soluciones y promover la inclusión financiera es también esencial y la confianza es clave para la sustentabilidad del negocio.

La banca pública puede y debe aportar al desarrollo de Argentina. En un contexto de incertidumbre, resulta esencial poner en valor los modelos de gestión equilibrados, mostrando que la integración de lo público y lo privado es el camino hacia un sistema financiero sólido y comprometido con el crecimiento económico del país.

El autor es presidente del Banco de La Pampa

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