El dinero nos afecta porque es mucho más que un medio para pagar o comprar: hace posible (o no) cosas que nos importan y manejarlo requiere dedicación. Cuando el presupuesto nos limita demasiado y tomar decisiones financieras se vuelve un ajedrez, se dispara el estrés financiero. La buena noticia es que no solo depende de nosotros poder controlarlo: las soluciones financieras pueden ayudar a mitigarlo.
¿Pero qué es el estrés financiero? Alude al malestar que experimentan las personas a partir de situaciones cotidianas relacionadas con el dinero. Esto se traduce en ansiedad, preocupación, enojo, tristeza e incluso síntomas físicos, y pasa a ser como un “telón de fondo” que nos resta calidad de vida.
Los principales disparadores son:
● Las dificultades para cubrir nuestros gastos.
● Tener poco margen económico para el disfrute (esparcirnos, darnos gustos y concretar proyectos personales).
● Dedicar mucho tiempo y esfuerzo para decidir en qué gastar, cuándo ajustar, cuándo guardar o cómo ganarle a la inflación.
Cuando el presupuesto nos limita demasiado y tomar decisiones financieras se vuelve un ajedrez, se dispara el estrés financiero
También hay factores contextuales que pueden aumentar las chances de padecer estrés financiero. Según el Global Findex 2021 que publica el Banco Mundial (The Global Findex Database 2021: Financial Inclusion, Digital Payments, and Resilience in the Age of COVID-19), dos de cada tres personas en países en desarrollo sienten estrés financiero. En el caso particular de Argentina, las crisis recurrentes y el escenario actual se manifiestan en elevadas cifras de pobreza, cambios en la dinámica del mercado laboral y la pérdida progresiva del poder de compra de los ingresos.
Es claro que ordenar el gasto, ahorrar y planificar contribuyen a mitigar el malestar que generan las finanzas. Cuando las personas se empeñan en aprender buenas prácticas financieras e incorporan herramientas que les permiten tomar mejores decisiones con el dinero, su bienestar aumenta.
Sin embargo, el bienestar también puede aumentar gracias a la iniciativa del sector financiero. Diseñar productos y servicios desde un entendimiento profundo de los principales desafíos que enfrentan las personas con el dinero contribuye a la calidad de vida en entornos como el nuestro.
Los productos financieros desarrollados con foco en las necesidades de las personas pueden mejorar su calidad de vida
Un estudio inédito en Argentina sobre “Bienestar Financiero” realizado por Naranja X en 2023 demostró que una alta proporción de usuarios de soluciones financieras declaran que éstas los “ayudan” a estar mejor. Las personas se sintieron “protegidas” al poder afrontar gastos esenciales e inesperados con mayor facilidad, y “aliviadas” al poder hacer un seguimiento detallado de sus movimientos y organizarse con menor carga mental. Los productos crediticios tuvieron un rol clave a la hora de mitigar el estrés en finanzas, mostrando efectos más profundos y diversificados que otros tipos de soluciones.
Si bien se trata de una primera medición y los productos sondeados no agotan la amplia oferta disponible en el mercado financiero de nuestro país, los resultados permiten repensar el rol de las empresas del sector en las comunidades en las que operan.
Es posible construir un círculo virtuoso que aporte de manera positiva a empresas y usuarios en simultáneo. Los productos financieros desarrollados con foco en las necesidades de las personas pueden mejorar su calidad de vida y también, contribuir al sostenimiento de resultados económicos alentadores en el tiempo por parte de las empresas.
La autora es Investigadora Estratégica en Naranja X
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