Entre Ríos: las disputas internas complican al oficialismo y a la oposición de cara a la elección a gobernador

Rogelio Frigerio intenta consolidar el voto que JxC obtuvo en las PASO para allanarse el camino hacia la gobernación. En frente, el peronismo busca remontar pero sus dirigentes mantienen sus diferencias

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Rogelio Frigerio y Adan Bahl
Rogelio Frigerio y Adan Bahl competirán por la gobernación de Entre Ríos en octubre

En un escenario de paridad, donde las diferencias en votos no fueron determinantes, las Primarias dejaron en el peronismo, en Juntos y en el sector libertario un escenario de compleja resolución.

Las mayores chances de victoria tras las PASO de agosto quedaron en manos de Rogelio Frigerio, el candidato de Juntos por Entre Ríos (JxER) que pretende desalojar al justicialismo del gobierno luego de 20 años.

En el mano a mano, quedó 7 mil votos por debajo del candidato oficialista Adán Bahl. Pero, en la medición de frentes, Juntos sumó casi 50 mil votos por encima del espacio justicialista Más para Entre Ríos.

Así, la victoria de Frigerio parece encaminada, pero antes tendrá que rearmar el cubo Rubik de la interna de JxER. Las PASO no reordenaron del todo al espacio electoral que armó Frigerio con una lógica de “toma todo”. Quienes caminan con él, indican que tras las primarias de agosto el ex ministro del Interior de Mauricio Macri se tomará unas semanas para cerrar las heridas y consolidar el bloque opositor. Recién entonces se lanzará a pleno en la campaña contra el peronismo.

Rogelio Frigerio y Pedro Galimberti,
Rogelio Frigerio y Pedro Galimberti, en la foto de unidad luego de competir en las PASO

Una de las caras del cubo que debe ordenar Frigerio, sin desacomodar las demás, es la del radicalismo. Hay un sector boina blanca que le responde. Y otro que, enancado detrás de la figura del diputado nacional Pedro Galimberti, lo enfrentó en la interna. No obtuvo minoría y quedó fuera del armado. Pero ahí están los votos que Juntos necesita para ganar.

Frigerio esperaba un sí pleno tras la convocatoria a Galimberti a sumarse a la campaña. Obtuvo un sí, pero de su ex adversario. El condicionamiento pasó por mantener ejes en un eventual gobierno de Juntos (salud y educación pública, por ejemplo) y el rearmado del frente electoral con “reglas claras y previsibilidad”. Hasta ahora, el criterio del ex ministro del Interior ha sido ley en el esquema organizativo. Sin embargo, nunca llegó a montar una Mesa Provincial como la que funciona en otras provincias.

La sangre y el río

El candidato opositor a la gobernación sostiene dos núcleos territoriales claves para sus aspiraciones: Paraná, la capital, y Gualeguaychú, una de las cuatro ciudades más importantes. En la primera, estriba en las chances de Emanuel Gainza de ser electo intendente. En la segunda, sus esperanzas están en Mauricio “Palito” Davico. Ambos le aportan votos y caudal político en la eventualidad de llegar al gobierno.

En ambos territorios hay problemas.

En Paraná, la radical Lucía Varisco (terminó segunda en la disputa por la candidatura a la intendencia) siguió el lineamiento de Galimberti y adelantó un acompañamiento condicionado a las candidaturas provinciales y locales a que se mantengan las banderas y principios de la UCR.

Las advertencias de Galimberti y de Varisco se hacen eco del rumor sobre un posible acuerdo entre Frigerio y Javier Milei para fomentar un corte cruzado en las generales. No hay pruebas ni gestos sobre este supuesto entendimiento.

Además, en la capital provincial la PASO no cerró las diferencias entre Gainza y Ayelén Acosta, quien finalizó tercera en la puja por la candidatura local. Acosta anticipó que hará campaña por Juntos, pero focalizó su apoyo en Patricia Bullrich y Frigerio. Ni siquiera mencionó a Gainza. La dirigente es, además, esposa de Walter Klix, el candidato de Juntos en el partido bonaerense de Escobar.

Rogelio Frigerio y Emanuel Gainza,
Rogelio Frigerio y Emanuel Gainza, candidato a intendente de Paraná

En Gualeguaychú el escenario es más complejo. Davico, actual intendente de la localidad de Pueblo Belgrano, se presentó como precandidato a intendente de Gualeguaychú, un caso con características similares a las de Jorge Macri. Ganó las primarias luego de que la Justicia Electoral desestimara las impugnaciones en su contra por un formalismo: Davico era pre candidato y la legislación regula cuestionamientos a candidaturas.

Tras las PASO, fue impugnado nuevamente. Y esta vez la Justicia Electoral analizó las objeciones y bajó su candidatura por dos razones: no cumplía con el mínimo de 4 años de residencia en la ciudad donde pretendía ser candidato y autorizarlo implicaría burlar el mandato constitucional de que una persona no puede ser intendente más de dos períodos consecutivos. Además, el fallo impugnatorio alertó sobre la posibilidad de crear candidatos itinerantes, que salten de una ciudad a otra para mantenerse en el poder.

Davico había amenazado que una decisión así generaría una suerte de nuevo 17 de octubre. Pero finalmente no pasó de una convocatoria reducida en su apoyo. No participó, por caso, el senador nacional Alfredo de Angeli, figura clave del distrito.

Frigerio sí se sumó y defendió a su alfil. Dijo que a quienes sacaron a Davico de la cancha “los moviliza el miedo de perder los privilegios que vienen acumulando algunos pocos en casi 40 años en el municipio y 20 en la provincia”, en un claro disparo contra el peronismo. Sin embargo, no fue el PJ el que impugnó la candidatura de Davico, sino sectores de Juntos. La decisión de primera instancia fue apelada y ahora será revisada por un tribunal de alzada.

Por otro lado, permanece la tensión entre el candidato a la gobernación y Patricia Bullrich. La ex ministra de Seguridad obvió durante la campaña para las PASO que las preferencias de Frigerio estuvieron con Horacio Rodríguez Larreta. Pero esto generó un clima de desconfianza hacia su ex compañero de gabinete. Ahora, en el entorno de Bullrich las sospechas giran en torno a una posible maniobra de Frigerio para provincializar la campaña, despegándose de los cuerpos nacionales de la boleta.

En la vereda de enfrente

Los problemas internos no son exclusividad de JxER. El peronismo aún trata de recuperar la vertical tras una primaria que reabrió viejas heridas.

El principal foco de conflicto está en Concordia, bastión electoral del PJ. Allí la interna para la intendencia terminó dirimiéndose en la Justicia Electoral y por un margen mínimo: 12 votos. El resultado dejó como vencedor al actual senador provincial Armando Gay (apoyado por el intendente Enrique Cresto y el senador nacional Edgardo Kueider) y a Angel Giano (el candidato que mejor veía el gobernador Gustavo Bordet) con las manos vacías.

La disputa por la candidatura fue dura. Y quedaron rencores. Por eso, las muestras de unidad no pasan de la formalidad. Una muestra clara fue que Giano se reunió con el candidato que terminó en tercer lugar, Alfredo Francolini, para armar un frente común frente al eje Gay – Cresto – Kueider.

Adán Bahl, el candidato del
Adán Bahl, el candidato del peronismo que busca llegar a la gobernación de Entre Ríos (@adanhbahl)

El único que puede sentar en una misma mesa a Montescos y Capuletos es Gustavo Bordet, por su ascendencia sobre Giano y su extensa relación de amistad con Gay (son compañeros de pesca). Pero hasta ahora pesa más el recelo hacia Cresto, con quien tiene una larga historia de enfrentamientos, y el alejamiento de Kueider tras la decisión de romper el bloque oficialista en el Senado.

El Gobernador no ha hecho campaña en Concordia porque no quiere ligarse al actual intendente. Tampoco ha pisado el territorio el candidato Bahl, preocupado por la baja performance electoral de la candidata a sucederlo en la intendencia capitalina, Rosario Romero. La tensión en interna paranaense también se nota. Gustavo Guzmán, segundo en la PASO municipal, no ha mostrado signos de alineamiento con Romero. Detrás de él está el agrupamiento ultra K que responde al ex intendente Julio Solanas, quien tiene cuentas pendientes con la candidata desde hace más de un década.

Bordet ha fugado su rol en campaña hacia el escenario nacional, con gestos permanentes hacia Sergio Massa. “Entre Ríos será parte activo del triunfo” del tigrense en las elecciones, vaticinó el mandatario. En las PASO, fue el candidato más votado. Por detrás quedaron Bullrich, el voto en blanco, Javier Milei y Rodríguez Larreta.

En La Libertada Avanza, en tanto, los distintos grupos que conforman el frente han venido demostrando que sólo los une estar atados al hilo de Milei. Las sospechas entre unos y otros van desde cuestionamientos al manejo de fondos hasta supuestos arreglos espurios para cortar al candidato a la gobernación, Sebastián Etchevehere, y favorecer a Frigerio.

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