Durante el gobierno kirchnerista creció el narcotráfico en todo el país. El Ministro de Seguridad, en vez de hacer algo para solucionarlo dijo que “los narcos han ganado”. Cada día hay más delitos y muertes violentas. Cada día hay más familias que pierden para siempre a un ser querido. Cada vez más nuestros mares y sus recursos están siendo depredados.
Hoy las fronteras de nuestro país son un colador por donde entran armas, drogas, y también hay contrabando e inmigración ilegal. Mientras tanto, los pseudo-mapuches ocupan tierras a la fuerza, sacándole a la gente lo que tanto esfuerzo le costó conseguir, y el Gobierno mira para otro lado.
Vamos a terminar con esta situación que nos deja el kirchnerismo, tan grave, tan desesperante para todos los argentinos. Si me eligen como presidente, voy a desplegar a las Fuerzas Armadas y de Seguridad a través de dos programas federales:
Primero, el Programa Frontera Norte. Con este programa el Ejército Argentino, con el apoyo de la Fuerza Aérea, va a encargarse de blindar la frontera norte para que la Gendarmería y la Prefectura se dediquen a combatir el narco y el crimen organizado en Rosario, en el conurbano y en las grandes ciudades, como Córdoba. Así vamos a recuperar el control del territorio.
Segundo, vamos a llevar adelante el Programa Atlántico Sur. La Armada y la Fuerza Aérea van a recuperar su rol fundamental en la defensa de nuestra soberanía marítima. Vamos a terminar con la depredación de toda la riqueza que nos ofrecen nuestros mares, promoviendo la cooperación y coordinación con otros Estados.
Vamos a desplegar a las Fuerzas Armadas para proteger los recursos estratégicos de los argentinos, como los hidrocarburos, la minería, las centrales hidroeléctricas y nucleares.
El kirchnerismo siempre se dedicó a castigar a las Fuerzas Armadas, dándoles un rol secundario. A partir del 10 de diciembre, si los argentinos me eligen, vamos a cambiar esta dura realidad. Los hombres y mujeres de nuestras Fuerzas van a estar en condiciones de cumplir con el rol estratégico que les asigna la Constitución: defender la soberanía nacional.
Como Comandante en Jefe, voy a garantizar que las Fuerzas Armadas estén operativas en el territorio nacional, equipadas con la mejor tecnología y que sus integrantes reciban salarios, jubilaciones y pensiones que reconozcan su esfuerzo y valentía, y que estén equiparados a los que reciben las fuerzas de seguridad.
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Las tierras que el gobierno kirchnerista les sacó a las Fuerzas Armadas para dárselas a sus amigos, van a volver a manos de las Fuerzas. No sólo les pertenecen a ellas: les pertenecen a todos los argentinos. También vamos a recuperar los Liceos de formación, que el Gobierno nacional quiere cerrar o convertir en otra cosa.
Vamos a acercar a las Fuerzas Armadas a la comunidad para que estén ayudando cuando más hace falta, salvando vidas en catástrofes y emergencias como incendios e inundaciones.
La defensa civil va a pasar a estar integrada dentro del Ministerio de Defensa, para dar una mejor respuesta ante estas situaciones de emergencia que tan angustiantes son para miles de argentinos.
El Estado va a volver a tener control sobre nuestro territorio. Vamos a encontrar a los narcos y a encerrarlos para que reciban el castigo que les corresponde en cárceles de máxima seguridad alejadas de los centros urbanos, con inhibidores de señal para que los criminales más peligrosos queden incomunicados y aislados. Basta de que los delincuentes, los jefes narco y líderes de organizaciones criminales sigan dando órdenes desde la cárcel. Además, vamos a avanzar con la ley de extinción de dominio para sacarle los bienes a los criminales y que sus recursos vuelvan a la gente.
Voy a llevar a todo el país el sistema de cámaras de reconocimiento facial, para recapturar a los violadores, asesinos, narcos y secuestradores que hoy están prófugos.
El Gobierno dejó sin cubrir muchas vacantes de jueces y fiscales, y eso favoreció el aumento del narcotráfico y el delito. Si los argentinos nos eligen, vamos a empezar a cubrirlas desde el primer día de mandato.
Ya fracasó el plan kirchnerista de que los argentinos nos peleemos entre nosotros mientras crecen el narco, el delito y la violencia. Los argentinos tenemos que estar tranquilos, juntos y en paz para sacar adelante a nuestro país y para resolver todos los problemas que nos duelen: la pobreza, la inflación, la inseguridad, la falta de oportunidades para progresar.
Las Fuerzas Armadas y las Fuerzas de Seguridad van a ser protagonistas de las transformaciones de nuestro país y juntos vamos a hacer el cambio de nuestras vidas
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