Dolarización: fortalezas y debilidades

El descalabro económico en que está el país con sus nefastas consecuencias de inflación replantea cuáles son los caminos para seguir

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La característica principal de la dolarización es que es permanente o casi. Dar marcha atrás a la dolarización es mucho más difícil que modificar o abandonar un régimen de convertibilidad (Reuters)
La característica principal de la dolarización es que es permanente o casi. Dar marcha atrás a la dolarización es mucho más difícil que modificar o abandonar un régimen de convertibilidad (Reuters)

Hoy la salida más debatida para superar el estadio de elevada inflación es el de la dolarización. Bajo este sistema, un país abandona oficialmente su propia moneda y adopta como signo de curso legal el dólar estadounidense, es decir la utilización puntual y limitada al empleo oficial y total de la moneda extranjera en todas las transacciones.

Destacados economistas han comenzado a sostener y defender en casi todos los países en desarrollo que deberían dolarizar sus economías, y hasta se ha instado a algunas naciones industriales a que lo consideren para sus propias economías. En la Argentina, Javier Milei hoy es su impulsor y defensor.

Las diferencias entre un régimen de convertibilidad o caja de conversión como el adoptado durante el gobierno del presidente Carlos Menem por su ministro de Economía, Domingo Cavallo, y la dolarización son pocas, pero importantes.

La característica principal de la dolarización es que es permanente o casi. Dar marcha atrás a la dolarización es mucho más difícil que modificar o abandonar un régimen de convertibilidad. De hecho, una de las mayores ventajas que tiene la dolarización es su credibilidad, y ésta se deriva precisamente del hecho de que se toma una decisión casi irreversible.

Una de las mayores ventajas que tiene es su credibilidad

Al adoptar plenamente la dolarización se pierden los ingresos que produce el señoreaje, mientras que no ocurre así en el régimen de convertibilidad. Sin embargo, el país que dolariza su economía elimina completamente el riesgo de devaluación cambiaria y, de esa manera, obtiene tasas de interés más bajas para sus empréstitos en el exterior.

Ventajas e inconvenientes

La prima de riesgo. El atractivo principal de la plena dolarización es que elimina el riesgo de devaluación fuerte o repentina del tipo de cambio. Una ventaja inmediata que produce la eliminación del riesgo de devaluación es que reduce la prima de riesgo que paga el país sobre los empréstitos del exterior (Riesgo País).

En consecuencia, tanto el gobierno como los inversores privados pagarán tasas de interés más bajas. Con tasas de interés más bajas se reduce el costo del servicio de la deuda pública y se alienta que la inversión y el crecimiento económico sean más elevados.

El atractivo principal de la plena dolarización es que elimina el riesgo de devaluación fuerte o repentina del tipo de cambio (Franco Fafasuli)
El atractivo principal de la plena dolarización es que elimina el riesgo de devaluación fuerte o repentina del tipo de cambio (Franco Fafasuli)

Lo que comúnmente se considera como riesgo país puede descomponerse en dos partes. Por un lado, está la prima de riesgo de devaluación, que es la que refleja la posibilidad de que el país cambie el tipo de cambio fijado. Por otro lado, la prima por riesgo soberano que mantiene la Argentina refleja la probabilidad de que simplemente no honre su deuda, o como también se dice, que caiga en default.

Con la dolarización, desaparecería el recargo o prima de las tasas de interés por riesgo de devaluación, pero persistiría la prima por riesgo soberano, con lo cual la disminución en el riesgo país no sería tan significativa como pudiera esperarse en un principio.

Señoreaje. Es la utilidad que percibe la autoridad monetaria por emitir una pieza cuyo valor intrínseco es inferior al nominal. Es decir, la autoridad monetaria tiene el derecho de imprimir trozos de papel (billetes) o piezas de metal (monedas) cuyo costo de fabricación es ínfimo comparado con su valor en el mercado. Habitualmente se deja de lado el reducido costo de imprimir el papel moneda, y por señoreaje se entiende sencillamente el incremento en la masa de dinero en efectivo.

El país que adopta una moneda extranjera para que tenga curso legal sacrifica el derecho de señoreaje, es decir, las utilidades que percibe la autoridad monetaria por el derecho de emisión de moneda. El costo inmediato de perder ese derecho de emisión puede ser considerable y continúa con carácter anual.

Las utilidades que percibe la autoridad monetaria por el derecho de emisión de moneda se pierde

La dolarización afecta a dos tipos de pérdida de señoreaje:

1) el costo inmediato sobre la masa de moneda pues, a medida que se introduce el dólar y se retira de circulación la moneda nacional, las autoridades monetarias tienen que comprar el volumen de moneda nacional en poder del público y los bancos, devolviéndoles de hecho el señoreaje que se ha ido acumulando con el tiempo; y

2) las autoridades monetarias pierden las utilidades del señoreaje futuro que produce la circulación de nueva moneda emitida cada año para satisfacer el incremento de la demanda de efectivo.

De producirse la dolarización, Estados Unidos obtendría un incremento del señoreaje, ya que aumentaría la demanda de dólares por parte de la Argentina (Reuters)
De producirse la dolarización, Estados Unidos obtendría un incremento del señoreaje, ya que aumentaría la demanda de dólares por parte de la Argentina (Reuters)

De producirse la dolarización, Estados Unidos obtendría un incremento del señoreaje, ya que aumentaría la demanda de dólares por parte de la Argentina. En consecuencia, se plantearía la cuestión de que las autoridades estadounidenses compartieran todo o parte de ese ingreso adicional por señoreaje.

La dolarización no elimina el riesgo de una crisis externa, pues los inversores podrían huir debido a deficiencias en la situación fiscal del país o a la debilidad del sistema financiero. De todos modos, la dolarización ofrece el compromiso de que las expectativas del mercado sean más estables, pues eliminándose el riesgo cambiario se tiende a limitar la incidencia y la magnitud de las crisis y los casos de contagio.

No elimina el riesgo de una crisis externa, pues los inversores podrían huir debido a deficiencias en la situación fiscal

Con la plena dolarización, un país cede completamente el control sobre la política monetaria y cambiaria. Esta situación podría parecer idéntica a la convertibilidad, pues un país que adopte esa modalidad no puede devaluar. Sin embargo, y aunque sólo sea en circunstancias excepcionales, la convertibilidad ofrece un resquicio para abandonar el tipo de cambio fijado. Tanto es así, que el objetivo principal de la plena dolarización es eliminar ese riesgo de devaluación.

Si bien la plena dolarización elimina la vulnerabilidad del sistema bancario ante el riesgo de devaluación, no por ello desaparecen todas las causas que pueden provocar una crisis en el sistema financiero. Si se produce una corrida de depósitos, la situación de plena dolarización podría muy bien ser un obstáculo para la función que el Banco Central tiene como de prestamista de última instancia y, así, la respuesta que puede brindar ante una situación de urgencia en el sistema.

Conclusiones

En resumen, las ventajas e inconvenientes principales de la dolarización son:

• Evita las crisis monetarias y de balanza de pagos. Sin moneda nacional no hay posibilidad de una depreciación fuerte, ni de salidas súbitas de capital motivadas por el temor a una devaluación;

• Se obtiene una integración comercial más estrecha con las economías estadounidense y mundial ya que se asegura la estabilidad de los precios en dólares;

• Al rechazar claramente la posibilidad de la emisión monetaria, y con ello la amenaza de la inflación, se tiene la oportunidad también de robustecer las instituciones financieras y de crear condiciones favorables a la inversión;

• Es probable que exista resistencia política a abandonar la moneda nacional, un símbolo de identidad, para escoger la de otro país;

• Se pierde el beneficio del señoreaje y lo recibe Estados Unidos, a menos que decida compartirlo;

• Se cede toda posibilidad de tener una política monetaria y cambiaria autónoma, que incluyen el recurso al crédito del banco central para facilitar liquidez al sistema bancario en situaciones de dificultad;

• Una vez implementada es prácticamente imposible volver a contar con una moneda nacional.

Evidentemente cualquiera de las alternativas que se resuelva adoptar tendrá como condición sine qua non aspectos a ser cumplidos de manera obligatoria e inapelable y ellos son: 1) autoridad moral y política para tomar decisiones; y 2) honradez, honestidad, claridad y firmeza en cuanto a sus objetivos e implementación.

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