Reflexiones sobre la problemática del abuso sexual contra las infancias

Basta ASÍ es una Asociación Civil conformada por un grupo de personas que lucha contra el grave delito del Abuso Sexual contra las Infancias (ASI)

La publicación se presentó en la última edición de la Feria del Libro

El abuso sexual a niños es difícil de abordar porque cada caso conlleva una herida que no ha cicatrizado oportunamente. No soy especialista en derecho penal ni en niños víctimas de abuso sexual infantil. Sin embargo, integro estructuras institucionales, de las que a menudo destaco los avances y desarrollos que implementamos en ellas.

La Ciudad Autónoma de Buenos Aires cuenta con holgados recursos humanos, estructurales, procesales e interdisciplinarios abocados a esta temática. Sin embargo, pese a los notables avances en esta materia, muchas veces estas instituciones no dan respuestas del todo satisfactorias.

El mensaje que me deja la obra que comento Basta ASI. Reflexiones sobre la problemática del abuso sexual contra las infancias. Críticas y propuestas para el accionar judicial, es destacar la falta de coordinación de los recursos que aplicamos. Ello se refleja no sólo en los distintos fueros que intervienen simultaneamente en un caso de abuso, sino en la falta de coordinación de las intervenciones interdisciplinarias sobre el niño o niña.

No debiéramos quedarnos en el regocijo de presentar un libro, o de contar con muy buenas estructuras edilicias, y equipos interdisciplinarios. Estamos obligados en articular los recursos de tal modo de evitar que un niño/a sea convocado por distintos operadores interdisciplinarios para hablar de lo mismo, y que cada operador que intervenga, deba saber qué otras intervenciones y medidas existen sobre ese niño, previo a tomar decisiones.

Este tipo de publicaciones sirve para poner en real valor lo importante de los equipos interdisciplinarios, con esta pequeña crítica que me permito hacer.

Ello no implica una crítica al profesionalismo de quienes, precisamente, ponen cuerpo y cabeza en el abordaje de los casos. Es un llamado a reflexión, pues el niño no es ni puede ser un objeto de prueba.

Somos un país que se destaca por un gran número de profesionales de la psicología, una facultad que dicta la disciplina en forma autónoma, inclusive separada de la medicina. O sea, tenemos un desarrollo que es señero en el mundo.

Sin embargo, en los casos de violencias contra niños como lo es el ASI, la circunstancia de que respecto a un mismo hecho sufrido por un único niño, se solapen, se dupliquen e intervengan distintos equipos interdisciplinarios pertenecientes a distintos organismos y/o fueros, y se repregunte al niño por un mismo hecho, termina siendo una revictimización para el niño, quien en definitiva, ha sido el afectado por la situación sufrida.

La Ciudad de Buenos Aires ha avanzado muchísimo en este tema. Ha dictado diversa normativa acorde al paradigma de la protección integral de los derechos de niñas, niños y adolescentes. Se han creado estructuras especializadas, como por ejemplo, lo es la Cámara Gesell que depende del Poder Judicial y su Protocolo de actuación; la figura del Ministerio Público Tutelar (MPT), quien controla la legalidad de los procedimientos y promueve protección, promoción y satisfacción de los derechos y garantías de niñas, niños y adolescentes; la Cámara Gesell del Ministerio Público Tutelar; la Oficina de Asistencia a la Víctima y Testigo (OFAVYT) del Ministerio Público Fiscal; Equipos interdisciplinarios en varias instituciones; la Fiscal Especializada en Delitos Informáticos; o la Dirección General de Atención y Asistencia a las Víctimas del GCABA, quien diseña e implementar programas destinados a asistir a las víctimas de ASI.

Es decir, como porteños contamos con numerosos recursos en comparación a otras situaciones sociales en otros lugares del país. Aun así, debemos procurar no repetir situaciones que ya se dieron en la justicia nacional.

La obra destaca obstáculos aún existentes a trabajar:

-Tal es el caso de la salud mental del niño. ¿Quién se ocupa de velar porque el niño reciba inmediata asistencia y recuperación física y psíquica?;

-Subsiste en la justicia un descrédito o no valoración del rol de psicóloga/os particulares que atienden niño;

-Cada equipo interdisciplinario de cada organismo puede convocar al niño sin saber si este fue convocado o tratado por otro organismo;

-No hay criterios de actuación preestablecidos para la utilización de la Cámara Gesell. Se suele ordenar declaración testimonial mediante Cámara Gesell mucho tiempo después de que el niño develó ASI. No se suele analizar caso a caso, si el niño está en condiciones emocionales de declarar o exponerse, si es el momento, si el niño es muy pequeño; a veces se desestiman registros semióticos (no sólo lo que el niño dice, sino postura física, representación de juegos);

-Los exámenes médicos debieran concentrarse en una única vez y preservar todo tipo de pruebas como pueden ser las prendas del niño;

-No se suele pensar en los tiempos de los niños. Las vivencias sufridas, más los procesos judiciales que deben llevar a cuestas y pueden durar dos, tres o más años, quedan plasmados para toda su vida;

-Incluso en la Justicia de la ciudad sigue habiendo poca claridad respecto de quién puede recibir la denuncia de una niña, niño o a un adolescente y cómo debe ser esa recepción;

-Muchas veces los niños abusados no cuentan con adultos referentes que los acompañen, por lo que no cuentan con letrados que los patrocinen y se presente como querellante. Se avanzó más en niños en conflicto con la Ley Penal, brindándole abogados especializados. Lo mismo habría que hacer con los niños víctimas;

-Es común que operadores judiciales se limiten a ordenar la declaración testimonial mediante Cámara Gesell como única prueba, y omitan ahondar y escuchar a pediatras, psicólogos, docentes de la escuela, ver diarios íntimos, dibujos hechos en escuela, etc.;

-No hay estadísticas sistematizadas, con información desagregada, ni se publica la información.

Son ellas las que permiten saber a ciencia cierta qué esfuerzo debemos realizar, qué política pública debemos diseñar. Tener estadísticas más fehacientes o certeras nos permitiría un mejor desarrollo del tema.

Como dije en un comienzo, yo no soy especialista en derecho penal, pero me ayudó leer los artículos de esta publicación para poder despertarme un poco y percibir los avances obtenidos en la materia, y las tareas pendientes, que entiendo son realizables aunando esfuerzos y recursos existentes desde el inicio del proceso.

Por último, repitiendo lo que dije en la Feria del Libro durante su presentación, quiero citar la frase de Gabriela Mistral: “Somos culpables de muchos errores y faltas, pero nuestro mayor delito es abandonar a los niños. Muchas cosas pueden esperar, el niño no. Ahora es el momento en que sus huesos se forman, su sangre se constituye y sus sentidos se desarrollan. No les podemos contestar mañana, su nombre es hoy”.