“Tierra prometida”, el libro que reconstruye una década intensa de vínculos entre el catolicismo italiano y el rioplatense

Tierra prometida (Editorial Biblos, 2023) no es una novela, sino el relato de un fragmento de historia de la presencia católica en América Latina. Una historia de la que el autor ha sido protagonista directo y que recuerda aquí, por primera vez, en las páginas de este libro. El arco temporal abarca una década, de 1973 a 1984, corta pero intensa. Un período marcado, en América Latina, por la guerra de guerrillas revolucionaria de los movimientos procastristas, las feroces represiones de las dictaduras militares en Chile y Argentina, y la guerra de Malvinas entre Argentina e Inglaterra. En este dramático contexto se produjo el encuentro y el diálogo entre algunas figuras del catolicismo sudamericano y otras del naciente movimiento de Comunión y Liberación, que surgió en Italia en 1969/70 como continuidad de la Gioventù Studentesca milanesa liderada por el sacerdote Luigi Giussani. De ese encuentro, Alver Metalli reconstruye ahora las etapas, los episodios, los personajes, las historias. Una tarea no menor que le ha llevado más de un año, entre cientos de correos electrónicos y llamadas telefónicas para anudar tantas nuevas y viejas relaciones que parecían perdidas en el tiempo. Sin duda el autor merece nuestro agradecimiento por una investigación que ha llenado un verdadero vacío histórico.

De hecho, es una página de absoluto interés que comienza, completamente por casualidad, con una nueva comunidad fundada en Hinojo, provincia de Buenos Aires, por las monjas trapenses de Vitorchiano en febrero de 1973. Religiosas a las que don Giussani visita en varias oportunidades. Y continúa luego con un sinfín de encuentros completamente casuales, como el del peronista argentino Fabio Bellomo, que en el verano de 1978 habla con una joven que vende el semanario “Il Sabato” frente a la iglesia de Santa Maria sopra Minerva de Roma. Intrigado al descubrir que tenía en las manos un semanario católico, Bellomo pregunta por su procedencia y esto lo conduce a un intenso diálogo con un joven profesor de filosofía, Rocco Buttiglione, figura destacada del naciente movimiento de Comunión y Liberación. Cuando vuelve a su país, Bellomo cuenta esta conversación a sus amigos. Será Buttiglione, junto con un genial e incansable sacerdote de Romaña, don Francesco Ricci, quienes llevarán adelante el diálogo con numerosos intelectuales católicos latinoamericanos, atraídos por esta realidad de un catolicismo nuevo, joven y dinámico, incluso culturalmente, que se situaba fuera de la dicotomía reacción-revolución. Era algo que no existía en América Latina. En sus encuentros, Buttiglione y don Ricci -cuya primera biografía se presenta en el libro de Alessandro Rondoni La più bella delle passioni. Storia de Francesco Ricci (2011)- se confrontarán también, por mediación de Guzmán Carriquiry Lecour, secretario de la Comisión Pontificia para América Latina, con Alberto Methol Ferré, quien probablemente ha sido el intelectual católico latinoamericano más brillante de la segunda mitad del siglo pasado. Metalli conoció muy bien a Methol Ferré, intelectual de referencia del cardenal Jorge Bergoglio, hasta el punto de ofrecernos una larga y valiosa entrevista que fue publicada primero por Edhasa en 2006 con el título La América Latina del siglo XXI, y luego por Editorial Biblos, en 2014, con el título El Papa y el Filósofo.

De esta conjunción de diferentes voces, italianas y latinoamericanas, Metalli ha sido protagonista aunque, por un exceso de pudor, a veces tiende a ocultarse, a colocarse en un segundo plano. Fue él quien dirigió, desde junio/julio de 1981 hasta noviembre/diciembre de 1982, los 8 números de la revista “Incontri”, cuyo subtítulo era “Testimonios de América Latina”. Se trata de una revista de gran interés que recoge algunas de las voces más significativas del mundo intelectual católico latinoamericano junto con las de destacados protagonistas del movimiento de Comunión y Liberación.

La inspiración de fondo proviene del pontificado de Juan Pablo II, sobre todo de la Laborem exercens, la encíclica sobre el trabajo que renueva la tradición social de la Iglesia y la coloca en condiciones de abordar críticamente el panorama sudamericano desgarrado entre el populismo-revolucionario de izquierda y la derecha liberal-tecnocrática y militar. La Laborem exercens permitía el encuentro ideal con la Conferencia de la Iglesia Latinoamericana celebrada en Puebla en 1979, y conectaba la experiencia de Solidarność con la del catolicismo social sudamericano.

Cuando cierra “Incontri”, después de año y medio de existencia, su patrimonio ideal transmigra a dos nuevas revistas: “Nexo”, dirigida por Alberto Methol Ferré de 1982 a 1989, que hereda todos los colaboradores de “Incontri”, y “30 Giorni”, la publicación mensual internacional de “Il Sabato”, que también comienza en 1983 con Alver Metalli como jefe de redacción. Toda esta efervescencia de ideas y proyectos encontrará luego su colector ideal en el Meeting de Rimini, que comenzó precisamente en agosto de 1980. Y aquí encontramos, de manera cada vez más significativa, a los protagonistas del diálogo que describe el libro Tierra prometida convocados como relatores y testigos de las experiencias que maduraron en América Latina.

En los pabellones de la antigua Feria de Rímini estos protagonistas pueden tomar contacto con un movimiento de miles de jóvenes católicos. El intercambio de experiencias entre dos mundos y dos continentes es un unicum que involucra a figuras del más alto nivel. En 1982 serán invitados al Meeting como relatores Methol Ferré, Lucio Gera, el principal exponente de la “Teología del pueblo” argentina, Emilio Máspero, secretario de la CLAT, la Central Latinoamericana de Trabajadores, y el obispo Antonio Quarracino, quien al año siguiente será elegido séptimo presidente de la Conferencia Episcopal Latinoamericana. El cardenal Quarracino es quien lleva luego a Bergoglio como obispo auxiliar y colaborador a Buenos Aires.

De todo esto habla Tierra prometida. Así como habla, y sin duda no es la parte menos interesante del libro, de los viajes de don Giussani por América Latina, de las personas que conoció, del ímpetu misionero e ideal que guiaba al sacerdote lombardo. Metalli fue, en 1982, compañero y testigo de esos viajes. El volumen se convierte así en la narración de fragmentos de vida, de personajes que en contextos difíciles, a menudo trágicos, han luchado con generosidad para abrir caminos de paz, dar testimonio de la humanidad nueva de Cristo. Valioso documento de la complexio oppositorum de la Iglesia, que es capaz de poner en diálogo historias diferentes, de unir idealmente el catolicismo latinoamericano con el italiano.

Massimo Borghesi es profesor de Filosofía y autor de “Francisco: La Iglesia, entre la ideología teocon y el hospital de campaña”

[Tierra prometida se puede adquirir en la Feria del Libro de Buenos Aires en el espacio de las Ediciones Manantial, stand 516 del Pabellón Azul]

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