La necesidad de innovar para crear valor es una tendencia que día a día marca el ritmo de la industria del e-commerce y la logística. En muchos casos, la innovación se origina al incorporar nuevas tecnologías a los procesos existentes de creación de valor.
Lo cierto es que, hoy en día, la importancia de contar con una buena cultura de transporte en la empresa tiene mucho que ver con su éxito o su fracaso. En este sentido, la logística es parte esencial del funcionamiento de una empresa: se encarga de optimizar los tiempos y lograr la mayor rentabilidad de un negocio, sin perder el foco en la experiencia de los clientes. La palabra rentabilidad se vincula con la capacidad que tiene un negocio para aprovechar los recursos que tiene.
Aquí, la tecnología ocupa una posición fundamental, porque se trata de un actor esencial que ayuda a reducir los tiempos y costos en toda la cadena logística y aumenta, de esta forma, la productividad del negocio.
La importancia de contar con una buena cultura de transporte en la empresa tiene mucho que ver con su éxito o su fracaso
Sin la tecnología como aliada estratégica, se ponen de manifiesto algunas fallas graves como la pérdida de productos por falta de rastreo de los vehículos, errores humanos en facturaciones y demoras en los procesos, entre otras. Es por esto que cada vez las empresas son más conscientes de la necesidad de incorporar e implementar tecnología en sus procesos logísticos.
La pandemia aceleró procesos tecnológicos y de expectativa en los consumidores. Lo que hubiera sucedido en 5 años sucedió en solo uno. Cada vez más consumidores quieren sus envíos en un menor tiempo. Hoy, un servicio 24 horas es un commodity. Lo cierto es que el ecommerce supone un ritmo de crecimiento que supera los análisis de hace sólo un par de años.
La compra online se convirtió en un proceso tan habitual entre los consumidores que muchas empresas han resuelto comenzar su proyecto online y lanzarse a vender. Sin embargo, la competencia suele ser importante, de manera que, cuando estas empresas deciden dar el paso, se encuentran con los desafíos de la logística y con decisiones que son clave para el éxito del negocio.
La pandemia aceleró procesos tecnológicos y de expectativa en los consumidores. Lo que hubiera sucedido en 5 años sucedió en solo uno
Puntualmente, la logística en e-commerce es la cara de un negocio online y el eje de la experiencia del usuario. El objetivo principal se centra en brindar al consumidor final una experiencia de entrega rápida, ágil y con visibilidad de punta a punta.
La misma logística le permite al vendedor planificar sus estrategias de venta en relación con los costos y los tiempos, llegar a más clientes y potenciar sus resultados.
Las compañías deben tener presente que no sirve de mucho solo contar con la mejor plataforma, tener una gran oferta de productos o una gran estrategia para captar clientes online. Todo esto es importante, pero si el producto no puede ser entregado a tiempo al consumidor final, habrá restado todos los puntos de valor anteriores.
Lo aconsejable es que los comercios que venden sus productos a través de internet, se propongan una inversión en tecnología constante, la automatización de sus procesos todo lo posible, realizar una planificación adecuada de las ventas de los próximos meses y elegir un partner logístico con tecnología y con foco en los consumidores finales.
La generación de costos eficientes es posible, así como también las entregas más ágiles. En los próximos años, la industria tiene el desafío de prepararse para ofrecer una propuesta logística más completa, no sólo en la última milla, sino también en servicios de fulfillment, entregas express en 1 hora, sumando una propuesta de valor sustentable –sea con movilidad eléctrica o con flujos de distribución más productivos– reduciendo la emisión de gases.
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