En las últimas dos ruedas del mercado se vio una situación poco común y que causó gran revuelo dentro de los inversores: los bonos CER, es decir, los títulos públicos del Gobierno nacional que ajustan por inflación se han visto muy golpeados.
El jueves, la curva de los bonos CER continuó profundizando su sangría, marcando su segundo peor día en mucho tiempo. Aquellos bonos con vencimientos más cortos recortaron hasta 4% adicional a las bajas del miércoles, mientras que las caídas en el tramo medio y largo alcanzaron hasta 5 por ciento.
Si bien las bajas fueron más moderadas que el miércoles (donde hubo pérdidas de hasta un 13%), la volatilidad en el mercado no disminuyó en ningún momento. Sin embargo, cuando parecía que las bajas de los bonos CER no encontraban piso una vez más, el Banco Central (BCRA) y otros organismos públicos habrían intervenido en el mercado secundario para sostener las paridades de los títulos del Tesoro.
Las caídas en el tramo medio y largo alcanzaron hasta 5 por ciento
De esta manera, el desempeño mensual de los bonos CER sigue muy negativa con pérdidas que alcanzan hasta una caída de 24%. Por lo tanto, vale la pena preguntarse si el mercado está descontando en sus precios una reestructuración de la deuda en pesos luego de las elecciones generales del año próximo.
Ahora bien, ¿por qué se dio este movimiento en el mercado? En los últimos días, se puso en duda el cumplimiento de las metas fiscales, ya que quedó claro que el Tesoro está teniendo mayores necesidades a las esperadas. Cuando esto sucede, las alternativas que tiene el Estado para financiarse es más deuda o más emisión de pesos por parte del Banco Central. Son señales negativas que se sumaron a un mercado que se encuentra en este momento susceptible a datos negativos dado la situación coyuntural en Argentina.
Para intentar calmar las agitadas aguas, el ministro Martín Guzmán declaró en dos entrevistas que “la deuda en pesos no será defaulteada” y criticó a la oposición de haber esparcido rumores al respecto.
Vale la pena preguntarse si el mercado está descontando en sus precios una reestructuración de la deuda en pesos luego de las elecciones del año próximo
¿Qué hacemos en este contexto con los pesos?
La principal alternativa es dolarizar la cartera. En un contexto donde todos los analistas coinciden en que el Contado con Liquidación está “barato” podría ser una buena oportunidad para invertir en activos que estén atados a este tipo de cambio. Dentro del universo de esos activos, una alternativa atractiva son las Obligaciones Negociables.
Las Obligaciones Negociables (ONs) son títulos de deuda privada donde el emisor se compromete, según los términos de las Condiciones de Emisión, a devolver al inversor en una fecha determinada el monto recibido en préstamo y a retribuir dicho préstamo con intereses.
Lo interesante de estos bonos es que hay muchos de los conocidos “Hard Dollar”, es decir, que se puede ingresar a ellos tanto en pesos como en dólares pero, al momento del pago de los intereses y la amortización del capital, la moneda de pago serán dólares.
Por lo tanto, es una excelente alternativa para dolarizarnos, saliendo del riesgo de tener pesos y además cobrar una tasa de interés periódica en divisas.
SEGUIR LEYENDO: