Lo más interesante de las criptomonedas no es su precio, es su uso

Las corporaciones globales mueven casi USD 23,5 billones entre países cada año en criptomonedas y se proyecta que las personas habrán enviado USD 630 mil millones en remesas para fines de 2022

Guardar
Representaciones de la moneda virtual
Representaciones de la moneda virtual bitcoin (REUTERS/Dado Ruvic)

Cada año, el 22 de mayo, la comunidad cripto celebra el aniversario de la primera transacción comercial con bitcoin: dos pizzas que cambiarían la historia de las criptomonedas. Previo a este día, bitcoin no tenía ningún valor de mercado, no se había utilizado para ningún pago, no existían plataformas de intercambio y era simplemente una red insípida utilizada por pocas personas.

En 2010, el programador de Florida, Laszlo Hanyecz intercambió con éxito 10.000 bitcoins (con un valor actual de alrededor de USD 300 millones) por dos pizzas. Este día, conocido como el “Día de la pizza de Bitcoin”, marca el momento en que el bitcoin cumplió uno de los criterios clave para ser considerado dinero: se convirtió en un medio de intercambio, aceptado como pago por bienes y servicios. Desde entonces, las criptomonedas han logrado y han comenzado a explorar innumerables casos de uso en todo el mundo.

Productos y servicios para la vida cotidiana

Hoy en día, las criptomonedas se usan en todo el mundo para comprar automóviles, aviones, casas e incluso ciudadanía, y América Latina no es la excepción. En El Salvador, donde el bitcoin es una moneda de curso legal, se puede usar para comprar prácticamente cualquier cosa. Tigres, club de fútbol mexicano, se encuentra entre varios equipos deportivos que aceptan bitcoins para comprar entradas y la aplicación de entrega Rappi ya acepta pagos en criptomonedas. Cada uno de estos casos de uso posiciona a bitcoin y a las criptomonedas de manera más amplia, como una alternativa a las monedas fiduciarias tradicionales, igualmente válidas, útiles y valiosas.

Pagos Internacionales

Recientemente, también está surgiendo una nueva clase de casos de uso que posiciona a las criptomonedas no solo como una alternativa igual a la moneda fiduciaria, sino como una mejor opción. Es tal vez uno de los usos más interesantes para América Latina: los pagos internacionales.

Hoy en día, las criptomonedas se usan en todo el mundo para comprar automóviles, aviones, casas e incluso ciudadanía, y América Latina no es la excepción

Las corporaciones globales mueven casi USD 23,5 billones entre países cada año, y se proyecta que las personas habrán enviado USD 630 mil millones en remesas para fines de 2022. Al eliminar la necesidad de intermediarios y permitir que las personas envíen fondos directamente en minutos en lugar de días, bitcoin y otras criptomonedas reducen tiempos y costos para quienes dependen de las remesas. De hecho, un informe de Juniper Research sugiere que la tecnología blockchain reducirá el costo de las transacciones internacionales en USD 10 mil millones para 2030. Más allá de ayudar a las empresas con sus resultados, estos ahorros ayudan a las personas a pagar otros bienes y servicios esenciales, como alquileres, comestibles y cuidados familiares.

El futuro de la adopción del bitcoin

Desde su creación en 2009, entusiastas de Bitcoin han impulsado su adopción, promocionando su potencial para transformar nuestra sociedad. Durante la última década, esas mejoras han tenido resultados impresionantes y hoy la red de Bitcoin mueve en promedio USD 5 mil millones de dólares diarios. Se ha desatado una explosión cámbrica en la industria, con nuevas redes y criptomonedas buscando la adopción masiva de las criptomonedas como se logró con la red de Internet a principios del siglo XXI.

Cuando se producen caídas en el mercado, es fácil volverse pesimista con respecto a las criptomonedas. Sin embargo, lo más interesante de las criptomonedas no es su precio, sino su uso. La utilidad de las criptomonedas (su capacidad para facilitar transacciones más rápidas, sencillas y asequibles, ayudar a las personas que más lo necesitan con agilidad, facilitar procesos globales complejos y brindar inclusión y libertad financiera a las personas) es lo que inevitablemente llevará a miles de millones de personas en todo el mundo a adoptar la tecnología y a conseguir una mejor vida con ella. Un gran salto desde la simple compra de pizza hace 12 años.

SEGUIR LEYENDO:

Guardar