“En unión con los obispos y los fieles del mundo, deseo solemnemente llevar al corazón inmaculado de María todo lo que estamos viviendo; renovar a ella la consagración de la Iglesia y de la humanidad entera y consagrarle, de modo particular, el pueblo ucraniano y el pueblo ruso, que con afecto filial la veneran como madre”, dijo el Santo Padre en la misa del viernes pasado.
Lo sagrado no tiene una explicación racional pero mueve montañas y el viernes último a partir de las 5 de la tarde de Roma el Papa celebró por la Paz una Misa Mundial, llevada a cabo, al mismo tiempo, en todo el mundo. En nuestro país fue presidida por el presidente de la Comisión Episcopal Argentina Monseñor Oscar Ojea acompañado por los obispos en la Basílica de la Virgen de Luján.
“Oh María, madre de Dios y madre nuestra, nosotros, en esta hora de tribulación, recurrimos a ti -rezamos todos -tú eres nuestra madre, nos amas y nos conoces, nada de lo que nos preocupa se te oculta… tú siempre nos llevas a Jesús, príncipe de la paz”. (Otra vez) “perdimos la senda de la paz. Olvidamos la lección de las tragedias del siglo pasado, el sacrificio de millones de caídos en las guerras mundiales. Desatendimos los compromisos asumidos como comunidad de naciones y estamos traicionando los sueños de paz de los pueblos y las esperanzas de los jóvenes.” (Te pedimos) “Que (le digas al Señor que) tome hoy nuestro camino en sus manos; que lo guíe, a través de los senderos escarpados y fatigosos de la fraternidad y el diálogo, por el camino de la paz”... “Que nos libre de la guerra y de la amenaza nuclear”.
¿Acaso María tocó el corazón del Krenlim?
Mientras el Santo Padre celebraba la ceremonia en Roma por las redes se supo que Rusia, a través del poderoso ministro de Defensa, Serguei Shoigú, desde el Krenlim, anunciaba que “las metas planteadas están logradas y que las tropas rusas se concentrarán en la zona del Donbás -donde se habría neutralizado el genocidio llevado a cabo por las fuerzas neonazis ucranianas según fue reiteradamente denunciado por Putín. Todo parece indicar que se trata de un primer paso hacia la paz”.
¿Provocación o “invitación” al diálogo?
Al mismo tiempo el presidente ucraniano Volodimir Zelensky -quien pidió hace una semana, mediante su embajador ante el Vaticano, la mediación del Papa -invitó a Vladimir Putin a reunirse en Donbás. Este respondió diciéndole que sería bienvenido en Moscú, pero que antes debería dialogar con los líderes de las Repúblicas de Donetsk y la de Lugansk. De esa circunstancia queda claro el deseo del presidente ruso de des-escalar el conflicto pero también que la independencia de las nuevas repúblicas junto a la renuncia por parte de Ucrania a incorporarse a la OTAN son cuestiones que Rusia no negociará.
“¡La locura de la guerra!”. La locura –”la locura de la guerra”, dijo Francisco, de cualquier guerra, de todas las guerras.
En efecto, la guerra de los Balcanes de la antigua Yugoslavia tiene muchos puntos de contacto con la ucraniana de nuestros días. Estaban los grupos croatas y montenegrinos pro nazis enfrentados con los serbios apoyados por los rusos. Desapareciendo y reapareciendo la violencia fratricida duró décadas. Se cobró millones de vidas, hasta que llegó con la intervención de las Naciones Unidas la disolución de Yugoslavia y la independencia de Croacia, Serbia y Montenegro.
Un ex combatiente croata -muchos años más tarde -le relató a este cronista aquello que no dudó en calificarlo también de locura. La alianza bélica con Alemania fue asumida por “necesidad” para vencer al enemigo apoyado por los comunistas. “Éramos jóvenes nacionalistas enfrentados con los serbios, no éramos antisemitas, pero no teníamos otra posibilidad que respaldarnos en las fuerzas del Eje. Los serbios entraban en nuestros pueblos y asesinaban a cuanta persona hallaban a su paso, ingresaban a las casas, violaban a las mujeres, dejaban los cadáveres de éstas y de niños colgando de los alambrados o de los postes a los costados de los caminos…entonces nosotros avanzábamos sobre sus pueblos y hacíamos lo mismo…”. Dinko Sakich era un anciano octogenario amable y locuaz con quien este cronista siendo juez federal habló largas horas, y tuvo el deber de extraditar a pedido del Tribunal Superior de Zagrev donde el ex líder neonazi era procesado y fue condenado por crímenes de lesa humanidad.
¿Porqué el Papa no condena a Rusia? ¿porqué no viaja a Ucrania?
El Papa aceptó la invitación del presidente de Ucrania para mediar en el conflicto aunque resta conocer el temperamento que adoptará la cabeza del Krenlim.
No se puede pre-juzgar y mediar
El Santo Padre no puede invalidar su eventual rol de mediador condenando a unos y absolviendo a otros de antemano. ¿Qué clase de mediador puede ser quien prejuzga condenando a uno de los sujetos en conflicto? La prudencia de sus declaraciones son una condición para desarrollar una posterior mediación exitosa. Pero además la guerra presenta una arista religiosa.
La arista religiosa del conflicto
Según consigna el periodista Hernán Reyes Atayde de Telam a quien seguimos en su reciente entrevista al Padre Antonio Spadaro -estrecho colaborador de Francisco y director de la Revista La civilitá católica de Roma, ”la cautela papal en las consideraciones sobre los actos de Moscú de forma explícita se explica, no solo por la participación del Papa en una eventual mediación, sino también por “la complicada arista religiosa que envuelve al conflicto, que se da en medio de las tensiones ya preexistentes entre las Iglesias ortodoxas de Ucrania y Rusia”.
Recordemos que los Jefes de las iglesias cristianas ortodoxas de Rusia y de Ucrania, se encuentran, a la sazón, divididos por causa de la guerra, respecto de la cual mantienen posturas contrapuestas. El Santo Padre que en los últimos años construyo un puente de plata con el Patriarca Cirilo de Rusia, después de 1000 años de desencuentros entre Roma y Moscú, se ve obligado a pisar el doble plano -político y religioso -del terreno siberiano como zorro viejo. Y a pesar de las circunstancias logró en una conversación reciente coincidencias acerca de realizar esfuerzos en favor de la paz.
Los titánicos esfuerzos del Papa a favor de la Paz
Claro que lo dicho no obstó, sino al contrario, para la realización de gestiones diplomáticas y acciones humanitarias. Queda claro que -como le dijo Monseñor Oscar Ojea a Infobae en Luján -son y seguirán siendo “titánicos los esfuerzos del Papa para obtener el cese del fuego y construir un camino hacia una paz justa y duradera”. Así, el Presidente de la Comisión Episcopal Argentina enumeró las invitaciones del Secretario de Estado Parolín a una mediación papal, la visita personal de S.S. a la Embajada de Rusia, su comunicación telefónica con Zelensky, su aceptación de la invitación de este a mediar en el conflicto, el envío de sus colaboradores mas estrechos con fines humanitarios -los cardenales Michael Czerny y el Limosnero Konrad Krajewski -la ayuda de Cáritas internacional, la colaboración de la iglesia con los “corredores humanitarios” (Comunidad de San Egidio), las incesantes exhortaciones a la paz y la consagración de ambas naciones al Corazón de María durante la Misa Mundial de hoy” nos dijo el viernes Ojea, “son acciones concretas prácticas y de profunda importancia en la toma de conciencia universal de la necesidad del sostenimiento de la paz”.
El Papa va a servir, no hace “pasarela”
Y podemos agregar que el Vaticano no descartó -según Reyes -una futura visita papal a Kiev respondiendo a la invitación del intendente de esa comuna. En el Vaticano se espera un cese del fuego, “aunque no le falta coraje a Francisco para desafiar circunstancias como estas… ya lo hizo en la capital de República Centroafricana, Bangui, en 2015, cuando todavía había conflicto, estuvo en Birmania y Bangladesh e irá en julio a Sudán del Sur”, según recordó Antonio Spadaro y agregó: “”Además el Papa no hace pasarela: si va es para que su presencia ayude a la reconciliación…si va es para servir”.
El Santo Padre es infatigable en su titánica acción y está siempre dispuesto a luchar contra toda adversidad. Vaya si la tuvo en estos tiempos difíciles de gestión. A ellas dedicaremos una próxima nota, en la que también pediremos por la conversión de los periodistas anticatólicos argentinos que lo critican desde una diabólica y tozuda vileza.
Deberes para leer en casa
En las partes III y IV del Capítulo cuarto de la Exhortación Apostólica de S.S.Francisco Evangelii Gaudium expone una conceptualización de lo que debe entenderse por la paz social y desarrolla una metodología para pensar la construcción de la paz en justicia y fraternidad: El tiempo es superior al espacio (N. 222/225); La unidad prevalece sobre el conflicto (N.226/230); La realidad es más importante que la idea (N. 231/233) y El todo es superior a la parte (N.234/237). Son las mejores armas para pensar bien y prevenir la violencia, armas construidas en la Argentina y que hoy nos brinda la doctrina de la Iglesia católica desde Roma.
SEGUIR LEYENDO