La gestión financiera y las demandas de la transformación digital

Sin lugar a dudas, el contexto actual despertó en las empresas y bancos la necesidad de incorporar tecnología y acelerar los caminos hacia la transformación digital. Hoy la gestión financiera está afianzando este proceso implementando soluciones tecnológicas que ponen al usuario en el centro y dejan atrás viejos paradigmas que tenían al servicio por encima de las necesidades específicas de los clientes.

En la actualidad, la transformación digital y gestión financiera avanzan a pasos agigantados en función del consumidor final, pero estamos dejando de lado las necesidades del segmento de las empresas. Quienes están detrás de cada operatoria, transacción, inversión, pagos, depósito de sueldos o movimiento de dinero del usuario final o colaborador, también están demandando soluciones adaptadas a los nuevos tiempos.

La pandemia, con el confinamiento, las restricciones y los nuevos requerimientos por parte de las personas, empujó al sector a resolver sus finanzas de manera digital, porque debían ejecutarse de igual manera para asegurar la continuidad de la operación. Tanto las plataformas de los bancos y fintech estuvimos expuestos a ello; lo que nos adelantó a optimizar cuestiones de onboarding, documentación, módulos de pagos, autenticación, ingresos y otras cuestiones que en el ámbito del consumidor ya estaban casi resueltas.

El 95% de los empresarios encuestados en el último estudio de IDEA confirmó que estaban en una etapa de digitalización de la organización. Debemos entender que esta transformación viene de la mano de un cambio cultural interno y por eso es de suma importancia educar a los colaboradores sobre las nuevas herramientas de acción para el mundo digital, generando una propuesta de valor atractiva para captar nuevos talentos.

Asimismo, cuando hablamos de las necesidades de las empresas no debemos pensar solamente en las grandes compañías, sino en cada uno de los distintos perfiles y tamaños de las mismas, quienes han adoptado de manera interna transformaciones ágiles para atacar las nuevas reglas del mercado y encontrarse preparadas para las innovaciones que demanda un ecosistema en permanente evolución.

Por ejemplo, no es lo mismo una gran compañía, cuyo área financiera tiene colaboradores con roles específicos como una gerencia en “Transformación Digital”, versus una pequeña o mediana empresa donde el trabajo se concentra en las manos de unos pocos profesionales sobre los que recae toda la tarea administrativa y, en algunos casos, deben apoyarse en servicios externos como un estudio contable, microempresa o en un profesional experto en finanzas.

Las necesidades de grandes empresas o pymes tienen algo en común, insume mucho tiempo gestionar múltiples plataformas, dificultan la consolidación de datos, la automatización de tareas operativas y hasta la obtención de información de valor para la correcta toma de decisiones. Sin la ayuda de la digitalización y el hecho de encontrar un método de integración de sus servicios de software de gestión, se necesitaría más de un área entera para la correcta organización. Si bien son diferentes, demandan de una herramienta que brinde simplicidad a la hora de trazabilidad de datos, reportes, archivos, cuestiones que potencian el área de administración para generar eficiencias en su operatoria diaria.

El año pasado crecieron rubros que no usaban medios digitales antes de la pandemia, mientras que se identificaron más de 135 nuevas empresas dentro del ecosistema argentino fintech, abriéndose una puerta hacia la incorporación de nuevas herramientas de gestión financiera como la Factura de Crédito Electrónica, o el Recibo de Sueldo Digital, soluciones imprescindibles para los tiempos que corren hoy. En dicha línea, hubo una herramienta que a nivel mercado tuvo un crecimiento exponencial durante 2020, continuando el crecimiento acelerado en 2021: el E-cheq, producto estrella elegido por las pymes para financiarse.

Estamos en el momento exacto para consolidar las reglas del juego, donde la oportunidad, tiene que ver en cómo incorporamos de manera acelerada tecnología a los negocios. Antes el usuario entraba a hacer una transacción o una operatoria, hoy pide una plataforma y múltiples opciones de conexión con sus sistemas de gestión. La era de los Ecosistemas llegó a las empresas.

La integración es parte del nuevo paradigma que se está gestando, es el futuro, y hacia dónde vamos tiene más sentido formando alianzas que construyan un ecosistema estratégico donde las empresas puedan encontrar el servicio y la solución específica para cubrir sus múltiples necesidades en el momento adecuado.

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