PASO: mucha visibilizacion, pocas ideas

Argentina necesita urgente un cambio de rumbo para que la esperanza deje de ser Ezeiza y comience a crecer como un país normal que quiere que las personas vivan tranquilas, en paz y con futuro

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(EFE/David Fernández)
(EFE/David Fernández)

Hace pocos días, desde el cierre de listas precisamente, comenzó la recorrida mediática de los precandidatos a Diputados, Senadores, Legisladores y Concejales. Con ello, se lanzaron a la carrera para posicionarse y visibilizarse sobre las distintas fuerzas, a cualquier costo, en todos los medios posibles.

El detalle es que el show mediático tuvo esta vez muy poco contenido atrayente para los ciudadanos y votantes que, como se ve, están desencantados y con poca paciencia hacia la falta de capacidad de los postulantes a decidir sobre el futuro de la nación.

Tanto es así, que se sintió el vacío de propuestas y respuestas a las diferentes problemáticas urgentes a tratar, como son el tema del desempleo y desarrollo educativo, haciendo que muchos programas hablaran del poco rating que generaban los debates políticos, y las entrevistas con los precandidatos de todas las fuerzas políticas.

Nuestro país necesita que se construya una opción que legisle realmente para la gente y plantee un verdadero despertar en la política. Los independientes, comerciantes, empresarios, industriales, sindicatos, Pymes. Un espacio que incluya sin dudas y sin mentiras a los que tienen planes sociales para que puedan insertarse en el mundo laboral, y dejar de ser simplemente un numero dentro de la pobreza o el desempleo.

Argentina necesita urgente un cambio de rumbo para que la esperanza deje de ser Ezeiza y comience a crecer como un país normal que quiere que las personas vivan tranquilas, en paz y con futuro.

Sin embargo, haciendo justicia y sin meter en la misma bolsa a todos los precandidatos, tuvimos la irrupción de un Payaso, Mario “Marulito” Gabaglio, precandidato a legislador proscripto por el Partido Renovador Federal, quien no solo desde un humor “nietzcheriano” puso en espejo la imagen que nos devuelve la política, sino que fue uno de los pocos que, a pesar del show que montó, logró llamar la atención del electorado con la producción y las propuestas.

Una de las propuestas que más se comentó en redes y medios, fue la ideada en conjunto desde el Partido Renovador Federal: “Programar es renovar”.

El proyecto consta de varias aristas: por un lado, trata de capacitar en programación a jóvenes que cobran planes o quedaron fuera del mercado laboral, con una duración definida y salida laboral al mercado interno e internacional. Por el otro, integran a las nuevas generaciones a la cultura del trabajo. Cabe aclarar que hoy en día muchas empresas extranjeras contratan desde países periféricos, como el nuestro, a muchos jóvenes y con sueldos competitivos a nivel internacional. Detalle que no es menor, dado que muchos padres están muy preocupados porque no ven futuro para sus hijos, y dudan de que puedan independizarse de ellos debido a que, con la poca oferta laboral y la gran pérdida de poder adquisitivo, sumado a los paupérrimos sueldos que se ofrecen hoy, se hace imposible alquilar o pensar en una futura propiedad.

En este contexto, parece que ni lentos, ni perezosos, muchos precandidatos oficialistas y opositores desempolvaron proyectos similares.

El Gobierno Nacional volvió a poner en el escenario de propuestas el proyecto que lanzo el año pasado, en plena pandemia, “Argentina programa”. Un proyecto similar, pero más enfocado a las minorías LGBTQI+ y jóvenes que ilusionó a muchos, aunque quedó más en esperanzas que soluciones concretas.

En Argentina a los desórdenes que tenemos en materia económica, política y socio-sanitaria le ganamos con más institucionalidad, más sector privado, más inserción en el mundo y más sustentabilidad a largo plazo, menos corto plazo y coyuntura. Eso requiere liderazgo, estrategi y, en muchos casos, requiere tomar decisiones políticas que no son simpáticas, basados en un pensamiento de un capitalismo inteligente y fundamentalmente moderno. Un cambio de ideas acompañado de experiencia para no cometer errores del pasado.

Ya sea por olvido u omisión, los ciudadanos, que creemos que los jóvenes, golpeados por el desempleo y la falta de clases, necesitan mas oportunidades para igualarse a los de otros países, nos sentimos dichosos de que este debate de ideas les devuelva algo a ellos, porque este país les debe la dignidad y posibilidad de desarrollo de todas sus capacidades.

Ojalá sigamos viendo como desempolvan proyectos y los activan, porque si los llevan adelante podremos devolverles la posibilidad de creer en su país y sus gobernantes.

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