En mi época de entrevistador en un medio del Chaco, entrevisté a personalidades provinciales, nacionales e internacionales. Algunas de esas figuras me ofrecieron, en su momento, contundentes definiciones sobre Carlos Saúl Menem y a su gestión presidencial.
El fallecimiento, días atrás, de quien fuera presidente de los argentinos durante diez años amerita recordar algunas de esas opiniones, emitidas entre los años 1999 y 2000.
Zulema Yoma: “Menem es el hombre más poderoso del país, es el que tiene la banda presidencial sobre el pecho. Pero, evidentemente, tiene detrás suyo un poder mucho más poderoso que él. ¿Qué poder más grande hay detrás de Menem que lo obligó a ocultar la muerte de su propio hijo? ¿Por qué está preso de no dar una orden para que se esclarezca la muerte de su hijo? Menem está quedando como el encubridor número uno”.
Doctor Raúl Sapena Brugada, ministro de la Corte Suprema de Justicia del Paraguay: “El general Lino Oviedo es un militar golpista, un condenado y prófugo de la justicia. Fue condenado a diez años de cárcel por un tribunal militar, fallo confirmado por la Corte. Por eso es que todos los paraguayos de bien están sorprendidos por el asilo que le concedió el presidente Menem. Vino escapándose de mi país en un avión particular para no caer en manos de la ley y, sorprendentemente, el gobierno argentino igual lo recibió y brindó protección”.
Manuel García Solá, ex ministro de Educación de la Nación: “Durante el gobierno del presidente Carlos Menem, el gobierno del Chaco recibió aportes que ningún otro gobierno chaqueño antes que Rozas había recibido. Formé parte del gobierno de Menem, integré su gabinete como ministro de Educación y puedo dar centenares de testimonios de lo que estoy diciendo. Puedo afirmar una vez más que las numerosas escuelas que Rozas ha inaugurado con bombos y platillos no eran hechas con recursos provinciales, sino con recursos enviados por Menem”.
Hugo Moyano, líder de la CGT “rebelde”: “Ojalá que a Carlos Menem no se le ocurra volver a ser candidato ni en el 2003 ni nunca más, porque su gestión ha sido sumamente catastrófica para el país. Su gobierno ha sido, y las consecuencias las estamos viendo y padeciendo, uno de los peores de toda la historia argentina. Nos dejó en la miseria, en la ruina, y todavía tiene el tupé de creer que otra vez puede ser candidato. No darse cuenta del enorme daño que hizo al país y querer volver a postularse demuestra la demencia por el poder que tiene éste hombre”.
Sergio Beinstein, asesor del gobierno francés en materia de economía internacional durante la presidencia de Francois Mitterrand: “Menem es un personaje increíble. En otra época en la Argentina no hubiese sido ni siquiera intendente de Anillaco. Durante diez años creyó que al país lo manejaba él. Nunca se dio por enterado que otros manejaban el país por él”.
Rodolfo Terragno, ex ministro de Obras y Servicios Públicos de la Nación: “Durante este gobierno de Menem, la Argentina se desprendió de todas las empresas del Estado. Le ingresaron, en concepto de privatizaciones, unos 40.000 millones de dólares. ¿Cómo se explica que hoy día, en vez de haber disminuido la deuda la misma sin embargo haya crecido y hoy esté en 120.000 millones de dólares, que representan cinco años consecutivos de exportaciones? Después de diez años de gobierno querer echarle la culpa del actual endeudamiento al gobierno de Raúl Alfonsín me parece absurdo e inapropiado. El pueblo quiere y merece saber cómo en ésta última década creció tanto nuestra deuda externa. Me parece que el que tiene que sacar los cadáveres que tiene escondido en el placar es este gobierno menemista, no el gobierno que estuvo en la década del 80”.
Héctor Lombardo, pastor evangelista y ministro de Salud de Fernando de la Rúa: “Descarto totalmente que el doctor Menem alguna vez haya pensado en la doctrina social de Cristo para guiar su gestión. Aquellos que se ponen en defensa de los actos de corrupción no participan del espíritu cristiano. Los que apañaron y siguen apañando a gente que se enriqueció con el dinero destinado a mejorar la vida de nuestros ancianos no pueden considerarse cristianos. Quien o quienes se identificaron con una clara lucha contra la corrupción no pueden afirmar, como lo hizo Menem, sin miedo a ruborizarse, ‘tengo espíritu cristiano’”.
Padre Luis Farinello, fundador del movimiento neo-político “Polo Social”: “Lo de Menem ha sido terrorífico y creo que nadie podrá olvidar fácilmente a otros personajes nefastos como María Julia, Alderete y Corach, aquella innecesaria pista en Anillaco y los viajes por el mundo con una multitud de personas en un avión escandaloso. Pero en cuanto al modelo económico, este de De la Rúa es igual que el de Menem. Hoy, unos pocos intocables siguen haciendo su festín, mientras afuera la gente sigue sufriendo y esperando que se les tire las sobras por la ventana”.
Senador Luis Agustín León: “Más tonterías que las que hizo Menem siendo presidente es imposible que otro las haga. Nos desubicó internacionalmente. Este gran pavo real hasta le rindió homenaje a Pinochet, el hombre que le daba informes a los ingleses sobre cómo golpearnos a nosotros. Fue él y no otro el que dejó la monumental deuda externa que hoy nos aplasta a todos y cada uno de los argentinos. Si De la Rúa hubiese recibido de herencia sólo la mitad de esa deuda externa el país hoy no estaría debatiéndose en un mar de confusiones, preocupaciones e incertidumbre. Menem se equivocó mucho y cuando usted se equivoca lo mejor es que se calle”.
Enrique Crotto, presidente de la Sociedad Rural Argentina: “Menem es un hombre de una solvencia política fenomenal, alguien con una capacidad política que no la he visto en nadie. En este sentido, es muy superior incluso al doctor Raúl Alfonsín. Con patilla o sin patilla, siempre se preocupó por el país. Es mentira que gobierne para unos pocos. Y creo que el futuro lo ubicará como el hombre que hizo lo que debía hacerse en un momento clave y determinado de la historia argentina”.
Doctor Antonio Vázquez Vialard, juez de la Cámara Federal de Apelaciones del Trabajo: “Nunca en toda la historia argentina ha habido tanto desempleo como ahora, durante este gobierno de Menem. Solamente en 1998, según un informe del Centro de Estudios Laborales, se destruyeron 111.000 puestos de trabajo”.
Juan Penchansky, miembro del Jurado de Enjuiciamiento de la Nación: “Es cierto que Menem ya en sus comienzos decidió ampliar el número de miembros de la Corte. Pero esa ampliación no se hizo a dedo ni por decreto, sino por una ley que pasó por todos los mecanismos constitucionales previstos. Por lo tanto, la ley que aumentó el número de ministros de la Corte goza de absoluta legitimidad”.
Rubén Acosta, secretario general de la Asociación de Trabajadores del Estado (ATE) y de la Central de Trabajadores Argentinos (CTA), filial Chaco: “Menem regaló a los extranjeros un siglo de sudor, lágrimas y esfuerzos de nuestros abuelos. Argentina hoy parece una tierra arrasada. Como si hubiésemos tenido una guerra, nada quedó en pie. El ahora ex presidente bombardeó y destruyó todo lo que teníamos. Dejó las penas para nosotros, y el ferrocarril, el correo, el teléfono, YPF, las fábricas y tantas otras cosas para los de afuera. El bombardeo privatizador de Menem convirtió a millones de hombres y mujeres en desesperados desocupados que hoy deambulan de un lado a otro, buscando solución para el pan de cada día”.
Eduardo Menem, presidente provisional del Senado Nacional: “No es cierto que el presidente Menem haya perdido poder por el mero hecho de que se está acercando el final de su mandato. Su presencia muy destacada y muy elogiada de la semana pasada en Washington ante todos los banqueros del mundo, como las encuestas que hablan bien de su persona y de su imagen, son pruebas evidentes de que su poder está intacto”.
Adolfo Torres, rector de la Universidad Nacional del Nordeste (UNNE): “Lo que con Menem creció fue la macroeconomía, no la microeconomía. No se atendieron las cuestiones puntuales de la gente en lo que hace a la pequeña y mediana empresa, que es la que genera empleo y riquezas. Lo que ese supuesto crecimiento de la economía logró fue la aparición de nuevos ricos muy ricos y pobres muy pobres, que son la inmensa mayoría. Menem también impulsó fuertemente la idea de privatizar la educación, que nosotros resistimos con la energía que corresponde”.
Juan Carlos de Pablo, economista: “Hoy estamos todos fenómenos. La convertibilidad que nos rige desde hace cinco años fue y es un acierto definitivo de Menem. Un país como la Argentina que luego de 50 años de economía inflacionaria para de cuajo una demencia hiperinflacionaria y en menos de seis años tiene una inflación prácticamente cero, con precios libres, está para festejar de punta a punta”.
Padre Jesús Olmedo, titular de la Parroquia Nuestra Señora del Socorro, de La Quiaca, Jujuy: “Menem acaba de crear la Oficina de Ética Pública. En otras circunstancias yo le daría la bienvenida y bendeciría una oficina de esta naturaleza. Pero, propiciada por él, parece un chiste de mal gusto. Días atrás prendí el televisor y estaba hablando Menem. Enorme fue mi sorpresa, porque se comparó nada menos que con la Madre Teresa de Calcuta. Por un momento creí que estaba soñando, pero lo que escuché era real. Me gustaría decirle personalmente que está muy equivocado. Que muy pronto van a tener que venir a la Argentina las hermanas de Teresa de Calcuta para dar de comer a los pobres que él ha generado. Encima nos viene ahora con el cuento de que con el Plan Trabajar está solucionando el problema del hambre. Esto es absolutamente falso, engañoso y mentiroso. Entonces, si hay una persona en éste país que no me puede venir a hablar de ética es, justamente, el presidente Menem”.
Senador nacional Deolindo Felipe Bittel: “Creo que lo que Menem está haciendo es lo que se tiene que hacer. Argentina ha entrado a una etapa distinta y el presidente Menem sabe que la desocupación no es solamente un drama argentino, sino mundial. Lo preocupante de esto es que la subversión está aprovechando la desesperación que se nota en algunos lugares, como Cutral-Co, para renacer. Debemos hacer todo lo posible para que aquella demencia terrorista que finalmente derrocó al gobierno de Isabel Perón no resurja para poner en peligro nuestras instituciones democráticas”.
Antonio Canteros, intendente de Barranqueras: “Recuerdo el día que Menem estuvo en Barranqueras con nosotros, en 1991. En medio de una lluvia torrencial hicimos un emotivo acto popular, desde donde el presidente se dirigió al país para anunciar el cambio de la moneda –la ley de convertibilidad- y la creación de zonas francas para cuatro provincias, entre ellas Chaco, además de otras medidas. A esa visita presidencial la voy a recordar siempre. Era la segunda vez que un presidente justicialista de la Nación pisaba nuestra ciudad. El primero fue Juan Domingo Perón”.
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