La idea de invertir para dejar de trabajar puede conducirte al fracaso

Las inversiones pueden ayudar a construir un futuro mejor y no depender, llegado el momento, exclusivamente de la jubilación. Eso sí, no se debe esperar rendimientos mágicos sino reales, aquellos que puedan percibirse solamente en el largo plazo

Warren Buffett, presidente de Berkshire Hathaway (REUTERS/Kim Kyung-Hoon/File Photo)

Seguramente hoy muchas personas se están preguntando en qué invertir para algún día dejar de trabajar. Claro que la gestión de inversiones es muy importante para no depender exclusivamente de tu salario. Sin embargo, la evidencia empírica demuestra que las personas exitosas, independientemente de la actividad que realicen, son apasionadas por lo que hacen. Entonces, para tener éxito en las inversiones ¿por qué no considerarlas también como una vocación?

El niño que soñaba con ser inversor

En 1930 el mundo se adentraba en la Gran Depresión, la crisis más grande en la historia moderna, ocasionada por una fuerte caída de la Bolsa de Nueva York (conocido como el crac del ’29), cuyos efectos fueron devastadores para la economía global. En este contexto y en seno de una familia de profesión bursátil, nacía un niño que seguiría con pasión el mandato familiar. Sin ir más lejos, a los 10 años su padre, corredor de Bolsa, le enseñó a seguir los precios de las cotizaciones de las acciones y desde ese momento comenzó a realizarlo por su cuenta. A los 11, ya había comprado su primera acción por la suma de $27 dólares (producto de la mensualidad familiar que había ahorrado). Sin embargo, cuando recurrió a su padre para obtener más dinero para invertir, este le dijo que primero tenía que ganárselo. Por lo que ese mismo año comenzó a trabajar como repartidor de periódicos. Ya de joven emprendió varios negocios, los cuales vendió para costear sus estudios universitarios.

Este niño creció con una tremenda pasión por los mercados, hasta tal punto que hoy con 90 años sigue levantándose a las 7 de la mañana para ir a su oficina, donde trabaja hasta las 18 hs.

Hasta acá podría ser un relato como otro cualquiera, de no ser porque esta rutina la realiza la cuarta persona más rica del mundo, con un patrimonio de más 60 mil millones de dólares: Warren Buffet.

Probablemente la mayoría de nosotros con el 1% (60 millones de dólares) ya estaríamos buscando una playa del Caribe para retirarnos. ¿Será por eso que no somos “Buffet”?

Una regla y no la excepción

Podría pensarse que el considerado “el mejor inversor de la historia” es un loco. Ciertamente, a cualquiera le daría pereza seguir trabajando a tan avanzada edad. Sin embargo, en una cualidad recurrente en personas destacadas en cualquier ámbito al que pertenezca y más aún en los más grandes inversores de la historia.

Por ejemplo, estos son algunos inversores longevos que aún se encuentran en actividad:

- Charles Munger (96 años). Socio de Warren Buffet y vicepresidente de Berkshire Hathaway, el mayor conglomerado de empresas del mundo, que cuenta con una participación en 44 compañías multinacionales con más de 200 mil millones de dólares en acciones. Munger, todavía sigue yendo a la oficina de forma parcial y no se pierde ninguna reunión anual de la compañía.

George Soros (REUTERS/Lisi Niesner/File Photo)

- George Soros (90 años). Este mangante húngaro, naturalizado estadounidense, es el fundador del Fondo Quantum, que durante el tiempo que lo gestionó obtuvo un retorno medio anual de más de 30% en dólares. Esto lo sitúa entre los mejores gestores de fondos de la historia. Actualmente preside el fondo Soros Fund Management y sigue trabajando activamente, sobre todo realizando inversiones en bonos soberanos de mercados emergentes.

- Peter Lynch (76 años). Inversor estadounidense que como gestor del fondo Magellan en Fidelity Investments consiguió un retorno medio anual del 29% durante más de una década. Actualmente ejerce la vicepresidencia de Fidelity Management & Research Company y acude a las oficinas de forma part-time.

Hacia un plan de retiro exitoso

No tiene que interpretarse mal. Frente a la cada vez mayor inestabilidad económica, es un hecho que el sistema previsional futuro no asegurará ingresos suficientes para vivir cómodamente de una jubilación e incluso, en la mayoría de los casos, probablemente no alcance ni para cubrir los gastos básicos. Razón por la cual planificar de forma anticipada el momento del retiro es esencial para lograr la tranquilidad financiera en la vejez.

Lo que no resulta lógico es que cada vez más jóvenes se inclinen a las inversiones en la Bolsa con la ilusión de “vivir del trading” o retirarse a los 30 como si fueran futbolistas.

Es un hecho que el sistema previsional futuro no asegurará ingresos suficientes para vivir cómodamente de una jubilación e incluso, en la mayoría de los casos, probablemente no alcance ni para cubrir los gastos básicos

La idea de invertir para ganar un ingreso monetario que reemplace tu trabajo -por insatisfacción laboral- puede conducirte al fracaso. Esta situación podría asemejarse a ir al shopping cuando estás deprimido. No solamente no resuelve el problema de fondo, sino que después es peor, cuando finalmente llega la factura.

En este caso, será mejor replantearse el camino laboral, intentar reinventarse o de al menos probar realizar alguna actividad que te guste. Ya que quienes cuentan con una vocación definida y tienen la posibilidad de decidir a qué quieren dedicarse, logran extraordinarios resultados. Dentro de este grupo, y en el área de las finanzas, se encuentran los más grandes inversores de la historia, quienes no solo siguen yendo a trabajar a sus oficinas teniendo miles de millones de dólares y avanzada edad, sino que muchas veces trabajan también por fuera de la oficina, compartiendo sus conocimientos mediante el dictado de clases, conferencias y escribiendo libros, entre otras actividades.

Por fortuna, no es necesario tener vocación en finanzas para quienes quieran planificar su retiro. Actualmente existen diferentes sociedades de inversión y asesores financieros que pueden diseñar tu plan de retiro de acuerdo con el perfil de riesgo y plazo de inversión que tengas, mediante instrumentos que no requieren pasarse el día pegado a la pantalla de la computadora.

De esta manera, las inversiones te pueden ayudar a construir un futuro mejor y no depender, llegado el momento, exclusivamente de tu jubilación. Eso sí, no se debe esperar rendimientos mágicos sino reales. Aquellos que puedan percibirse solamente en el largo plazo.

El autor es Magíster en Finanzas (UBA) y fundador de InterFinance