Cumbre del Clima en Madrid: una oportunidad perdida

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La cumbre concluyó en Madrid
La cumbre concluyó en Madrid sin grandes avances (REUTERS/Nacho Doce)

Ya concluyeron las deliberaciones de casi 200 naciones que se reunieron en Madrid, convocadas por Naciones Unidas, para tratar de llegar a acuerdos efectivos y concretos capaces de evitar seguir aumentando los fenómenos climáticos, que hoy ya son devastadores a escala mundial. Esta reunión, denominada COP 25, se realiza 24 años después de la primera, COP 1, realizada en Berlín en 1995.

Veamos qué ha ocurrido a lo largo de tantas negociaciones internacionales, por casi un cuarto de siglo. Para esto señalemos que cuando comenzaron en Madrid estas deliberaciones en este mes de diciembre, la Organización Meteorológica Mundial nos alertaba con estas informaciones climáticas, que ponían en evidencia la gravedad de la situación global.

-Todo apunta a que 2019 será el segundo o tercer año más cálido del que se tienen datos.

-En 2019 la temperatura media mundial estuvo 1.1°C por encima de los niveles preindustriales.

-Desde 1993, cuando comenzaron las mediciones satelitales, la subida del nivel del mar se aceleró, debido a la disminución de los mantos de hielo de Groenlandia y la Antártida,

-Las olas de calor y las inundaciones que solían producirse “una vez cada 100 años” son ahora cada vez mas frecuentes.

-Ciclones tropicales de una intensidad devastadora se sintieron este año en varios países, desde Bahamas hasta Japón, pasando por Mozambique.

-Los incendios forestales arrasaron grandes zonas del Ártico y Australia.

-Las precipitaciones son cada vez mas irregulares, afectando el rendimiento de las cosechas.

-El calor extremo afecta cada vez más la salud de las personas y los sistemas sanitarios. En 2018 la cantidad de personas vulnerables de más de 65 años aumentó en 230 millones con respecto al promedio 1986-2005. En 26 de los 33 países afectados por crisis alimentarias en el 2018, la variabilidad del clima y los fenómenos metereológicos extremos afectaron negativamente

-Entre enero y junio de 2019 se registraron mas de diez millones de nuevos desplazamientos, de los cuales siete millones se debieron a fenómenos peligrosos, como el ciclón Idal en el sureste de África, el ciclón Fari en Asia Meridional, el huracán Dorian en el Caribe y las inundaciones en Irán, Filipinas y Etiopía.

-En 2018 las concentraciones de CO2 alcanzaron su valor máximo, con un aumento de casi 150 por ciento con respecto a los niveles preindustriales (1750). Las evidencias indican que este año 2019 han seguido aumentando.

-En octubre de 2019 el nivel medio del mar a escala mundial alcanzó su valor mas elevado desde que hay registros (1993).

-La constante pérdida de hielo marino en el Ártico continuó este año 2019. El balance de masa de hielo de Groenlandia indica que este año continuaron estas pérdidas.

A menos que las emisiones mundiales de gases de efecto invernadero caigan 7 % cada año entre 2020 y 2030, el mundo no alcanzará el objetivo de limitar el calentamiento global a 1,5° C por encima de los niveles preindustriales establecido en el Acuerdo de París. El Panel Intergubernamental sobre el Cambio Climático (IPCC) advirtió que ir más allá de 1.5° C aumentará la frecuencia e intensidad de los impactos climáticos, como las olas de calor y las tormentas en todo el mundo; otras consecuencias serían el aumento en el nivel del mar y un océano Ártico sin hielo en el verano.

Para limitar el calentamiento a 2ºC, las promesas nacionales de reducción de gases de efecto invernadero deberían triplicarse para 2030. Con una meta más ambiciosa de 1,5ºC los compromisos deberían quintuplicarse, ya que, como bien se dice, “estamos corriendo detrás de un autobús [el cambio climático] y nosotros cada vez vamos más rápido, pero este acelera y así se aleja”. Las emisiones de gases van en aumento a pesar de las advertencias de los científicos y de los compromisos políticos de 24 COP ya realizadas.

La disparidad entre las emisiones futuras que se esperan y las que son consistentes con la preservación del planeta es considerable. Es necesario que, en 2030, las emisiones anuales sean nada menos que la mitad que las actuales si queremos limitar el calentamiento del planeta a 2C. Tener presente que entonces el PBI mundial será 30 por ciento mayor y la población mundial aumentará casi 1000 millones.

Por estas razones era imprescindible que en esta reunión de Madrid se hubiera acordado reforzar los compromisos nacionales de reducción de las emisiones de forma drástica, ya que decarbonizar la economía exigirá grandes cambios estructurales en los patrones de producción y consumo de energía. Pero lamentablemente, los resultados de esta COP25 estuvieron muy lejos de las demandas de los científicos que piden acciones urgentes para detener el aumento de temperaturas con efectos catastróficos. Las diferencias entre los países en esta negociación han sido tan grandes que no se ha podido llegar a un pacto sustancial, y la presidencia de la COP25 ha admitido que los textos presentados no tenían el “suficiente consenso” para la aprobación.

En esta reunión en Madrid no se definieron las decisiones requeridas para reducir las emisiones y por eso en una actitud dilatoria se han postergado hasta que tenga lugar la COP26, a fines del año próximo en Glasgow. O sea, un año mas sin avances efectivos para cuidar nuestra Casa Común, comprometiendo así una creciente hipoteca para nuestros hijos.

El autor es miembro de la Academia Argentina de Ciencias del Ambiente

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