Pese a enormes esfuerzos realizados, las cifras de la educación en Latinoamérica muestran una realidad preocupante: la atención a la primera infancia no es integral, la tasa de asistencia de niñas y niños de 4 y 5 años a la escuela muestra que un 24% no asiste a los primeros años del nivel educativo. En primaria algo más de un 30% no finaliza el ciclo en la edad correspondiente. Uno de los datos más graves del estado de situación indica que, en secundaria, más del 50% de los adolescentes en edad respectiva no lo logra terminar, y los estudiantes que sí lo hacen no aprenden lo necesario para desempeñarse en la vida adulta.
Los problemas y el desafío que la realidad aludida supone se confirman con el crecimiento de los llamados ni-ni en la región (jóvenes que ni estudian ni trabajan), y con los resultados de las pruebas internacionales de calidad educativa, donde los países latinoamericanos se ubican en los últimos puestos entre las naciones participantes de distintos continentes. El problema se agrava y las brechas aumentan a medida que los estudiantes descienden en la escala socioeconómica y se alejan de los núcleos urbanos, donde la inequidad, la pobreza y la exclusión son, a la vez, causa y consecuencia del rezago educativo y de una triste verdad que duele y avergüenza: América Latina es la región más desigual del mundo, con 186 millones de pobres en 2016 según Unesco.
Es en este escenario que hace ocho años nació la Red Latinoamericana de Educación (REDUCA), que nuclea organizaciones de la sociedad civil de 15 países de la región que luchan por el pleno respeto al derecho humano a la educación y la mejora de los aprendizajes de las niñas, niños y jóvenes de esta parte del continente. Su objetivo incluye el trabajo por la mejora de la educación pública en cada país y la defensa del derecho de aprender de los alumnos mediante una participación activa para lograr que la política educativa sea prioridad y que los Estados cumplan los compromisos educativos establecidos en las leyes locales y en los pactos internacionales respectivos.
REDUCA coordinó el 6 y 7 de junio pasados la organización del Encuentro Regional de Ministros de Educación de la región que se desarrolló en Bogotá (Colombia). La reunión fue liderada por el Ministerio de Educación Nacional de Colombia (ministra María Victoria Ángulo) y coorganizada por REDUCA (representada por Educar 2050 de Argentina), la Organización de Estados Iberoamericanos (OEI) y el Banco de Desarrollo (BID).
El encuentro contó con la participación del presidente de Colombia, Iván Duque, quien entre otras consideraciones aseguró: "Hay que actuar para la equidad, direccionando los fondos a la educación, sobre todo en la primera infancia, y así llegar a los niños con alta vulnerabilidad". Participaron de la reunión ministros, viceministros y funcionarios de los ministerios educativos de los siguientes países: Argentina, Chile, Colombia, Cuba, Ecuador, Guatemala, Nicaragua, Perú, República Dominicana y Uruguay, y contó también con la participación por videoconferencia del ministro de Educación francés, Jean-Michel Blanquer.
La Unesco presentó un análisis del estado de situación de la región en los ODS4 y la Agenda 2030, así como se efectuaron presentaciones puntuales sobre los avances y retos en educación, liderazgo educativo, calidad, tecnología e inclusión.
Además de dialogar en torno a estos temas se procuró construir un entorno de privacidad y confianza entre los funcionarios, que les sea útil para intercambiar y compartir experiencias y lecciones aprendidas durante su gestión. Este espacio busca colocar la mirada en el largo plazo, e incluso pretende sostener la participación año a año, más allá del cargo político de sus miembros, con la intención de que los aprendizajes verdaderos no se pierdan entre gestión y gestión.
Flor Pablo Medina, ministra de Educación de Perú, comentó: "He sentido en esta reunión una dinámica de comunidad de aprendizaje". Las temáticas educativas sobre las que se trabajó con mayor profundidad fueron: ciudadanía global, calidad y equidad en la educación, liderazgo docente, y tecnología, inclusión y educación. En ese sentido, REDUCA comentó y distribuyó el informe Aprender es más, que constituye un importante aporte para trabajar en un plan estratégico conjunto por la mejora de la educación en Latinoamérica.
Las voces de los ministros, viceministros y participantes de la reunión dejaron entrever un mensaje común final al sostener que debe comprenderse el desafío educativo de nuestras naciones como una cuestión que supera a la enseñanza y al aprendizaje de los alumnos, y se debe encarar como una cuestión estratégica que hace al futuro de la región y al mayor desafío latinoamericano: saldar la deuda de aprendizaje con las niñas, niños y jóvenes de la región.
El autor es presidente de Educar 2050, secretario general de REDUCA.