Vengo de una familia con trayectoria judicial. Me desempeñé muchos años en el fuero civil de la Justicia Nacional y me alejé en la época del menemismo, cuando ya no sentía el mismo orgullo de antes de pertenecer a ese poder del Estado.
Sé que hay muchos jueces, funcionarios, fiscales y empleados que trabajan a diario con dedicación por impartir justicia. Pero también sé de la imagen negativa que la Justicia se ha ganado en la ciudadanía en general. Las consultoras ubican al Poder Judicial en el peor lugar, aun después de partidos políticos, Poder Legislativo y gobiernos en general. La sociedad señala la corrupción existente entre varios de sus miembros, y reclama honestidad e idoneidad para los miembros de esta "casta", encargada de interpretar y aplicar el derecho sobre nuestros bienes y libertades.
El Consejo de la Magistratura es el órgano constitucional para transformar la Justicia. Donde sus miembros, con abultados sueldos, participan de la elección y la sanción de los magistrados.
Con la composición anterior, el Consejo logró lo que nunca antes se hizo. En 3 años, 36 juicios políticos a jueces sospechados de mal desempeño, 30 jueces destituidos o renunciados, 14 jueces se fueron por conductas reprochables. Se cubrieron a través de concursos muchos juzgados vacantes y se efectuaron auditorías sobre la gestión de los juzgados federales con resultados terribles sobre la gestión y su demora. Auditorías que esperamos que se extiendan al resto del Poder Judicial y de manera regular, porque lo que no se mide no se puede mejorar.
Desde que volvimos a la democracia el peronismo tuvo mayoría en la Comisión de Acuerdos del Senado, que es donde se aprueban o no los pliegos de los magistrados que envía el Ejecutivo luego de ser seleccionados por el Consejo. Hoy el oficialismo ha perdido la mayoría en este. ¿Querrá la actual composición del Consejo, en su mayoría peronista, que los jueces que ellos nombraron puedan ser juzgados? ¿O este peronismo que se recicla permanentemente buscará seguir garantizando impunidad a sus jueces amigos?
Hoy nuevamente los argentinos debemos custodiar con nuestra presencia activa no solo el desempeño de los jueces, sino también el de este Consejo de la Magistratura, al que hoy le venimos a reclamar la destitución inmediata del juez federal Luis Rodríguez, quien no solo tuvo un acceso sospechado de irregularidades al cargo que ostenta, sino que ha sido denunciado varias veces por su mal desempeño, y separado por Cámara Federal de varias causas.
Este juez también ha sido acusado de haber cobrado sobornos millonarios para no investigar la ruta del dinero robado a todos los argentinos. Exijamos Justicia y castigo, no puede ser gratis el saqueo del Estado. No puede quedar sin condena ni el que lo efectuó ni el que miró para otro lado para no investigar. Ese saqueo nos privó de mejor educación, de mejor salud, de cloacas, de rutas, de oportunidades de generar trabajo genuino para todos los argentinos.
Se juega algo más que su destitución. Se juega la posibilidad de consolidar las instituciones de la República y comprobar que todos somos iguales ante la ley, sin privilegios. Los argentinos necesitamos que las leyes se cumplan y la Justicia actúe en tiempo y forma.
Hoy la realidad te toca el hombro para que te involucres. Hoy tu nación está en efervescencia por la impunidad. Hoy no podés seguir de largo. Hoy no podés mirar para otro lado. Te esperamos en Libertad 731, 18:30 horas, para entre muchos decir "presente", decir "basta de impunidad" y ratificar nuestra convicción eterna: que sin Justicia no hay República.
La autora es diputada nacional (Coalición Cívica – Cambiemos).