Soy una mujer apasionada por lo que "lo femenino" aporta a la sociedad, y hoy es nuestro día, así que celebro con cada argentina esta conmemoración internacional. Cuántos desafíos nos quedan por trabajar como sociedad para el reconocimiento integral de esa impronta tan única, tan característica que es el ser mujer.
Sólo a modo de pincelada comparto algunos retos que deberíamos continuar trabajando en nuestra comunidad y que otros países van resolviendo con políticas que favorecen la vida en común y la igualdad de oportunidades.
Aunque de órdenes distintos, me gustaría nombrar tres aspectos. El primero, y muy importante para poder convivir sanamente y terminar con formas y tratos que llevan a la violencia contra la mujer: el respeto integral al ser femenino manifestado en los diversos órdenes sociales -en la calle, en los medios de comunicación, en los ambientes de trabajo.
Cuando a alguna mujer le faltan el respeto en la calle, se la muestra como un objeto en medios de comunicación, o se la denigra en su ambiente laboral, se daña a todas las mujeres, y a su vez se afecta a la sociedad.
Los pequeños gestos, el respeto en lo cotidiano, son cosas que debemos cuidar y hacer respetar, porque constituyen la base de una cultura que evita conductas violentas y agresivas contra las mujeres.
Un segundo aspecto más específico es la nivelación salarial: una mujer debe cobrar lo mismo que un varón. A iguales condiciones de trabajo, igual salario. No existe argumento alguno que justifique que esto no sea así.
Y, en tercer lugar, creo que es preciso educar a los varones. Muchos de ellos, herederos de una cultura machista, no saben cómo tratar a una mujer, cómo ver su potencial, cómo interactuar de igual a igual sin sentirse afectados.
En estos días se habla mucho de mujeres que son víctimas de situaciones extremas y deben enfrentar embarazos en condiciones que resultan por demás difíciles. Debemos saber como sociedad, y las mujeres en particular, encontrar las soluciones, contención y asistencia que ellas necesitan.
No podemos apagar esos sufrimientos con respuestas que le generen un sufrimiento mayor a la mujer. Debemos debatir como sociedad cómo ayudarlas realmente.
Ese debate nos tiene que encontrar pensando en soluciones de fondo a los verdaderos problemas que viven esas mujeres, y es sumamente necesario que los varones asuman también con responsabilidad este desafío.
El 19 de noviembre es el Día Internacional del Hombre. Esa fecha debería celebrarse también como una exquisita oportunidad de debatir cómo construir esta sociedad con el valor de lo masculino y lo femenino de la mano.
Juntos, hombres y mujeres construyendo una sociedad que promueva la igualdad de oportunidades.
Hoy es el Día de la Mujer, así que lo celebro y brindo como mujer que orgullosamente soy.
La autora es Vicepresidente de la Nación.