Tras la apertura bursátil el dólar estadounidense se paga al inicio de operaciones a 886,53 pesos chilenos en promedio, de manera que supuso un cambio del 0,64% si se compara con la cifra de la jornada anterior, cuando acabó con 892,21 pesos chilenos en promedio.
En los últimos siete días, el dólar estadounidense marca una subida del 0,89%, por ello en términos interanuales todavía mantiene un ascenso del 8,35%.
Con respecto a días anteriores, encadena dos fechas sucesivas en números rojos. En la última semana la volatilidad es manifiestamente superior a los números logrados para el último año (19,29%), por lo que está pasando por una fase de inestabilidad.
Panorama del peso chileno
El peso chileno es la moneda de curso legal de Chile desde 1975, retoma el uso del signo de peso ($) y se encuentra regulado por el Banco Central de Chile, que controla la cantidad de dinero creado.
La moneda chilena se estableció en 1817 tras las independencia del país, pero fue hasta 1851 que se instauró el sistema decimal en el peso chileno, que ahora está constituido en 100 centavos.Conforme ha pasado el tiempo, la moneda ha ido cambiando, pero actualmente se contabiliza en pesos enteros.
A la fecha se pueden encontrar monedas de 5, 10, 50, 100 y 500 pesos, ésta última fue la primera moneda bimetálica producida en el país. En 2009 se intentó hacer monedas de 20 y 200 pesos, pero el proyecto fue rechazado por el Congreso. En tanto, en 2017 se aprobó que se dejaran de emitir las monedas de 1 y 5 pesos.
Asimismo, en octubre de 2018 el Banco Central Chileno anunció que iniciaría el retiro de circulación de las monedas de 100 pesoscreadas entre 1981 y el 2000, ello a fin de disminuir su convivencia con las monedas actuales, aunque aún son vigentes.
En cuanto a materia económica, Chile tuvo una fuerte respuesta fiscal en el 2021, lo que le permitió crecer hasta 11.7%, siendo una de las recuperaciones más rápidas en el mundo tras la pandemia de coronavirus. Esta situación se explica al consumo impulsado por el retiro de fondo de pensiones y apoyos fiscales directos.
Pese a ello, la recuperación en el mercado laboral ha sido más lenta y la inflación también ha afectado a Chile alimentada por fuertes presiones en la demanda, aumentos en los precios de las materias primas, interrupciones en los suministros y la depreciación del peso, lo que finalmente llevó a tener la deuda pública más alta en tres décadas (37%).
Para el 2022 el crecimiento del Producto Interno Bruto (PIB) se ralentizó y esta tendencia podría mantenerse de acuerdo con la última previsión de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal), que ha dicho que para el 2023 que esta nación sudamericana decrecerá 0,9 por ciento.