A dos días para la coronación del rey Carlos III, la corona británica continúa preparándose para la magnitud de un evento que no ha sucedido desde hace 70 años, desde que la reina Elizabeth II ascendió al trono en 1953.
Los equipos de seguridad reales practican día y noche el recorrido que realizará el soberano por las calles londinenses desde el Palacio de Buckingham hasta la abadía de Westminster para garantizar la seguridad del mandatario y de los más de 2,000 asistentes entre jefes de Estado, reyes y familiares de otras Coronas reales, figuras políticas y representantes de la sociedad civil.
Además, se estima que decenas de miles de personas de todo el mundo acudirán a ver el recorrido que hará el monarca en su carroza real por la avenida que conecta al Palacio mientras el desfile de las Fuerzas Armadas lo acompañará. Dada la magnitud, los equipos de seguridad aseguran que ya tienen preparado un imponente operativo frente al más mínimo altercado, e insisten en que tendrán tolerancia mínima ante cualquier alteración.
Haciendo referencia al altercado ocurrido en las últimas horas del martes 2 de mayo, cuando un hombre arrojó al Palacio de Buckingham, a través de la cerca de metal, lo que parecían ser cartuchos de escopeta. Inmediatamente el hombre fue detenido y aunque el cuerpo policiaco encontró un cuchillo entre sus pertenencias, el hecho no fue considerado como terrorismo.
Debido a esto, los protocolos de protección del monarca aumentaron, de tal manera que la policía informó que usará tecnología con reconocimiento facial durante la ceremonia. Además, se colocarán francotiradores en los tejados, agentes de protección civil, detectores de metal, se excluirá el tráfico aéreo en la zona y habrá perros rastreadores con el objetivo de extremar precauciones.
“Pero mi mensaje para cualquiera que quiera venir a Londres para perturbar estos eventos, es que tendremos una tolerancia muy baja de cualquier alteración. Y lo que encontrarán es una acción muy rápida de nuestra parte para asegurarnos de que los eventos ocurran sin ningún incidente”, advirtió el subcomisario adjunto de la Policía Metropolitana, Ade Adelekan.
Con información de AFP.