Alemania anunció el miércoles que está investigando un barco sospechoso de transportar explosivos con los cuales se habría hecho un “sabotaje” en los gasoductos rusos de Nord Stream hace unos meses, para intentar saber quiénes fueron los autores.
El 26 de septiembre de 2022 se detectaron cuatro grandes fugas de gas precedidas de explosiones submarinas en estos gasoductos que unen Rusia con Alemania y transportan la mayor parte del gas ruso a Europa.
Rápidamente se sospechó que había sido un atentado, lo que suscitó especulaciones sobre quién estaba detrás de esta operación tan compleja desde el punto de vista logístico y tan delicada desde lo diplomático.
Medios alemanes que detallaron otros elementos de la investigación judicial informaron que el barco que está en el punto de mira de la justicia fue alquilado por una empresa con sede en Polonia “aparentemente perteneciente a dos ucranianos”.
Al parecer, la embarcación zarpó del puerto de Rostock, en el norte de Alemania, el 6 de septiembre con una tripulación de seis personas, entre ellas buzos y un médico.
Con información de AFP