Endometriosis: cuáles son sus síntomas, causas y tratamiento

Hay enfermedades que no presentan síntomas, por lo que es importante llevar una vida saludable y hacer revisiones constantes al médico

Existen varios métodos para diagnosticar este padecimiento (Infobae/Jovani Pérez)

La endometriosis es un trastorno a menudo doloroso en el cual el tejido similar al tejido que normalmente recubre el interior del útero (el endometrio) crece fuera del útero. La endometriosis afecta más comúnmente a los ovarios, las trompas de Falopio y el tejido que recubre la pelvis. Es poco frecuente que el tejido similar al endometrio se encuentre más allá de la zona donde están los órganos pélvicos.

Con la endometriosis, el tejido similar al endometrio actúa como lo haría el tejido endometrial: se engrosa, se descompone y sangra con cada ciclo menstrual. Pero debido a que este tejido no tiene forma de salir del cuerpo, queda atrapado. Cuando la endometriosis afecta a los ovarios, se pueden formar quistes llamados endometriomas. El tejido circundante puede irritarse y eventualmente desarrollar tejido cicatricial y adherencias, es decir, bandas de tejido fibroso que pueden hacer que los tejidos y órganos pélvicos se peguen entre sí.

La endometriosis puede causar dolor, a veces grave, especialmente durante los períodos menstruales. También se pueden presentar problemas de fertilidad. Afortunadamente, hay tratamientos eficaces disponibles.

Síntomas

El síntoma principal de la endometriosis es el dolor pélvico, a menudo asociado con los períodos menstruales. Aunque muchas tienen cólicos durante sus períodos menstruales, las mujeres con endometriosis suelen describir un dolor menstrual que es mucho peor de lo habitual. El dolor también puede aumentar con el tiempo.

Los signos y síntomas comunes de la endometriosis incluyen los siguientes: Períodos dolorosos (dismenorrea). El dolor pélvico y los cólicos pueden comenzar antes y continuar durante varios días después de que comience el período menstrual. También puedes tener dolor en la región lumbar y en el abdomen. Dolor al tener relaciones sexuales. El dolor durante las relaciones sexuales o después de estas es común con la endometriosis. Dolor al defecar o al orinar. Es más probable que tengas estos síntomas durante un período menstrual. Sangrado excesivo. Puedes tener períodos menstruales abundantes esporádicos o sangrado entre períodos (sangrado intermenstrual). Infertilidad. Algunas veces, la endometriosis se diagnostica primero en aquellas personas que buscan tratamiento para la infertilidad. Otros signos y síntomas. Puedes presentar fatiga, diarrea, estreñimiento, hinchazón o náuseas, especialmente durante los períodos menstruales.

La intensidad del dolor no es necesariamente un indicador confiable de la extensión de la afección. Podrías tener endometriosis leve con dolor intenso o podrías tener endometriosis avanzada con poco o ningún dolor.

La endometriosis a veces se confunde con otras afecciones que pueden causar dolor pélvico, como la enfermedad inflamatoria pélvica (EIP) o los quistes ováricos. Puede confundirse con el síndrome de colon irritable, una afección que causa episodios de diarrea, estreñimiento y cólicos abdominales. El síndrome de colon irritable puede acompañar a la endometriosis, lo que puede complicar el diagnóstico.

Cuándo debes consultar con un médico

Si tienes signos y síntomas que pueden indicar endometriosis, consulta con tu médico.

Ante cualquier malestar lo mejor es acudir al médico (Shutterstock)

Hay factores que te ponen en mayor riesgo de desarrollar endometriosis, tales como los siguientes: No haber dado a luz Comenzar el período a una edad temprana Pasar por la menopausia a una edad avanzada Ciclos menstruales cortos, p. ej., menos de 27 días Períodos menstruales intensos que duran más de siete días Tener niveles más altos de estrógeno en el cuerpo o una mayor exposición durante toda la vida al estrógeno que produce tu cuerpo Bajo índice de masa corporal Uno o más familiares (madre, tía o hermana) con endometriosis Cualquier afección médica que impida el paso normal de sangre del cuerpo durante los períodos menstruales Trastornos del aparato reproductor

La endometriosis generalmente se desarrolla varios años después del inicio de la menstruación (menarquia). Los signos y síntomas de la endometriosis pueden mejorar temporalmente con el embarazo y pueden desaparecer por completo con la menopausia, a menos que estés tomando estrógeno.

Diagnóstico

Para diagnosticar la endometriosis y otras afecciones que pueden causar dolor pélvico, el médico te pedirá que describas tus síntomas, incluida la ubicación del dolor y cuándo se presenta.

Algunos de los exámenes para verificar si hay indicios físicos de endometriosis son los siguientes: Examen pélvico. Durante un examen pélvico, el médico palpa las áreas de la pelvis en busca de anormalidades, como quistes en los órganos reproductores o cicatrices detrás del útero. A menudo no es posible palpar pequeñas áreas de endometriosis, a menos que hayan causado la formación de un quiste. Ecografía. Este examen usa ondas sonoras de alta frecuencia para crear imágenes del interior del cuerpo. Para capturar las imágenes, se presiona un dispositivo llamado transductor contra el abdomen o se lo inserta en la vagina (ecografía transvaginal). Se pueden realizar ambos tipos de ultrasonido para obtener la mejor visión de los órganos reproductores. Una prueba por imágenes mediante ecografía estándar no le indicará definitivamente al médico si tienes endometriosis, pero puede identificar quistes asociados con la endometriosis (endometriomas). Imágenes por resonancia magnética (IRM). Una resonancia magnética es un examen que usa un campo magnético y ondas de radio para crear imágenes detalladas de los órganos y tejidos dentro del cuerpo. En algunos casos, una resonancia magnética ayuda a la planificación quirúrgica, ya que proporciona información detallada al cirujano sobre la ubicación y el tamaño de los implantes endometriales.

Laparoscopia. En algunos casos, es posible que el médico te remita a un cirujano para que te haga un procedimiento que le permita ver el interior del abdomen (laparoscopia). Mientras estás bajo anestesia general, el cirujano hace una pequeña incisión cerca del ombligo, inserta un instrumento de visualización delgado (laparoscopio) y busca signos de tejido endometrial fuera del útero.

Cada enfermedad tiene una o varias formas de diagnosticarla para así detectarla y luego combatirla (Europa Press)

El tratamiento para la endometriosis generalmente incluye medicamentos o cirugía. El enfoque que elijas con el médico dependerá de la gravedad de tus signos y síntomas y de si deseas quedar embarazada.

Los médicos generalmente recomiendan probar primero el tratamiento conservador y optan por la cirugía si el tratamiento inicial fracasa.

Analgésicos

Para ayudar a aliviar los cólicos menstruales dolorosos, el médico te puede recomendar que tomes un analgésico de venta libre, como los medicamentos antiinflamatorios no esteroides (AINE) ibuprofeno (Advil, Motrin IB, otros) o naproxeno sódico (Aleve).

El médico puede recomendar tratamiento hormonal en combinación con analgésicos si no estás tratando de quedar embarazada.

Terapia hormonal

Los suplementos de hormonas a veces son efectivos para reducir y eliminar el dolor en la endometriosis. El aumento y la disminución de hormonas durante el ciclo menstrual causa engrosamiento, descomposición y sangrado de los implantes endometriales. Los medicamentos hormonales pueden retardar el crecimiento del tejido endometrial y evitar nuevos implantes de tejido endometrial.

La terapia hormonal no acaba con la endometriosis en forma permanente. Los síntomas podrían reaparecer después de suspender el tratamiento.

Entre los medicamentos para tratar la endometriosis se incluyen los siguientes: Anticonceptivos hormonales. Las píldoras anticonceptivas, los parches y los anillos vaginales ayudan a controlar las hormonas responsables de la formación del tejido endometrial cada mes. Cuando usan anticonceptivos hormonales, muchas mujeres tienen un flujo menstrual más liviano y breve. El uso de anticonceptivos hormonales, especialmente los regímenes de ciclo continuo, puede reducir o eliminar el dolor en algunos casos. Agonistas y antagonistas de la hormona liberadora de gonadotropina (Gn-RH). Estos medicamentos bloquean la producción de hormonas de estimulación ovárica, reducen los niveles de estrógenos e impiden la menstruación. Esto hace que el tejido endometrial se reduzca. Debido a que estos medicamentos generan una menopausia artificial, la toma de una dosis baja de estrógeno o progestina junto con los agonistas y los antagonistas de la Gn-RH puede disminuir los efectos secundarios menopáusicos, como los sofocos, la sequedad vaginal y la pérdida de masa ósea. Cuando suspendas la medicación, volverán tus períodos menstruales y podrás quedar embarazada. Terapia con progestina. Una variedad de terapias con progestina, que incluyen dispositivos intrauterinos con levonorgestrel (Mirena, Skyla), implantes anticonceptivos (Nexplanon), inyecciones anticonceptivas (Depo-Provera) o pastillas de progestina (Camila), pueden interrumpir los períodos menstruales y el crecimiento de los implantes endometriales, lo cual puede aliviar los signos y síntomas de la endometriosis. Inhibidores de la aromatasa. Los inhibidores de la aromatasa son un tipo de medicamentos que reducen los niveles de estrógeno del cuerpo. El médico puede recomendarte un inhibidor de la aromatasa junto con progestina o anticonceptivos hormonales combinados para tratar la endometriosis.

Cirugía de conservación

Si tienes endometriosis y estás intentando quedar embarazada, la cirugía para extirpar los implantes de endometriosis y preservar el útero y los ovarios (cirugía conservadora) puede aumentar tus probabilidades de éxito. Si sufres dolores intensos a causa de la endometriosis, también puedes beneficiarte con la cirugía; sin embargo, es posible que la endometriosis y el dolor vuelvan a presentarse.

El médico puede realizar este procedimiento por vía laparoscópica o, con menor frecuencia, mediante una cirugía abdominal tradicional, en los casos más extensos. Incluso en los casos graves de endometriosis, la mayoría de las mujeres pueden ser tratadas con una cirugía laparoscópica.

En una cirugía laparoscópica, el cirujano inserta un instrumento delgado de visualización (laparoscopio) a través de una incisión pequeña cerca del ombligo e introduce instrumentos para extirpar el tejido endometrial a través de otra incisión pequeña. Después de la cirugía, el médico puede recomendar un tratamiento hormonal para aliviar el dolor.

Tratamiento de fertilidad

La endometriosis puede causar problemas para concebir. Si tienes dificultades para quedar embarazada, el médico puede recomendarte un tratamiento de fertilidad supervisado por un especialista en fertilidad. El tratamiento de la fertilidad va desde la estimulación de los ovarios para producir más óvulos hasta la fertilización in vitro. El tratamiento adecuado para ti dependerá de tu situación personal.

Histerectomía con extirpación de los ovarios.

En el pasado, la cirugía para extirpar el útero (histerectomía) y los ovarios (ooforectomía) se consideraba el tratamiento más eficaz para la endometriosis. Pero los expertos en endometriosis se están alejando de este enfoque y se centran en la eliminación cuidadosa y completa de todo el tejido de la endometriosis.

La extirpación de los ovarios deriva en menopausia. En algunos casos, la falta de hormonas producidas por los ovarios puede mejorar el dolor de la endometriosis, pero en otros, la endometriosis que permanece después de la cirugía continúa causando síntomas. La menopausia temprana también conlleva un riesgo de padecer enfermedades del corazón y de los vasos sanguíneos (cardiovasculares), ciertas afecciones metabólicas y la muerte prematura.

A veces, la extirpación del útero (histerectomía) se puede usar para tratar signos y síntomas asociados con la endometriosis, como sangrado menstrual abundante y menstruaciones dolorosas debido a cólicos uterinos, en las personas que no desean quedar embarazadas. Incluso cuando se dejan los ovarios, una histerectomía puede tener un efecto a largo plazo en tu salud, especialmente si te sometes a la cirugía antes de los 35 años.

Encontrar un médico con quien te sientas cómoda es fundamental para controlar y tratar la endometriosis. Es posible que desees obtener una segunda opinión antes de comenzar cualquier tratamiento para asegurarte de que conoces todas tus opciones y los posibles resultados.