El precio del dólar estadounidense en Perú cerró con una leve alza en la última jornada de la semana, luego de que robustos datos laborales en Estados Unidos voltearon las expectativas de los inversores y aumentaron los temores a mayores aumentos en las tasas de interés de ese país.
Mientras que en Perú el Ejecutivo expone ante la Comisión de Constitución del Congreso de la República una nueva propuesta de adelanto de elecciones, tras frustrarse dos iniciativas legislativas sobre este asunto en el Pleno durante esta semana.
Ante este escenario, el tipo de cambio culminó la jornada de este viernes 03 de febrero en S/ 3.8390 por dólar, registrando una subida de -0.16% frente al cierre del jueves cuando se cotizaba en S/ 3.8330, según datos del Banco Central de Reserva del Perú (BCR).
En lo que va del presente año, el billete verde acumula un avance de 0.84% en comparación con la última cotización de 2022, en S/ 3.807. Asimismo, hoy (viernes), en el mercado se negociaron USD 275 millones a un precio promedio de S/ 3.8516.
El precio de la divisa estadounidense en el mercado paralelo o casas de cambio es de S/ 3.86, mientras que en las ventanillas de los principales bancos del Perú se cotiza en promedio en S/ 3.94.
Perú en el sótano en ranking de divisas
Según el ranking de las principales divisas de América Latina, elaborado por Bloomberg, el sol peruano se ha depreciado -0.7% frente al dólar, ubicándose en penúltimo lugar, superando solo al peso argentino.
De acuerdo al medio internacional, el sol peruano cayó 1% frente al dólar en enero, a pesar de un repunte de 10% en el cobre, la principal exportación del país, lo que la convierte en la moneda de peor desempeño en América Latina.
“Aunque se viene apreciando esta semana, en lo que va del 2023 el sol peruano permanece como la segunda moneda de peor desempeño entre las divisas latinoamericanas en comparación al dólar estadounidense; solo superada por el peso argentino que ya se deprecia 5% frente al billete verde entre el 30 de diciembre pasado y este 2 de febrero”, señaló Bloomberg.
Mientras que el peso chileno con una apreciación de 9.1% es, por lejos, la divisa que mejor rendimiento anota este año entre sus pares regionales. Le siguen el colón costarricense (5.4%), el real brasileño (5.3%), el peso colombiano (5%), el peso mexicano (4.5%), el peso uruguayo (2.8%) y el guaraní paraguayo (0.3%).
Sol peruano se deprecia este 2023
Al cierre de la jornada del 31 de enero, el valor acumulado de la divisa estadounidense en el primer mes del año culminó en 1.05%, lo que significó que el sol peruano ha venido depreciándose este año a comparación con el cierre de 2022.
De acuerdo al Departamento de Estudios Económicos del Scotiabank, la variable termómetro de la economía peruana es el tipo de cambio, el cual muestra una depreciación menor a 1% en el periodo de análisis del 07 de diciembre de 2022 al 30 de enero de 2002.
Sin embargo, esta magnitud que no parece significativa, cobra relevancia cuando se le compara con la apreciación de 3.9% que registran las monedas emergentes de América Latina en ese mismo lapso de tiempo.
“En otros términos, el tipo de cambio podría haber fluctuado alrededor de S/.3.70 en vez de S/.3.85 si hubiera seguido la tendencia promedio de las monedas emergentes”, dijo Mario Guerrero, economista de Scotiabank.
Además, el analista señaló que el buen desempeño de las monedas emergentes se explica por el debilitamiento del dólar norteamericano en el mundo y por un muy buen inicio de año de los precios de los metales claves para la economía peruana, como el precio del cobre, que registra un alza de 10%, y el precio del oro, con un aumento de 9% en el periodo de análisis, reaccionando a la reapertura de la economía de China luego de relajar su política de Covid Cero.
“A manera de comparación, el peso chileno (CLP), divisa muy asociada al desempeño del precio del cobre, registró una apreciación de 5% en ese mismo lapso”, indicó Guerrero.
Inicio de jornada
En el inicio de jornada de esta mañana, el dólar estadounidense se negociaba a S/ 3,82 en promedio, lo que supuso un cambio del 0.66% comparado con la cotización de la sesión previa, cuando acabó con S/ 3.85 en promedio. En relación a la última semana, el dólar estadounidense anota una disminución del 0.06%, aunque, por el contrario, desde hace un año acumula aún un ascenso del 0.4%.
Si comparamos el dato con días pasados, dio la vuelta al dato de la jornada anterior en el que experimentó un ascenso del 0,08%, siendo incapaz de consolidar una tendencia estable recientemente. La volatilidad de los últimos siete días es sutilmente inferior a los datos logrados para el último año (17,92%), así que en esta última fase está tendiendo menos alteraciones de lo esperado.
Un diagnóstico del sol peruano
El sol es la moneda de curso legal en Perú desde 1991 y reemplazó al inti, que circuló entre 1985 y 1991, en un principio también fue llamada como “nuevo sol” para diferenciarla de su antecesora, pero para el año 2015 se le llama solamente sol.
El origen del nuevo sol se entiende tras la crisis mundial de 1929, que llevó a una profunda crisis económica y cambiaria al país, así como a la creación del Banco Central de Reserva del Perú. Fue durante el primer año del gobierno de Alberto Fujimori que se impulsó el nuevo sol para equilibrar la hiperinflación y reordenar la economía.
Tras entrar en vigor, un sol equivalía a un millón de intis o a mil millones de "viejos" soles; actualmente la moneda está dividida en 100 céntimos y su emisión está regulada por el Banco Central de Reserva del Perú.
En la actualidad circulan monedas de 10, 20, 50 céntimos, 1, 2 y 5 soles y billetes de 10, 20, 50, 100 y 200 soles. Antes también se acuñaron monedas de 1 céntimo, pero estas fueron retiradas de circulación en mayo de 2011, en tanto que en enero de 2019 salieron de circulación las monedas de 5 céntimos.
Por otro lado, la paridad cambiaria con respecto al dólar y el euro es fijada a diario por el organismo a cargo. Cabe precisar que desde el año 2014 la moneda peruana está en depreciación.
El 2022 terminó de forma agitada para la economía peruana y entre las principales preocupaciones o retos que hay para el 2023 está la alta inflación, la baja inversión privada y el continuo incremento de la tasa de interés.
Aunque el año pasado se reiniciaron todas las actividades económicas que se habían visto afectadas por la pandemia de coronavirus, la recuperación ha mostrado un lento avance debido a la crisis que aún se vive en los hogares peruanos.
Además, en su último informe el Instituto Nacional de Estadística e Informática (INEI) dio a conocer que la pobreza se incrementó en los últimos tres años y probablemente ésta no se pueda reducir para este año debido al impacto de una mayor inflación.
Con una crisis política de por medio, el 2023 pinta para ser un año retador en el tema económico, sin embargo, la última estimación de la Comisión Económica para América Latina (Cepal) Perú podría crecer hasta 2,2 por ciento.