La tortilla es el alimento mexicano por excelencia que no puede faltar en la mesa y prueba de ello es que en las zonas urbanas el consumo diario de tortilla al día llega a seis tortillas, mientras que en las zonas rurales la cifra se eleva a ocho tortillas, según estimaciones realizadas por el Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval).
La tortilla, especialmente la de maíz, es un símbolo de tradición cuando se habla de la cocina mexicana, y tal es su importancia que está incluida en la canasta básica alimentaria.
Esta industria, sin embargo, tampoco se salva de las garras de los grupos delincuenciales, pues apenas la semana pasada integrantes del Cártel de la Sierra obligaron a las tortillerías de Guerrero a reducir el precio por kilo a través de amenazas en cartulinas que fueron dejados en diversos establecimientos.
Los mensajes tenían los “nuevos precios” de la tortilla, la masa y además un “descuento” a los taqueros; la baja fue de al menos dos pesos. Los escritos iban firmados por “La Sierra”, nombre con el que se conoce al Cártel de la Sierra o Cártel de Los Tlacos.
Ante los aumentos que se han registrado en lo que va del año en el kilo de tortilla, el titular de la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco), Ricardo Sheffield, ha señalado a la empresa Maseca de ser la culpable al ser la principal proveedora de harina de maíz nixtamalizado.
“Y Maseca se ve que, aunque suba o baje el precio del maíz, estos angelitos nada más saben subirle [...] creo que por ahí hay algunos fenómenos económicos que le va a interesar mucho a la Cofece estudiarlos, porque algo no está funcionando bien en el caso de Maseca con la forma en que se comportan sus precios y cómo ellos orillan a la mayoría de las tortillerías en el país a aumentar el precio”, dijo el funcionario durante una de las conferencias matutinas del presidente Andrés Manuel López Obrador.
En este panorama, datos del Sistema Nacional de Información e Integración de Mercados (SNIIM) también deja ver que el precio de este producto ha ido en aumento en lo que va del año en diversas regiones del país, haciendo cada vez más difícil el poder llevar este alimento a la mesa.
Aquí la lista de precios de las tortillas de maíz en las principales ciudades del país al corte del 22 de agosto:
Ciudad de México
El precio promedio en las tortillerías de la capital mexicana es de $20.00 pesos por kilo y se ha mantenido así desde que hubo un incremento a finales de marzo de 2022. El valor es el mismo cuando se habla de los establecimientos en la Zona Metropolitana del Valle de México.
Al hablar sobre el precio en autoservicios se tiene que en la Ciudad de México se encuentra en $13.63 pesos; el precio es mayor cuando se considera el área conurbada, pues se eleva a $14.10 pesos el kilo.
Toluca
En las tortillerías de esta región mexiquense el kilogramo de tortillas se encuentra en $19.00 pesos luego de haber registrado dos aumentos en lo que va del mes; mientras en autoservicios se oferta en $14.17 pesos.
Monterrey
En Monterrey las personas adquieren el kilo de tortilla en $22.38 pesos, un aumento de $0.38 centavos con respecto a la semana pasada. En la Zona Metropolitana se encuentra en un promedio de $22.53 pesos proveniente de $22.43 pesos.
Sobre el precio en autoservicios, la tortilla de maíz mostró un ligero descenso al venderse en $14.07 pesos proveniente de $14.23 pesos ofertados la semana pasada.
Guadalajara
En la capital jalisciense el kilo se vende en $22.00 pesos en tortillerías; se trata del precio más alto desde que aumentó cuatro pesos a principios del mes de marzo.
En cuanto al precio en autoservicios, el producto hecho a base de maíz se encuentra en $13.80 pesos.
Otras variaciones en tortillerías
Para esta semana sólo otras dos ciudades se vieron afectadas en un aumento en el precio del kilo de tortillas: en Mexicali, Baja California, se vende en $27.86 pesos, es decir, 43 centavos más cara que la semana anterior; asimismo, en La Paz, Baja California Sur, el precio de dicho alimento subió 50 centavos y ahora se ofrece en $25.00 pesos.
En ninguna otra ciudad se registró alguna disminución en los precios.
La más barata y la más cara
De acuerdo con la información de la SNIIM, la tortilla más barata se encuentra en la capital de Puebla, en donde se adquiere a $14.15 pesos el kilogramo.
En contraste, las tortillerías que ofrecen dicho alimento más caro son: Hermosillo ($28.33 pesos); Mexicali ($27.86 pesos); Acapulco ($27.00 pesos).
Sobre los precios en autoservicios, la más barata se encuentra en Mérida y Campeche, en donde se vende hasta en $10.70 pesos.; mientras que en Veracruz se oferta en $10.70 pesos.
En contraste, la más cara se ubica en Saltillo, Coahuila, en donde se vende en $18.00 pesos el kilogramo.
La información del SNIIM se obtiene de una encuesta representativa en 53 ciudades del país basada en una muestra de 384 tortillerías y 120 tiendas de autoservicio, con un nivel de confianza del 95% y un margen de error del 5 por ciento. Los precios son actualizados los lunes, miércoles y viernes (días hábiles) de cada semana.
Precio nacional promedio en tortillerías hoy: $21.24 pesos
Precio nacional promedio en tortillerías anterior: $21.21 pesos
Precio nacional promedio en autoservicios hoy: $13.65 pesos
Precio nacional promedio en autoservicios: $13.65 pesos
A continuación el listado completo:
Inflación, el peor golpe
En el mes de julio de 2022, el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) reveló que el Índice Nacional de Precios al Consumidor (INPC) registró una variación de 0.74% respecto a la quincena anterior, por lo que la inflación general anual se ubicó en 8.15%, su punto más alto en 21 años.
Entre los componentes que más afectados resultaron fueron las mercancías; alimentos, bebidas y tabaco; y los productos agropecuarios.
En este contexto, en estados como Durango, Coahuila y Sinaloa se han comenzado a detectar tortillas falsas, elaboradas con otros ingredientes y de baja calidad.
Según los Grupos Unidos de Industriales de la Masa y la Tortilla, para evitar caer en la adquisición de estas “fake” tortillas se recomienda comprar en tortillerías plenamente autorizadas.
Además, otras formas de identificar una mala tortilla son: que estén elaboradas con olotes o harina de maíz y no con maíz nixtamalizado; si el agua usada no es potable; maquinaria no adecuada o sucia; sabor dudoso, color distinto al habitual; debe ser resistente y fácil de manipular, no frágil; aroma y textura distintos.
SEGUIR LEYENDO: