Llega una nueva misión del FMI para la cuarta revisión del acuerdo, en medio de la incertidumbre económica y política

El equipo que llega al país tendrá mayor volumen político: se sumará el mexicano Alejandro Werner, máximo responsable del departamento para el Hemisferio Occidental del Fondo

Lagarde y Macri (Manuel Cortina)

Los técnicos del Fondo Monetario Internacional iniciarán hoy la que será posiblemente la misión más delicada de todas las que prevé el acuerdo stand-by a tres años firmado con la Argentina.

El habitual sigilo de los funcionarios del Fondo será reforzado. Es probable que mantengan contactos con referentes opositores, pero no hay nada agendado aún. Y el equipo tendrá además un mayor volumen político: Roberto Cardarelli, jefe de misión del FMI para la Argentina, será como siempre quien lidere la tarea de analizar los números de la economía argentina, pero a diferencia de las últimas visitas se le sumará ahora su jefe directo, el mexicano Alejandro Werner, máximo responsable del departamento para el Hemisferio Occidental del organismo multilateral.

Las conclusiones, proyecciones y recomendaciones que contenga el staff report que se hará público tras el cierre de la misión van a marcar el terreno de juego durante prácticamente toda la campaña presidencial

Werner sin embargo no permanecerá en el país a lo largo toda la misión, que normalmente dura un par de semanas. Tiene visitas ya comprometidas a otros países de la región y Buenos Aires será una escala más en su recorrida.

"Un equipo del FMI encabezado por Roberto Cardarelli llegará a Buenos Aires el 8 de mayo en el contexto de la cuarta revisión del plan económico de Argentina que respalda el Acuerdo Stand-By de 36 meses", indicó hoy en Washington un vocero del Fondo.

Esta será la anteúltima revisión de los avances del programa stand by por 57.000 millones de dólares antes de las elecciones de octubre, pero posiblemente la más decisiva porque las conclusiones, proyecciones y recomendaciones que contenga el staff report que se hará público tras el cierre de la misión van a marcar el terreno de juego durante prácticamente toda la campaña presidencial.

Roberto Cardarelli, el jefe de los técnicos del FMI que analizan el caso argentino

Por eso es probable que los técnicos del organismo multilateral se muevan con mayor discreción que en oportunidades anteriores. El momento es delicado por las dudas que genera la economía y por la mayor cercanía de las elecciones, por lo que buscarán evitar las interpretaciones políticas de su trabajo, según pudo saber Infobae. Es probable, además, que no mantengan encuentros con los presidenciables de la oposición, cosa que sí ocurrió en las últimas dos misiones, y que restrinjan su labor al análisis técnico de los datos económicos. No es un desafío menor.

"Durante la misión, el equipo del FMI se reunirá con funcionarios gubernamentales y el Banco Central, así como con representantes del sector privado, la academia y la sociedad civil", informó el mismo vocero. Werner, agregó, "también se unirá a una parte de la misión, como ha sucedido en otras ocasiones".

Es probable que los técnicos del organismo multilateral se muevan con mayor discreción que en oportunidades anteriores

La próxima evaluación debería ser en agosto, posiblemente después de las PASO, y sus resultados se conocerán en septiembre, muy poco antes de la convocatoria a las urnas para las elecciones generales. Para entonces, el tablero electoral ya no ofrecerá sorpresas. Una de las grandes incógnitas electorales se develará el mes que viene, cuando venza el plazo para la presentación de precandidaturas.

"Esta vez no tienen mucho margen para hacer cuestionamientos", comentó a Infobae un analista de Washington sobre la tarea que aguarda a los técnicos del Fondo en Buenos Aires.

La observación presupone un acompañamiento a Mauricio Macri que el Fondo Monetario nunca admitiría públicamente pero que nadie pone en duda. El directorio quiere continuidad en las políticas. Lo expresó Christine Lagarde durante las recientes Reuniones de Primavera del FMI en la capital norteamericana cuando, ante una pregunta de Infobae, sostuvo que "sería una tontería" si cualquiera de los candidatos le diera la espalda al acuerdo firmado. Para el Fondo, el Presidente es por ahora quien ofrece mayores garantías de continuidad, aunque Cardarelli abrió diálogos con todos los sectores.

Los enviados del FMI y Kicillof, en la última visita del organismo

La misión se extenderá por dos semanas y al término se conocerá una evaluación preliminar que deberá luego ser aprobada por el directorio del Fondo. Una vez que eso ocurra, hacia fin de mes o inicios de junio, el organismo desembolsará otro tramo del crédito. Serán alrededor de 7.000 millones de dólares destinados a cubrir necesidades presupuestarias pero que también reforzarán la estrategia monetaria del Banco Central.

La prioridad de la Casa Rosada es mantener la estabilidad cambiaria por lo menos hasta octubre. Esa determinación, que se apoya en una necesidad electoral cada vez más urgente, seguirá marcando el paso de la política monetaria ahora que el Central cuenta con el visto bueno del Fondo para intervenir sobre la cotización del dólar dentro de la banda de flotación.

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