El inicio de los vuelos comerciales desde el aeropuerto de El Palomar, en la zona oeste de Buenos Aires, tuvo algunas complicaciones ajenas a la compañía y a las autoridades.
El avión de la aerolínea Flybondi que debía aterrizar a las 7:15 partió dos horas más tarde de lo previsto de Córdoba por una tormenta eléctrica. Y cuando estaba llegando a Buenos Aires decidieron desviarlo hacia Ezeiza, también por cuestiones climáticas.
Finalmente, pasadas las 12, el avión arribó al aeropuerto y los pasajeros pudieron embarcar. Tanto el ministro de Transporte, Guillermo Dietrich, como el CEO de Flybondi, Jualian Cook, coincidieron en que se trató de "un día histórico" para la Argentina.
"En Argentina empezó a operar el primer aeropuerto low cost con la primera low cost", señaló Dietrich en una conferencia de prensa que inicialmente estaba prevista para las 7.30 de la mañana pero que finalmente se realizó con el arribo del avión a El Palomar.
El ministro destacó "las adaptaciones que hemos hecho en este aeropuerto de 110 años, para que funcione con concepto low cost", con una inversión de 100 millones de pesos.
Desde la compañía ofrecieron comida y bebidas a los pasajeros, que estuvieron cerca de seis horas en el aeropuerto aunque tomaron la demora con calma. En tanto, ya cancelaron los otros dos viajes que ese mismo avión debía realizar hoy desde Córdoba hasta Iguazú (a las 15.10), y el de regreso (fijado para las 17.30).
Flybondi tenía previsto inaugurar hoy los vuelos comerciales desde la base militar que fue remodelada especialmente en los últimos meses para adaptarla a las compañías low cost a las que el gobierno nacional busca darle impulso.
Esta mañana, en el interior del aeropuerto la felicidad y expectativas por el primer viaje dieron paso al nerviosismo por las demoras.
Según se informó oficialmente, el avión que aterrizó en Ezeiza viajó sin pasajeros a El Palomar para cumplir con el primer despegue de una low cost en esa terminal, rumbo a Córdoba.
En las afueras, frente a las entradas de pasajeros, un grupo de vecinos resiste a la lluvia con un cartel que reza "no al aeropuerto trucho", en una protesta contra el desembarco de las low cost en la base militar.
En ese sentido, el empresario suizo remarcó que el transporte aéreo "es la forma más segura de viajar" y por tanto desestimó las críticas a la seguridad de las operaciones tras dos episodios recientes que provocaron críticas. En enero, un vuelo de prueba debió ser abortado y hace pocos días decidieron trasladar por vía terrestre las valijas de los pasajeros del trayecto Bariloche-Córdoba para no sobrecargar la aeronave.
Desde Flybondi informaron que "el 100% de los vuelos de Córdoba sufrieron demoras por mala meteorología, incluido el vuelo de FlyBondi que volaba al Palomar".
Además, agregaron que el mal clima "se extiende en la zona de Buenos Aires" y que "en caso de que la meteorología no lo permita, el avión en vez de aterrizar en El Palomar aterrizará en Ezeiza, habilitado para operar ante cualquier eventualidad climática", como finalmente sucedió.