Retos y tendencias emergentes en el transporte marítimo

En diálogo con Movant Connection, Guadalupe comparte su visión sobre los principales retos que enfrenta la industria del transporte marítimo, desde la descarbonización hasta la automatización. Además, detalla cómo las tecnologías emergentes están transformando el sector, optimizando procesos y mejorando la eficiencia operativa en un entorno cada vez más competitivo y exigente.

Hoy en día, el mayor reto de la industria naviera es la descarbonización. Este sector es responsable del 3% de las emisiones globales de gases de efecto invernadero, y hay una carrera contrarreloj para alcanzar las emisiones netas cero en 2050. Esto requiere una inversión significativa en el desarrollo de combustibles más limpios, así como en tecnología y gestión sostenible de los residuos. Las regulaciones internacionales son cada vez más estrictas, lo que obliga a todos los actores a adaptarse rápidamente.

Otro gran reto es la automatización y digitalización. Estas tendencias han revolucionado la cadena de suministro, pero también suponen una necesidad de inversión y planificación estratégica. Además, los factores geopolíticos continúan interrumpiendo el flujo del comercio exterior.

La volatilidad en la demanda se ve afectada por varios factores. Entre ellos, los conflictos geopolíticos, que son retos para el intercambio comercial y producen interrupciones en el flujo de comercio exterior. Además, las diferencias en el desarrollo económico entre países también influyen directamente en el movimiento de carga, que depende de la demanda derivada del comercio global.

Otro factor es la congestión portuaria, causada por problemas de infraestructura y falta de inversión en muchos puertos. Esto genera demoras y problemas logísticos que complican aún más la situación. Todo esto obliga a la industria a adaptarse constantemente y buscar soluciones que minimicen el impacto de estas fluctuaciones.

Actualmente, el uso de la inteligencia artificial, el Internet de las cosas y el análisis de datos en tiempo real, están transformando el sector. Estas herramientas permiten optimizar rutas, mejorar la eficiencia, minimizar la vuelta de vacíos y brindar mayor control en la cadena de suministro, lo que reduce costos y tiene un impacto positivo en el medio ambiente.

Además, la tecnología asociada al blockchain están mejorando la trazabilidad y reduciendo el fraude en las transacciones comerciales, ofreciendo procesos más transparentes.

Por otro lado, las tecnologías aplicadas a las terminales marítimas están revolucionando la gestión operativa. Desde terminales totalmente automatizadas hasta sistemas de tecnología aplicada a terminales comunes que se facilitan de las mismas para tener una gestión más eficiente, para tener una plataforma digital de manejo de las operaciones a través también de sensores dentro de las terminales.

Entre estas tendencias también se ubican los esfuerzos de sostenibilidad. Se está trabajando mucho en la adopción de combustibles alternativos y en la eficiencia energética de los buques, en descifrar cómo lograr que la tecnología favorezca la eficiencia de los mismos con el objetivo de generar menor impacto ambiental.

Me gustaría decirles que el transporte marítimo es una industria dinámica y apasionante que está en constante evolución. En ese marco, se trata de un sector que ofrece un aprendizaje continuo y una perspectiva única sobre cómo funciona el comercio global.

Por eso, invito a quienes quieran explorar este mundo a informarse y tomar contacto. Participar en esta industria te hace ser parte de una red global que conecta al mundo, influyendo en el comercio, la economía y generando impacto en la vida de muchas personas todos los días.