La era sintética y su impacto en el comercio exterior son los ejes de esta entrevista brindada a Movant Connection en la que se exploran las virtudes de los entornos virtuales y de la implementación de tecnologías como el blockchain. Además, Chris destaca la importancia del reentrenamiento constante y de la conexión humana en un entorno cada vez más automatizado y en rápida evolución.
¿Qué es la era sintética y qué relevancia va a tener en el futuro del comercio internacional?
Cuando hablamos de sintético, nos referimos a una representación artificial de lo real. Todo lo que percibimos hoy como real, con la inteligencia artificial, lo vamos a volver a sintético. En la alimentación, por ejemplo, ya existen empresas que producen leche a base de vegetales que sabe igual a la leche animal. En el ámbito de la salud, el ARN mensajero abrió la puerta a vacunas sintéticas que respondieron rápidamente durante la pandemia. En términos de logística y comercio, lo sintético permite recrear entornos virtuales para entrenamientos y prototipos de distribución. Esta tecnología no solo optimiza procesos sino que también reduce la necesidad de espacios físicos, disminuyendo el impacto ambiental.
La conectividad y el avance en redes como el 5G y el 6G serán claves para el desarrollo de lo sintético. El avance en términos de conectividad potenciará la velocidad de procesamiento y permitirá que las empresas gestionen información en tiempo real desde múltiples ubicaciones, favoreciendo la logística global y la trazabilidad de los productos.
En ese marco, el impacto de la tecnología tenderá a amplificarse cada vez más, fusionando la inteligencia artificial con la vida cotidiana a una escala sin precedentes. A la vez, presionará para que tanto la industria como la humanidad deban adaptarse rápidamente a este ritmo acelerado de cambios.
¿Cómo se reinventa el comercio exterior en la era sintética?
La fusión de la inteligencia artificial con el comercio exterior permite nuevas formas de entrenamiento y simulación en entornos virtuales. El metaverso industrial, por ejemplo, permite replicar espacios y procesos, optimizando recursos y aumentando la productividad sin requerir siempre de un espacio físico. En este contexto, lo sintético no significa eliminar empleos, sino potenciarlos. Aquellas personas que sean científicos del conocimiento, que busquen desaprender y aprender constantemente, tendrán una ventaja competitiva.
Es vital que los profesionales en comercio exterior abandonen la mentalidad de que un título o una experiencia previa es suficiente. Hoy, la preparación constante y la capacidad para la adaptación son la clave. Por otro lado, actualmente existen tecnologías que mejorarán diferentes procesos, por ejemplo, el blockchain que tienen la capacidad de sumar seguridad en las transacciones y de reducir fraudes en el transporte de mercancías.
¿Qué recomendarías a los jóvenes y a los profesionales de más de 40 años?
A los jóvenes les diría que se preparen para una realidad en constante cambio y que se enfoquen en desarrollar una visión amplia que les permita ser flexibles y adaptables. Por otro lado, a los profesionales con experiencia, les aconsejaría que no se conformen con los títulos y que se reentrenen en tecnologías como la inteligencia artificial, el blockchain y la realidad virtual. No se trata solo de aprender una nueva herramienta, sino de cambiar la forma en que pensamos, actuamos y decidimos.
Uno de los efectos del advenimiento de la industria 5.0 será que el factor humano tomará mayor relevancia. Para destacar en comercio exterior y en cualquier sector en este nuevo contexto, será necesario conservar esa flexibilidad y humanidad que nos hace únicos y nos permite adaptarnos a los cambios disruptivos. Como sociedad, nuestro desafío es encontrar un equilibrio entre el avance tecnológico y la preservación de nuestra esencia humana.