Brasil: superávit comercial cayó 41% en septiembre por alza de importaciones

Brasil registró un superávit comercial de 59.119 millones de dólares entre enero y septiembre de 2024, lo que representa una reducción del 17,4% en comparación con el mismo periodo del año anterior, según datos divulgados por el Ministerio de Desarrollo, Industria y Comercio.

Durante el mes de septiembre, el superávit comercial brasileño sufrió una baja más pronunciada, con una disminución del 41,6% frente al mismo mes del año pasado. Las importaciones aumentaron un 19,9% anual, mientras que las exportaciones mostraron un leve crecimiento de 0,3%. La dinámica de los últimos meses ha reflejado un enfriamiento en las ventas de productos clave, especialmente en el sector agropecuario, que enfrenta desafíos climáticos como el fenómeno de El Niño.

La caída se atribuye principalmente a un crecimiento del 8% en las importaciones, que contrasta con el aumento de sólo 0,8% en las exportaciones. Estos resultados marcan un cambio significativo en la balanza comercial del país sudamericano, conocido por su fuerte perfil exportador.

El sector agropecuario, tradicionalmente uno de los motores de las exportaciones brasileñas, ha registrado una contracción acumulada del 8,4% en sus ventas al exterior durante los primeros nueve meses del año. Este retroceso se relaciona con los efectos adversos del fenómeno de El Niño, que afectó los ciclos productivos en la primera mitad de 2024, reduciendo la oferta exportable de productos agrícolas. Mientras tanto, las importaciones de bienes agropecuarios se incrementaron en un 25,6%, reflejando la necesidad de suplir la menor producción interna.

Brasil, reconocido como una de las potencias agrícolas mundiales, ha enfrentado dificultades para mantener su ritmo exportador en un contexto de demanda internacional volátil y limitaciones en la oferta debido a factores climáticos. Esta situación ha obligado a los exportadores a buscar nuevos mercados y ajustar estrategias de precios para mantener la competitividad de sus productos.

En medio de la desaceleración general del comercio exterior, las exportaciones de café brasileño han logrado destacarse, alcanzando cifras récord durante septiembre. El país exportó 4,46 millones de sacos de 60 kilos de café en dicho mes, lo que representó un incremento del 33,3% en comparación con el mismo mes del año anterior, según informó el Consejo de Exportadores de Café de Brasil (Cecafé). El ingreso generado por estas ventas también marcó un hito histórico, con 1.194 millones de dólares, un aumento del 84,5% interanual.

Este desempeño positivo del café se explica por una demanda sostenida en mercados clave como Estados Unidos, Alemania, Bélgica, Italia y Japón. Entre enero y septiembre de 2024, las exportaciones de café han sido las más altas de la historia, con un aumento del 38,7% respecto a 2023 y un crecimiento del 51,9% en los ingresos, alcanzando los 8.451 millones de dólares.

A pesar de estas cifras alentadoras, el sector enfrenta serios desafíos logísticos. Márcio Ferreira, presidente de Cecafé, advirtió que la falta de infraestructura adecuada y de espacio en los puertos brasileños ha dificultado el embarque de aproximadamente dos millones de sacos de café, que permanecen en los puertos esperando ser exportados. Esta situación genera retrasos en las entregas y afecta la competitividad de Brasil como proveedor global de café.

Los problemas logísticos que afectan al sector cafetalero no son un caso aislado, sino que forman parte de una problemática más amplia que enfrenta el comercio exterior brasileño. La alta demanda de productos en los puertos, combinada con la falta de modernización en la infraestructura portuaria, ha provocado cuellos de botella que impactan negativamente en los tiempos de exportación y en los costos para las empresas.

Sin embargo, la resiliencia del café brasileño, particularmente del café arábigo, que representa el 72,5% del total de las exportaciones, ha permitido al país mantener su liderazgo mundial en este mercado. El café robusta y el soluble también han registrado un buen desempeño, representando el 19,3% y el 8,1% de las exportaciones, respectivamente.

Este panorama subraya la importancia de la diversificación de productos dentro de la canasta exportadora brasileña, así como la necesidad de resolver los desafíos logísticos para aprovechar al máximo las oportunidades del mercado global.

El contexto general del comercio exterior brasileño sugiere que la recuperación del superávit comercial dependerá de la capacidad del país para superar las dificultades internas y adaptarse a un entorno global de comercio más exigente.