Combustibles: se determinó una suba de impuestos que impactará en nafta y gasoil

Desde el Gobierno también señalaron que, a partir del próximo martes, el valor de la nafta y el gasoil en surtidor bajará, lo que podría amortiguar el impacto del Decreto 863/2024

El gasoil es el combustible más utilizado en las flotas de camiones que circulan tanto a nivel nacional como internacional (Foto: Shutterstock)

El Decreto 863/2024, publicado recientemente en el Boletín Oficial, determinó un nuevo esquema de aumentos en los impuestos sobre los combustibles líquidos y el dióxido de carbono, los cuales comenzarán a regir de manera escalonada desde octubre, con un impacto pleno a partir de noviembre de 2024. La medida impactara en la nafta sin plomo, nafta virgen y gasoil.

De acuerdo con la escala de precios oficial, los impuestos subirán en torno a $782 para la nafta y $773 para el gasoil, lo que podría traducirse en un incremento generalizado en los costos de transporte. Sin embargo, desde el Gobierno señalaron que, a partir del próximo martes, el valor de la nafta y el gasoil en surtidor bajará debido a una caída del valor internacional del petróleo y a que en la época estival el costo del gas cede por el menor nivel de demanda.

De esa manera, la disminución en el precio de los combustibles podría contrarrestar en parte el impacto del aumento de impuestos, al menos en el corto plazo, ofreciendo un respiro temporal para las empresas logísticas y de transporte que enfrentan estos nuevos desafíos.

El impacto de estos aumentos de impuestos podría afectar principalmente al transporte de mercaderías por carretera, ya que el gasoil es el combustible más utilizado en las flotas de camiones que circulan tanto a nivel nacional como internacional.

Aumentos escalonados y su aplicación

El Decreto 863/2024 establece que, a partir de octubre de 2024, los impuestos sobre combustibles líquidos y dióxido de carbono se incrementarán gradualmente. Para el gasoil, el Impuesto sobre los Combustibles Líquidos subirá $9,731 por litro y el Impuesto al Dióxido de Carbono aumentará $1,109 por litro.

Por otro lado, la nafta sin plomo verá un incremento de $12,334 en el Impuesto sobre Combustibles y $0,756 en el de dióxido de carbono. Estas actualizaciones fiscales comenzarán a aplicarse a partir del 1° de octubre y se completarán desde el 1° de noviembre, fecha en la que entrarán en vigencia los incrementos totales.

Impacto en la cadena logística

El costo del combustible es uno de los componentes más importantes en la estructura de costos del transporte y la logística. Con los aumentos impositivos previstos, a pesar de la disminución anunciada, los operadores logísticos seguramente deben estar atentos a cómo terminen impactando estos movimientos en el valor total de los combustibles.

El gasoil, en particular, es el combustible más utilizado por los camiones de carga, por lo que esta situación podría generar un impacto en la logística de diferentes productos como alimentos, materias primas industriales y bienes de consumo masivo.

El costo del combustible es uno de los componentes más importantes en la estructura de costos del transporte y la logística (Imagen ilustrativa Infobae)

Además, el aumento en el costo de la nafta sin plomo afectará de manera directa la logística de última milla donde se utilizan vehículos más pequeños para la distribución de productos hacia los consumidores finales. Esto podría derivar en un encarecimiento de los servicios de entrega, afectando a las pequeñas y medianas empresas que dependen de precios competitivos para mantenerse en el mercado.

Mitigación temporal y lo que puede venir en noviembre

A pesar de los aumentos impositivos, el Gobierno ha anunciado, junto al presidente de la empresa de energía de bandera, una reducción en el precio de la nafta y el gasoil en surtidor que entrará en vigencia a partir de este martes.

Esta medida seguramente termine amortiguando el impacto de los nuevos gravámenes y evitando un traslado inmediato de los costos adicionales al precio de los combustibles en las estaciones de servicio. No obstante, la reducción en el precio de surtidor podría ser temporal, y los actores del sector logístico deben prepararse para enfrentar un aumento significativo en los costos a partir de noviembre, cuando los impuestos completos entren en vigencia.

El Decreto 863/2024 marca un nuevo capítulo en el manejo de los costos logísticos en Argentina. Mientras que la reducción temporal en los precios de surtidor ofrece un alivio momentáneo, las perspectivas a largo plazo sugieren que el sector deberá adaptarse rápidamente para mantenerse competitivo en un escenario de creciente presión fiscal y volatilidad en los costos operativos.