Suba de combustibles escalonada impacta en los costos logísticos

El Gobierno Nacional, a través del Decreto 770/2024, ha decidido implementar una parte del aumento en los impuestos sobre los combustibles que comenzará a regir a partir del 1 de septiembre de 2024. Por otra parte, una porción significativa de estos incrementos ha sido postergada hasta octubre.

El sector logístico se enfrenta a una nueva suba de costos, lo que podría impactar de manera inmediata en la cadena de suministro y en los precios finales de los productos. Siendo que, según la Federación Argentina de Entidades Empresarias del Autotransporte de Cargas (FADEEAC), los combustibles implican alrededor del 10% de los costos logísticos totales.

El incremento en los impuestos a la nafta sin plomo, la nafta virgen y el gasoil marca el inicio de un ajuste que amenaza con encarecer el transporte de mercaderías en todo el país. Este aumento, que comenzará a aplicarse de manera parcial en septiembre, ya genera preocupación entre los operadores logísticos, que ven cómo sus costos operativos se incrementarán en un contexto económico desafiante.

El transporte de carga, importante pilar de la logística en Argentina, depende de los combustibles. Con los aumentos impositivos que entrarán en vigencia en septiembre, las empresas de transporte deberán hacer frente a un aumento en sus costos que, inevitablemente, se trasladará a los precios de los productos y servicios que dependen de este combustible para llegar a los consumidores.

Esto podría generar un efecto en cadena, donde los aumentos en los costos del transporte podrían reflejarse en un incremento de los precios al consumidor en diversas categorías, desde alimentos hasta productos industriales.

Las empresas de logística seguramente evaluarán cómo absorber este aumento en los costos del combustible. Por otra parte, este escenario podría complicarse aún más en octubre, cuando entren en vigencia los aumentos impositivos diferidos, lo que podría provocar un nuevo salto en los costos operativos.

Con los incrementos en los impuestos sobre los combustibles activándose en septiembre, las empresas logísticas se enfrentan a un desafío considerable. Mantener la competitividad en un entorno de costos crecientes será una tarea difícil.

En resumen, aunque la mayor parte de los aumentos impositivos sobre los combustibles ha sido diferida, el ajuste que entra en vigencia en septiembre ya está poniendo en alerta al sector logístico. La capacidad de las empresas para gestionar estos nuevos costos será clave para determinar el impacto que estos aumentos tendrán en la economía en los próximos meses.

Por otra parte, esta semana, el Poder Ejecutivo Nacional, a través del Decreto 764/2024, ha implementado una serie de modificaciones en la estructura de diversas áreas del Gobierno. Entre las medidas destacadas se encuentran la creación de una nueva unidad ejecutora para la transformación de empresas públicas y la reconfiguración de organismos que tendrán impacto en el comercio exterior y la logística de Argentina.

Estas decisiones, enmarcadas en una política de reorganización y optimización del Estado, tienen como objetivo fortalecer la gestión y supervisión de entidades estratégicas que operan en sectores cruciales para la economía del país.

El impacto de estas medidas puede hacerse sentir en diversas áreas, incluyendo el comercio exterior, la infraestructura logística y la administración de puertos y vías navegables, todos elementos vitales para la competitividad internacional de Argentina.

El Ministerio de Economía ha sido uno de los ejes centrales de esta reestructuración. El decreto dispone la creación de la Unidad Ejecutora Especial Temporaria “Agencia de Transformación de Empresas Públicas”, una entidad destinada a coordinar la reestructuración, privatización, y, en algunos casos, disolución de empresas del Estado que juegan un rol fundamental en el comercio exterior y la logística.