El megapuerto de Chancay, situado en Perú, se perfila como un hito en la infraestructura portuaria de Sudamérica, destinado a convertirse en la principal puerta de enlace para el comercio entre el continente y Asia.
Esta obra no solo reducirá significativamente el tiempo de transporte de carga hacia China, de 45 a 35 días, sino que también marcará un antes y un después en el uso de tecnología avanzada en la región. La iniciativa promete un impacto económico y comercial notable, basado en la integración de tecnologías de punta para satisfacer la creciente demanda de los clientes.
La inversión destinada a la llegada de tecnología portuaria en Chancay asciende a aproximadamente 260 millones de dólares, lo que representa el 20% del valor total de la construcción del megapuerto, valorado en 1.300 millones de dólares.
Puerto de Chancay: innovación tecnológica en la logística
El gerente de operaciones del megapuerto, Carlos Ortiz Chamache, subrayó que este centro portuario incorporará toda la tecnología e innovación utilizada en puertos de renombre mundial como Tianjin y Shanghái. “Vamos a aprender de nuestra casa matriz cómo ellos aplican la automatización y la tecnología”, comentó Ortiz. A la vez enfatizó los avances con los que contará:
- Tecnología 5G: esta permitirá mejorar el ancho de banda e interconectar equipos portuarios como grúas y vehículos inteligentes, asegurando una operación más eficiente y coordinada.
- Automatización: las grúas automatizadas podrán dirigirse de manera autónoma a puntos específicos para realizar transacciones, reduciendo el tiempo de operación y mejorando la precisión.
- Reconocimiento facial: un sistema de cámaras OCR detectará automáticamente a los transportistas para facilitar el ingreso y salida del puerto, agilizando el proceso de verificación y seguridad.
- Energías renovables: la implementación de equipos 100% eléctricos contribuirá a la reducción de emisiones, promoviendo la sostenibilidad ambiental del puerto.
Ortiz también adelantó que este mes llegarán ingenieros de una empresa de propiedad estatal china junto con tres vehículos inteligentes y cinco grúas pórtico de patio, encargados de su instalación, acondicionamiento y armado.
Además, la visita servirá para entrenar al personal local para el uso de estos equipos durante el periodo de testeo de este año, contratando profesionales de la zona que recibirán el conocimiento y experiencia de ingenieros chinos.
Puerto inteligente en acción: las ventajas de la automatización
La automatización del puerto de Chancay permitirá operaciones ininterrumpidas durante 24 horas, algo que no sucede en otros puertos de la región debido a los cambios de turno y los horarios de refrigerio de los operadores. Al respecto, Ortiz explicó que, con esta tecnología, se espera alcanzar los 5.760 movimientos de contenedores diarios, lo que podría reducir los costos logísticos en un 20%.
“Va a ser el primer puerto inteligente o ‘Smart Port’ de Sudamérica”, afirmó Ortiz, destacando la magnitud de este proyecto que no solo modernizará el puerto de Chancay sino que servirá como modelo para otros puertos de la región.
Perú: Chancay como modelo a expandir
Mariela Gutarra, líder de gobierno y transformación digital de la Autoridad Nacional Portuaria (APN), aseguró que el puerto de Chancay no será el único puerto inteligente del país ya que el objetivo es que todos los puertos de Perú se conviertan en puertos inteligentes.
En ese sentido, Gutarra señaló que el puerto del Callao ya está en proceso de modernización e implementación de nuevos equipos portuarios que utilizan tecnologías como el Internet de las Cosas (IoT) y Big Data. Esto demuestra el compromiso de Perú por avanzar hacia una infraestructura portuaria más eficiente y sostenible, posicionándose como un líder regional en la adopción de tecnologías inteligentes en el sector logístico.
En ese marco, la inauguración del megapuerto de Chancay como el primer puerto inteligente de Sudamérica marca un paso significativo hacia la modernización y eficiencia en el transporte marítimo en la región. Con una inversión robusta y un enfoque en tecnología avanzada, el proyecto no solo mejorará el comercio entre Sudamérica y Asia, sino que también establecerá nuevos estándares para la operación portuaria en el continente.