El índice GEP es una herramienta esencial para profesionales de adquisiciones, compras y cadena de suministro a nivel mundial. Se basa en datos recopilados de una encuesta mensual que involucra a 27.000 empresas, proporcionando una visión exhaustiva de las condiciones actuales del mercado.
Este índice cubre aspectos como la escasez, costos de transporte, niveles de inventario y retrasos, ofreciendo una perspectiva integral sobre los desafíos y la dinámica del sector.
Las cadenas de suministro globales, tras enfrentar desafíos como shocks de oferta, inflación e incertidumbre durante cuatro años, están mostrando un notable repunte en su actividad.
“Tras cuatro años de shocks de oferta, inflación, almacenamiento e incertidumbre, las cadenas de suministro globales ahora operan dentro de una zona de Ricitos de Oro, caracterizada por un estado estable de plena capacidad”, comentó Mike Seitz, vicepresidente de GEP Consulting. “Este desarrollo es una excelente noticia para los proveedores y empresas globales”.
¿Qué produce este repunte?
Las fábricas en Asia están incrementando sus adquisiciones de insumos para satisfacer el aumento en los pedidos. Este impulso coincide con las iniciativas diplomáticas para eliminar las barreras comerciales en Europa.
En América del Norte, los fabricantes están enfrentando desafíos para cumplir con los pedidos debido a la falta de personal y escasez de materiales.
Los costos de transporte globales han subido ligeramente tras recientes incrementos en los precios del petróleo.
En abril, el índice de volatilidad de la cadena de suministro global del GEP aumentó a -0,18 desde -0,32 en marzo, lo que indica una proximidad a la capacidad total de las cadenas de suministro globales. Este incremento en la actividad se debe a una mejora en los patrones de demanda, especialmente en Asia, donde los gerentes de adquisiciones reportaron un aumento en la actividad de compras.
Sin embargo, América del Norte está experimentando un ajuste de capacidad, con informes que indican una acumulación de pedidos pendientes, mientras que en Europa las condiciones de demanda siguen siendo débiles, aunque la desaceleración industrial está comenzando a aliviarse.
El índice de volatilidad de la cadena de suministro global de GEP se publica mensualmente y resulta de una colaboración entre S&P Global y GEP. Se basa en las encuestas PMI de S&P Global que se distribuyen a 27.000 empresas a nivel mundial.
Este índice principal se calcula como una agregación ponderada de seis subíndices que se derivan de los datos del PMI, los comentarios de los rastreadores del PMI y los indicadores de oferta y precios de productos básicos proporcionados por S&P Global.
Un valor positivo en el índice indica una capacidad limitada de la cadena de suministro, llevando a una mayor volatilidad. Cuanto más alto sea el valor, mayor será la presión sobre la capacidad. En contraste, un valor negativo señala una capacidad de la cadena de suministro que está siendo subutilizada, lo que resulta en una menor volatilidad. Cuanto más bajo sea el valor, mayor será el grado de subutilización de la capacidad.
Variables principales
En abril, la demanda mundial de materias primas, productos básicos y componentes se mantuvo cerca de su promedio a largo plazo, lo que representa una mejora significativa en comparación con los meses finales del año pasado. En este sentido, Asia fue un motor clave de este crecimiento positivo, con naciones manufactureras importantes como China, India y Corea del Sur reportando expansiones.
En abril, la reducción de inventarios continuó, aunque a un ritmo más lento que en marzo. Además, los casos de acumulación de inventarios debido a preocupaciones sobre los precios o la disponibilidad de suministros alcanzaron sus niveles más bajos en más de cuatro años.
Los informes sobre escasez de materiales, incluidos semiconductores, alimentos, productos químicos y metales, siguen siendo históricamente bajos.
Después de tres meses de incrementos, los informes sobre acumulación de pedidos pendientes debido a la escasez de personal disminuyeron en abril, retornando a niveles más acordes con las normas históricas. Notablemente, América del Norte destacó por experimentar una escasez de mano de obra más significativa en comparación con otras regiones.
Tras los recientes aumentos en los precios del petróleo, los costos del transporte global experimentaron su primer repunte del año en abril.