El hombre de 29 años fue detenido por la Guardia Civil, acusado de un delito de lesiones cuando le habría arrancado un trozo de oreja de un mordisco a otro pasajero, en un vuelo procedente de Birmingham.
Según lo conocido, la tripulación del avión le habría negado el acceso a las bebidas alcohólicas a causa de un evidente estado de embriaguez. Ante esta negativa, el joven habría intentado abrir el compartimiento de bebidas, desobedeciendo las indicaciones del personal.
Cuando los agentes estaban siendo notificados de lo sucedido; se sorprendieron al encontrarse al hombre, nuevamente, en una pelea. El pasajero estaba peleando con otro, al que le había arrancado parcialmente la oreja derecha de un mordisco.
La víctima fue trasladada a una clínica de Palma donde fue ingresada por las lesiones que le provoco el agresor, quien fue reducido e inmovilizado para proceder a su detención por medio de la Guardia Civil.
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