Dan Mackay tiene uno de los hobbies más interesantes que puede tener alguien: es un verdadero cazador de tesoros. Solía pasar todo su tiempo escarbando territorios donde alguna reliquia había sido encontrada, dando con preciosos objetos de tiempos casi olvidados. Sin embargo, ahora está en la búsqueda de algo mucho más valioso que una antigüedad.
Estaba hurgando cerca de un cañón antiaéreo que se había utilizado por los ciudadanos durante la Segunda Guerra Mundial, cuando su detector de metales sonó la alarma: tras escarbar por unos minutos dio con lo que primero le parecieron miles de monedas.
Eran miles, pero se trataban de placas identificadoras, 14 mil para ser más exactos.
"No estaba seguro de lo que había encontrado por lo que permanecí allí con la boca abierta durante varios minutos. Luego del primer hallazgo, volvimos un tiempo después al mismo lugar e increíblemente volvimos a extraer más de 2000 placa más. Encontramos identificaciones de miles de soldados de alto y bajo rango, verdaderamente un hallazgo extraordinario", aseguró Mackay a metro.co.uk.
Todas se remiten a la guerra contra el nazismo, con siglas y apellidos de hombres que arriesgaron o incluso dieron sus vidas por proteger algo en lo que creían. Mackay decidió tratar de encontrar a sus dueños o sus familias.
Mackay debió remitirse a utilizar el Internet para ubicar a las familias de sobrevivientes, ocho de las cuales ha encontrado y reporta que lo han recibido con mucha emoción. Incluso lo han contactado desde varios países diferentes. Quiere que todas las placas vuelvan donde corresponden.