En días recientes, elementos de la Secretaría de Marina (Semar) y de la Agencia Nacional de Aduanas encontraron un importante cargamento de droga en las instalaciones del Aeropuerto Internacional Benito Juárez de la Ciudad de México (AICM), el cual estaba escondido en distintas piezas de decoración.
Según lo especificado por la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana (SSPC), los hechos ocurrieron el pasado 24 de enero, cuando las autoridades efectuaron una revisión a una serie de paquetes con equipo no intrusivo de rayos gama.
A partir de esta primera inspección, el personal naval decidió realizar un segundo análisis de las cajas de cartón, las cuales estaban aseguradas con cinta adhesiva. Al interior de las mismas encontraron un total de 75 cuadros decorativos que, en conjunto, registraron un peso de 242.6 kilogramos.
No obstante, los objetos que aparentaban ser simples piezas de adorno con imágenes de paisajes y representaciones artísticas tenían incrustados cristales con metanfetamina y clorhidrato de metanfetamina, por lo que fueron asegurados por la Semar.
La metanfetamina es un estimulante del sistema nervioso central con un alto potencial adictivo. Su forma más común es la del clorhidrato, que es perceptible como un polvo blanco y cristalino que no tiene olor, presenta un sabor agrio y es fácilmente soluble en agua o alcohol.
Hasta la mañana del 27 de enero, ninguna corporación había emitido un pronunciamiento público respecto al origen o destino de este cargamento y se desconoce el peso total de los narcóticos incautados. De igual manera, no ha trascendido información que permita ubicar a la o las personas responsables detrás del intento por trasladar este paquete.
Escondites de droga en el AICM
En distintas ocasiones, autoridades federales y de la CDMX han incautado narcóticos que estaban escondidos en diversos recipientes y productos durante su paso por el AICM. La madrugada del 8 de diciembre de 2024, agentes de la Fiscalía capitalina aprehendieron a un ciudadano extranjero, identificado como Chungho “N”, debido a que en su maleta llevaba varias latas de fruta en almíbar que, en realidad, contenían droga.
Un par de meses antes, el 29 de septiembre, personal de la Semar detectó un paquete sospechoso que tenía como destino la ciudad de Johannesburgo, en Sudáfrica. Al efectuar una inspección más exhaustiva, los agentes navales detectaron que el paquete llevaba en su interior 72 kilogramos de metanfetamina, por lo cual quedó bajo el resguardo de las fuerzas federales.