Células contrarias del Cártel de Sinaloa y el Cártel de Juárez han sostenido, durante al menos cuatro años, una confrontación en la zona serrana de Chihuahua que se ha hecho visible no sólo en homicidios y ataques a las autoridades, sino en el desplazamiento forzado de la población.
En una reciente entrevista con El Sol de Parral, un visitador de la Comisión Estatal de Derechos Humanos (CEDH) estimó que en el municipio de Guadalupe y Calvo hay registros de alrededor de 90 familias que han abandonado sus comunidades debido al incremento de la violencia perpetrada por La Línea (del Cártel de Juárez) y Los Salgueiro (del Cártel de Sinaloa).
“Los niños no pueden asistir a la escuela, las familias no pueden dedicarse a la siembra ni realizar actividades diarias con normalidad por el temor a la violencia”, expuso Juan Portillo Díaz, de la CEDH, al periodista Abraham Holguín.
Para llevar a cabo acciones de atención y acompañamiento a estas comunidades, la CEDH ha mantenido una constante coordinación con líderes comunitarios, instituciones religiosas y autoridades locales. Desde septiembre de 2024, la Comisión manifestó que las personas entrevistadas habían solicitado principalmente orientación jurídica y vigilancia.
En relación con los hechos de violencia registrados durante las últimas semanas, el fiscal general César Jáuregui Moreno rechazó que se hayan registrado éxodos masivos y apuntó que el auxilio para abandonar temporalmente las comunidades ha sido solicitado en “casos particulares”.
“Nuestra prioridad es siempre salvaguardar a la población civil. No queremos que estos conflictos terminen afectando directamente a los habitantes”, manifestó en conferencia de prensa.
La noche del 1 de enero, automovilistas que circulaban cerca del arco de entrada a Guadalupe y Calvo localizaron los cuerpos colgados de dos hombres. Tres días antes, el 29 de diciembre de 2024, un joven fue hallado en ese mismo punto y en circunstancias similares.
A esto se suma que durante la última semana de diciembre se registraron por lo menos tres ataques con explosivos lanzados desde drones, los cuales iban dirigidos a integrantes de la célula de la Base de Operaciones Interinstitucional (BOI) desplegada en la zona.
Desde junio de 2020, el municipio de Guadalupe y Calvo ha sido escenario de una disputa entre Los Salgueiro y La Línea que presuntamente estalló tras el desplome de una avioneta en el municipio de Balleza.
La caída de la aeronave, supuestamente provocada por un ataque de Los Salgueiro, dejó un saldo de seis personas muertas —cuatro menores de edad y dos adultas— identificadas como familiares de Ildefonso ‘Poncho’ Arellanes, un líder criminal de la región cuyas actividades se remontan por lo menos a principios de la década pasada.
En ese entonces, ‘Poncho Arellanes’ lideraba una célula independiente con presencia en Chihuahua, Coahuila y Durango. Este hombre fue detenido junto con otro sujeto en 2012, según reportes del Diario de Chihuahua, pero se desconoce la fecha en que recuperó su libertad, así como el momento en que habría asumido su actual rango en La Línea.