La Asamblea General de Naciones Unidas declaró que el 2025 se conmemorará de manera internacional la ciencia y tecnología cuántica debido al impacto que ambas tienen en la vida diaria.
De acuerdo con Ciencia UNAM, las posibles aplicaciones de estas disciplinas “pueden conducir a soluciones para los graves problemas de la actualidad relacionados con la salud, el cambio climático, las comunicaciones, el agua limpia y la energía”.
Ana María Cetto y el embajador Ismael Madrigal destacan que es importante la mecánica cuántica debido a que “ha contribuido a un mejor entendimiento del comportamiento de la materia y la energía a escalas atómicas y subatómicas”.
La propuesta internacional de Ana María Cetto
Según el artículo El largo camino hacia la declaración de 2025 como el Año Internacional de la Ciencia y la Tecnología Cuántica, la doctora Ana María Cetto, investigadora del Instituto de Física de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), quien participó en la conformación y presentación de la propuesta del Año Internacional de la Ciencia y Tecnología Cuántica, el trabajo consistía en “apoyar esta iniciativa y conducirla por el camino necesario para que fuera adoptada por la Conferencia General de la UNESCO para que llegara a las Naciones Unidas”, explicó la universitaria.
Ciencia UNAM señala que al principio el equipo estaba conformado por cuatro personas, incluida la doctora Cetto y menciona que su participación fue importante debido a que anteriormente había participado en la organización del Año Internacional de la Luz, por lo que su experiencia jugó un papel fundamental.
Posteriormente, colaboró con el embajador Juan José Bremer, quien es representante permanente de la Delegación de México ante la UNESCO y quien brindó apoyo total a la iniciativa, por lo que a partir de ese momento se organizaron reuniones informativas con el respaldo de la comunidad de física internacional.
Luego de explicar a los demás delegados la importancia de la mecánica cuántica y mencionar qué relación tiene el ser humano con ella, la manera en la que forma parte de la vida diaria y cómo puede contribuir a mejorar la ciencia, tecnología y economía de los países, señaló que “se contó con una aprobación prácticamente total con la recomendación de que la UNESCO llevara el asunto a la consideración de la Asamblea General de las Naciones Unidas”.
Finalmente, la iniciativa fue presentada ante las Naciones Unidas por el embajador de Ghana y la doctora Cetto, quien además es profesora de la Facultad de Ciencias de la UNAM, destacó que el convencimiento de los diplomáticos y sus gobiernos, fue que tanto la ciencia como la tecnología cuánticas tienen mucho que ver con nuestra vida diaria.
“La ciencia y la tecnología cuánticas están en todos los ámbitos de la vida de la sociedad humana, del desarrollo tecnológico y del sistema productivo, lo cual tiene un impacto muy positivo en nuestras economías”, explicó Cetto.
Con esto también mencionó que es una oportunidad para generar capacidades propias de fabricación científica y desarrollo tecnológico, pues el tema llama mucho la atención de los países debido a que “si nos quedamos fuera seguiremos dependiendo de las tecnologías de otros”, puntualizó la investigadora de la UNAM.
Después de un arduo trabajo, el 7 de junio de 2024 se proclamó el Año Internacional de la Ciencia y Tecnología Cuántica por parte de la Asamblea General de las Naciones Unidas y a partir de ese momento comenzaron a formarse distintos comités que debían atender desde la planeación y organización de la ceremonia de inauguración hasta la vinculación del sector productivo con las universidades, centros de investigación y con financiadores de eventos nacionales e internacionales.
Su relación con la producción y la educación
Ana María Cetto, quien en 2023 recibió el Premio Kalinga de la UNESCO en reconocimiento a su labor como divulgadora de la ciencia, explica que en México se investiga mucho respecto a la física cuántica en múltiples universidades y centros públicos de investigación.
“A veces la gente hace investigación relacionada con la física cuántica sin darse cuenta de ello y este año internacional también va a brindar la oportunidad de conocernos más y saber qué se está haciendo en las diversas instituciones y cómo podemos trabajar juntos”, afirmó.
Con esto también destacó que es necesario que los científicos que trabajan con la ciencia cuántica interactúen con otros sectores de la sociedad que quizá se están beneficiando de estas aplicaciones aún sin saberlo.
“Estoy convencida de que nuestro sistema productivo necesita un impulso y que para acercarnos a la soberanía y la independencia tecnológica es necesario que se aprovechen los productos de estas investigaciones y que sean nichos para una investigación y desarrollo tecnológico propio”.
Además, considera que es necesario establecer diálogos significativos con el sistema educativo, pues en México y otros países existe la preocupación de que el contacto con la ciencia y lo que ésta significa, sobre todo a nivel primaria y secundaria, es reducido.