Actualmente México cuenta con avanzado reglamento para el control de tabaco como parte de las medidas de salud pública implementadas por el gobierno Federal.
Cada vez se restringen más los lugares para los fumadores y productores. La prohibición de toda forma de publicidad, promoción y patrocinio del tabaco, a través de cualquier medio de comunicación y difusión, incluida la exhibición directa e indirecta de los productos del tabaco en puntos de venta.
Ni qué decir de la ampliación de los espacios 100% libres de humo y emisiones en cualquier lugar de trabajo, espacios de concurrencia colectiva como plazas, parques, playas, estadios, así como en el transporte público y las escuelas en todos los niveles educativos, incluidas las universidades.
Pese a ello, quienes aún no desisten de su adicción al cigarro, pareciera que uno de los lugares donde pueden disfrutarlo es en el automóvil, pero al hacerlo ¿Infringen la ley?
¿Qué dice la ley?
Las autoridades han hecho hincapié mediante campañas informativas de los riesgos que conlleva fumar o vapear, el cual es uno de los principales factores de riesgo para el desarrollo de enfermedades crónicas. Hacerlo en lugares cerrados o con poca ventilación como el automóvil contribuye a exponenciar los riesgos.
Si bien en los reglamentos de tránsito de la Ciudad de México y del resto de los estados no imponen multas por realizar dicha actividad, sí existen sanciones económicas por las distracciones que comprometen la atención al volante.
Por su parte, la Ley General para el Control del Tabaco, prohíbe fumar dentro de vehículos si hay menores de edad, mujeres embarazadas o personas vulnerables a bordo, normativa que aplica para cigarros y vapeadores, debido a los automotores son considerados espacios cerrados, por lo que hacer caso omiso o ignorar tal ordenamiento puede generar sanciones económicas a los conductores.
Aunado a lo anterior, cabe destacar que recientemente el Congreso de la Unión aprobó la reforma constitucional que prohíbe la importación, comercialización y distribución de estos dispositivos electrónicos, llámese vapeadores, por ende, el vapear será una acción ilícita.
El tabaquismo es un problema de salud en el cual el gobierno invierte 116 mil millones de pesos cada año en gastos de atención médica por enfermedades asociadas, por ello, la implementación de medidas limitan cada vez a las personas fumadoras mediante la promoción de la desnormalización del consumo de tabaco y nicotina lo que a la postre, prevén autoridades, generará grandes beneficios a la salud pública.